La Vida De Una Adolescente (Editando)

Casi me ahogo parte 2

Esta parte no es tan literal como la otra.

En esta parte me ahogaba con mis sentimientos y pensamientos.

Cuando cursaba sexto grado conocí a una nueva amiga la cual se llama Victoria y se hicieron muy amigas.

Victoria, Mariela y yo éramos muy amigas y como siempre no faltaba la niña que tuviera celos de nuestra relación.
En este caso la niña que sentía celos de nosotros era una niña hipócrita que quería separarnos a como fuera, a una le hablaba mal de las otras dos y a la otra hacia lo mismo, conmigo lo hizo, me habló mal de mis otras dos amigas y siempre terminábamos descubriendo la verdad.

Un día nos fuimos de excursión a un parque y la pasamos muy bien, era la primera vez que yo iba a ese parque y por poco y me perdía pero allí estaban mis amigas, aunque ellas me prometieron que no me dejarían sola no les creí por lo que me pasó en otra excursión hacía unos dos años.
Desde esa vez me cuesta confiar en las personas, siempre he tenido miedo de la decepción, pero siempre termino perdonando a todos los que me decepcionan, yo no puedo odiar a nadie, así me hicieran lo peor.
Victoria y yo nos pasamos juntas ese día porque Mariela se fue con otras niñas y nos dejó, nos sentíamos tristes porque Mariela no estaba con nosotras pero la ocasión en la que estábamos era para disfrutar.

Pasados varios días tuvimos nuestro examen final, y lo pasamos pero teníamos otro examen súper importante, era el de admisión en la nueva escuela donde estudiaríamos, si no lo pasábamos no podíamos entrar allí.
Cuando terminaba la jornada de estudios diarios nos quedábamos un tiempo con nuestra maestra para que nos diera clases para el examen que debíamos pasar, sin embargo cuando nosotros salíamos llegaba la mamá de Romina la niña que nos quería separar; todas teníamos sospechas de que ella le pagaba a nuestra maestra para que la hiciera ganar y así tener un lugar entre los mejores de la clase y de la escuela en general.

Al final termino siendo cierto que le pagaban a la maestra, pues otra compañera llamada Hellen y yo siempre éramos parte del cuadro de honor y ese año no lo fuimos por culpa de Romina.

No le di mucha importancia a ese asunto en ese momento.

Llego el día de la graduación y le mande un mensaje a mi padre para decirle que llegara a compartir conmigo, lo espere en mi casa y no llego.
Lo espere en la escuela antes de que empezara el acto pero tampoco llegó.

La ceremonia termino y el no apareció, estaba muy triste y mama me dijo:
-No te preocupes, a lo mejor tuvo una emergencia y no pudo venir por eso.

Así termino ese día: otro logro el cual papá no compartió conmigo.