Nuestro Destino.

Despedidas y Soledad.

Desde aquél baile de graduación, ya pasaron dos largas semanas. Dos semanas en las que todo ha cambiado radicalmente. Lo más doloroso de todo, es que después de todo, Ross sí se fue. Justo la noche del baile de graduación, lo que a Laura le dolió mucho, pero tuvo que ser fuerte, como siempre lo hizo en la vida.

Ross esa noche no se quiso despedir de nadie, él simplemente se retiró al lado de su madre en un silencio sepulcral. La chica que amaba había roto su corazón en mil pedazos, aunque sabía que una relación a distancia podría ser difícil, él estaba más que dispuesto a intentarlo, pero ella no. Ahora seguiría los pasos de su padre, lejos de todos sus amigos y de la chica a la que siempre amará, las cosas serán difíciles...

Laura se sentía muy culpable por lo que hizo, aunque de cierto modo, también sentía que hizo lo correcto, porque sino ambos hubieran sufrido mucho. Además, ella hubiera sido un estorbo en la vida de Ross, ya que eran muy diferentes y no encajaban en el mundo del otro. La situación era compleja, sin importar de que punto la veas.

—... —

Laura pensaba que lo único bueno que había ocurrido en esas dos semanas era que por lo menos ya le habían quitado el yeso, así que ya tenía más movilidad.

Tocaron la puerta, ella se levantó para abrir y se encontró con Riker, Vanessa y él abuelo del primero. Rápidamente los invitó a entrar, ellos lo hicieron y se quedaron en el comedor por unos minutos. Laura cerró la puerta y les ofreció algo de comer, pero ellos no quisieron nada. Tampoco se sentaron, Laura los observaba un poco confundida, no esperaba tener visitas, aunque era una sorpresa agradable.

—Gracias por ser mí amiga —comenzó Vanessa —. Eres una chica con muchas agallas y eso es algo muy admirable. Nunca cambies.

—Es cierto, nunca dejes que nadie te haga cambiar lo que eres, porque con ese carácter y esa personalidad estoy seguro de que llegarás lejos —la pareja asintió, Laura observaba todo perpleja. ¿Por qué habían ido a su casa solo para decirle cosas tan lindas?, ¿acaso se habían puesto de acuerdo?

—Y yo te quiero agradecer por haberme ayudado a localizar a Vanessa —estaba sorprendida de que él anciano también quisiera darle las gracias, eso no se lo esperaba —. Fuiste una pieza clave para que pudiera encontrar a mí nieto.

Los tres se dieron un fuerte abrazo grupal, lleno de sentimientos. Al separarse, Riker le comentó que todo eso fue debido a una despedida, ya que todos ellos se irán a Inglaterra.

Después de que ellos se marcharán, Laura se sintió más solitaria aún. Fue un golpe muy bajo para ella, como cuando perdió a Ross. Todo esto era muy doloroso para ella.

—... —

Lo más desolador de todo fue pasar Navidad sola por primera vez en toda su vida. Simplemente durmió, no hizo nada especial. Sentía que en cualquier momento caería en una profunda depresión y que nadie podría ayudarla.

Al siguiente día recibió una llamada de Rydel, que le informaba que ella y Ellington la irían a visitar. Laura se sintió feliz de tener visitas, aunque la rubia le pidió que no prepare nada en especial, porque sería una visita rápida. Laura sólo esperaba no recibir más malas noticias, ya había pasado por muchas despedidas.

Al llegar, se sentaron en el comedor para tomar un poco de té. Aunque no quisieron comer nada, ni siquiera pan con mermelada de mora.

—No hemos sabido nada de Ross —le dijo Ellington. Ella sintió una fuerte presión en el pecho.

—Pero las cosas pueden cambiar —Rydel intentó ser positiva al respecto.

Laura no quería decepcionarse más, así que cambió el tema. Hablaron de diversos temas, nada en especial. Al terminar de beber los tés, ellos se despidieron con un fuerte abrazó. Ellington le informó a Laura que habían pasado para despedirse, ya que ellos se irían a París, para organizar su boda. Laura los felicitó, los abrazó y les deseó mucha suerte. Después de ello, ellos se marcharon.

Laura se daba cuenta de que su grupo de amigos se estaba desarmando cada vez más, eso era terrible. De los "Cuatro Ángeles", ya ninguno seguía unido, lo que resultaba muy decepcionante.

—... —

La llegada del Año Nuevo, 2017 también fue solitaria. Estuvo sola y al sentirse de ese modo, por primera vez en su vida, recibió el año llorando amargamente. Su vida parecía no tener arreglo.

Mientras lloraba, sintió que su celular vibraba. Se sentó en el sillón, lo tomó entre sus manos y vio que se trataba de un mensaje de texto.

No puedo tolerar esto por más tiempo. Ya ha pasado bastante cómo para que me digas lo que piensas. Dime: ¿aún quieres que estemos separados o ya te arrepentiste de lo qué dijiste en el baile? Sólo te pido que seas sincera.

Era un mensaje de Ross. Saber de él hizo que finalmente pudiera sonreír, saber que él también pensaba en ella la hacía sentir dichosa. Pero... aún se sentía confundida.

¡Comenzamos con la segunda temporada de "Cuatro Ángeles"!