ERICK-Creemos Solo En Lo Que Vemos

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Después de ver la aburrida clase de ciencias con la señorita evangeline, Salí del aula y me dirigía caminando lentamente hacia el comedor para desayunar, deseando no encontrarme a Erick en todo el día.

Lastimosamente no tarde en encontrármelo de frente cuando me voltee con la bandeja en las manos dispuesta a recibir mi comida y sentarme en alguna mesa vacía,

¡Por qué, cuando quería comer en paz!

-hola...

-hola Erick

-que tal te pareció la clase de ciencias?

-aburrida como supongo son todas-dije sin mucho interés

-sí, fue algo perversa-dijo quedándose sin tema de conversación

Se veía muy bien cuando miraba al piso sin saber que decir, se tensionaba su mandíbula y lo hacía lucir sexy. No quería ser grosera con él, solo que escondía cosas que creía un poco insignificantes, quería hablar con él, sentarnos tranquilos y charlar sobre nuestro pasado, no entendía porque era tan complicado.

Sinceramente no era muy buena atrayendo chicos y que uno tan guapo se acercara a mí solo porque le agrade desde el principio y no por una apuesta era algo muy extraño, me lo debía explicar en algún momento, y si no hablaba con el ¿cuándo iba a obtener todas mis respuestas?

-quieres sentarte conmigo-dije para que me mirara

-sí, claro! -dijo levantando la cara y mirándome con sus ojos oscuros

Tratar de entrar en sus ojos era como no poder ver nada, claramente no me detenía a mirarlos por mucho tiempo ya que sentía como si me atraparan en un laberinto sin una sola luz, debías salir de allí por tu cuenta o tratar de explorar solo con tus manos todo el espacio vacío que había en ellos y como ya saben, odio la oscuridad.

-criss, quería decirte algo que hice hoy-dijo sigilosamente

Por favor, que no haya hecho nada malo este torpe

-que hiciste?

-mira-dijo señalando hacia un pequeño lugar lleno de césped con un mantel de cuadros rojos y blancos y una canasta que suponía estaba llena de comida.

Me encantaban los picnics, me parecía algo completamente hecho para mí, al aire libre, en calma, reírse de tonterías mientras comes sándwich con jugo y frutas, era también algo romántico.

-lo hice para que pudiéramos estar un poco alejados y hablar de lo que quisieras-dijo sonriéndome

-que...lindo Erick, en serio, me encanta-dije mirando el pequeño lugar

-gracias-dijo con una gran sonrisa en su cara

Nos dirigimos hacia el pequeño mantel y nos sentamos uno al frente del otro, el cruzo sus piernas y se quedó mirándome fijamente, quería que yo empezara la conversación.

-emm...empiezo a preguntarte lo que quiero saber?

-si quieres, si

-bueno. Primera pregunta, ¿de dónde salió tu obsesión por mí?

-emm bueno, como te dije, ya hace más de un mes que vi tu ficha de entrada y me pareciste hermosa, no por ser galán ni nada, pero en serio fue así entonces sabía que llegarías esta semana así que estuve al pendiente de esa esperada llegada-dijo mientras me sonreía

-entiendo. segunda pregunta, ¿podemos ir al bosque de nuevo hoy sin actuar raro como dos personas totalmente normales?

sus ojos se iluminaron y por primera vez podía ver su pupila ya que el sol nos daba de frente, pero aun así eran demasiado oscuros, en ese momento reflejaban entusiasmo, no sé si le había agradado mi pregunta, pero por el cambio de su rostro supuse que sí.