Capítulo. 2 /Consecuencia y rescate/

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¿Cómo llegamos a esto?

Destrucción, terror, el gran logró que habían conseguido los omegas para vivir en paz se fue en un parpadear...

*1 hora atrás...*

Los omegas disfrutaban de la gran fiesta alocada del príncipe Sonic. Quien, a pesar de siempre organizar fiestas escandalosas y movidas, había hecho esta aun mas especial, ya que, hoy era el día en que él y sus hermanos cumplían 18 años, volviéndose él, un hombre y su hermana Sonia una mujer, celebrando también el cumpleaños de su difunto pequeño hermano Manic.

— ¡No los oigo mis omegas! — gritaba el azulado con un megáfono mientras bailaba por todo el lugar junto a su hermana.

— ¡¡¡SÍ!!! — gritaban todos los omegas felices por la fiesta.

—¡A bailar! — gritaba la reina al igual que sus hijos mientras bailaba junto a ellos.

— Oish, no entiendo como no comprenden que esto es una pésima idea — reprochaba para si mismo el cobalto idéntico al futuro rey mirando molesto el escándalo y desorden que hacían.

Mientras aquella "discreta" fiesta seguía su ruido un erizo verde de ojos azules se encontraba bajo tierra intentando no oír el molesto ruido causado por la fiesta.

— Los van a encontrar, y no quiero estar ahí para verlo ni escucharlo, pedazos de idiotas — se quejaba molesto por la ingenuidad de los de "su raza" volviendo a construir sus armas.

Ignorando todo lo posible el ruido, los omegas seguían divirtiéndose en grande como si no les importase que esa noche existía una gran posibilidad que pudieran haber alfas cerca.

— Mh? — exclamó aquel cobalto guardián y protector del futuro rey al captar un pequeño y diminuto olor diferente pero conocido — No... Debe ser mi imaginación

Pero no, no solo era una simple coincidencia o confusión. Y era que ninguno sabia que un gran grupo de alfas ya hacia cerca, debido a que se encontraban examinando el lugar.

— Escuchen idiotas........ — indicó uno del grupo al escuchar un fuerte estruendo — ¿Lo huelen?

— Mmmh~ omegas... Jeje — rió con maldad uno de sus compañeros para dirigirse donde había captado el olor — El rey se pondrá feliz...

Y sin saber el peligro que les esperaba a los omegas, seguían bailando y celebrando hasta que el príncipe ordenó una leve pausa.

— Antes que todo, quisiera dedicar estas palabras a mi querida madre, quien hace más de 10 años.... Arriesgó su vida por ustedes, por mi y mi hermana, por mi hermano Manic quien no se encuentra entre nosotros y descanse en paz, por mi padre... Quien dio su vida por todos nosotros, por mi hermana Sonia, quien siempre los a apoyado a ustedes y a la familia real. Hoy yo declaro, que estoy feliz por ustedes, omegas, nuestro pueblo, quienes lograron salir adelante y.......... — habló tranquilo y feliz hasta que captó un fuerte aroma a lo que habían dejado casi en el olvido, alfas...

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