Una Nueva Oportunidad / Peter Parker/

Prólogo

- ¿Acaso esto es real?, no... esto no puede ser real... - eso es lo que repetia el joven parker, aún no podía creer lo que sus ojos veían, estar cayendo, justo como aquel fatídico día en el que murió su amada - Esto no es cierto... - repitió el chico mientras caía, pero a lo lejos, pudo divisar algo, ¡alguien estaba cayendo! - No puede ser esa es...- su mente le estaba haciendo una mala jugada, no podía ser ella, ella estaba muerta, él no la pudo salvar, él no pudo hacer nada para evitar que ella muriera - Gwen - musitó al ver aquella figura fantasmagórica.

Su amada caía lentamente, se podían observar las lágrimas de ella corriendo por su cara, mientras cerraba sus ojos aceptando su final.
- Tengo que salvarla ésta vez-pensó Peter- no dudó dos veces en lanzarse a ella.
Sentía la necesidad de tomarla, de volver a tener a Gwen en sus brazos.
Por un momento nada importaba, si era su Gwen o si era alguien más, ni siquiera el hecho de que fue su red lo que la mató.
Podría ser que la chica no fuera ella pero Peter la tomó en sus brazos y la llevó el tejado de un edificio muy alto.

El chico suspiró de alivio, ¡había salvado a gwen!, aún no podía creerlo - Te salvé... esta vez si pude salvarte... - gemía peter dolorosamente, aún estaba en shock - ¿Y de que sirve? ¡Estoy muerta! ¡No me salvaste en su oportunidad! - gritó la joven empujando a peter.

- ¡No, espera! ¡Gwen! - gritó desesperadamente parker, intentando hablar con ella- ¡Estoy muerta! ¡Todo es tu culpa Peter! - la joven lanzándose del techo del edificio empezó a transformarse en un enorme ave, Peter estupefacto miraba aquella escena, esa no era SU Gwen - ¡Te odio!- grito la joven antes de alejarse de aquel lugar - ¡No! ¡espera yo...! ¡Te amo! -

Peter despertó exaltado, le costaba mucho esfuerzo volver a respirar tranquilo.
Miró su reloj, se había despertado en la madrugada. Salió de las sábanas y se dirigió a su baño, necesitaba lavarse la cara ya que estaba sudando.
-Otra vez no...-se dijo a si mismo.
No había soñado a Gwen desde el día de su funeral.
Aún podía recordar aquel doloroso día, la madre de gwen llorando junto con sus hijos, hermanos menores de Gwen, Mary Jane junto con su tía mirando la tumba, y la tía May llorando, apretando en señal de consuelo la mano de Peter.