Siete meses después
Greg estaba sentado frente al ordenador, editando unas fotos que había tomado. Todas tenían el mismo fondo, pero los objetos fotografiados variaban de toma en toma. Siempre había un libro en ellas, y algunos elementos aleatorios como plumas, flores, hojas de libros, velas, luces led y muñecos coleccionables servían de decoración. Se sentía algo adormecido después de haber estado tomando fotos durante horas, pero debía terminar el trabajo para que su cliente estuviera satisfecho.
Bostezó sonoramente y abrió los ojos como platos cuando vio una taza de café ser depositada frente a él. Su sonrisa se hizo cada vez más y más grande, como cada vez que lo miraba. Porque aún no podía creer que Mycroft Holmes estuviese saliendo con él, a pesar de que ya hubiesen pasado más de cinco meses desde que ambos habían decidido que querían pertenecerse mutuamente. Después de que el pelirrojo le enviara su número por mensaje privado, habían intercambiado mensajes por más de dos semanas hasta que quedaron en verse. Al principio, ambos se tomaron todo con calma. Mycroft no quería involucrarse sentimentalmente sin antes conocerlo realmente, y Greg no quería terminar con el corazón roto por una falsa ilusión, por lo que fueron construyendo todo paso a paso, sin precipitarse. Inicialmente, y a pesar de saber que ambos tenían cierto interés de tono romántico, Greg comenzó a frecuentarlo con la excusa de ayudarlo con las fotografías para sus post de Instagram, convirtiéndose rápidamente en su colaborador. Con el correr de los días, el trabajo se convirtió en placer y en la necesidad de pasar tiempo junto a él. Sí, Greg aún era su colaborador, además de su novio. Y por eso estaba editando las fotos con tanto amor y dedicación. El Instagram de Mycroft nunca había estado tan activo, y todo el mundo hablaba de la perfección de las fotografías. Hacían un gran equipo. A ellos, se había sumado un particular grupo de trabajo. Molly, Irene y John eran las nuevas estrellas del canal de YouTube de Mycroft. Greg le había contado toda la historia al pelirrojo, y éste los había contactado para darles espacio y permitir que se dieran a conocer masivamente a través de su canal. A su vez, los habían contratado de varias convenciones para firmar autógrafos y tomarse fotografías, debido al creciente interés del público por ellos. Todos se llevaban muy bien y estaban muy felices de ser parte del proyecto, por lo que en el ambiente reinaba la paz y la buena energía.
Por su parte, Greg continuaba en una nube. Nosólo tenía nuevos amigos y podía dedicar su tiempo a su arte, sino que ademásestaba junto al hombre que amaba, ayudándolo a cumplir sus sueños y siendoparte activa de ello. Había dejado su aburrido trabajo en la pizzería paratomar clases de fotografía y edición de video y ahora, además de darle una manoa Mycroft con sus fotos y su canal de Youtube, era asistente de un fotógrafo yestaba aprendiendo mucho sobre el tema. Su relación con el pelirrojo no podíair mejor. Pasaban muchísimo tiempo pensando en futuros proyectos, creandojuntos un concepto de mañana queambos adoraban. Porque estaban seguros que lo suyo era para siempre. La vida los había encontrado de una forma insólita,pero no por eso sentían menos. Habían construido su relación con pequeñasmuestras de afecto, descubriéndose en cada gesto, demostrando con creces que aveces la vida te sorprende, y que siempre hay que estar abiertos a lo que eldestino nos quiera regalar. Greg sabía muy bien que su devoción era ahoracorrespondida, y nada podía hacerlo más feliz.
ESTÁS LEYENDO
Sweetest Devotion
FanfictionMycroft Holmes es un Youtuber con miles de seguidores. Y Greg Lestrade no puede dejar de pensar en él. Gracias al grupo #TeamMystrade de WhatsApp por el incentivo ♥