Pedaleo, coso, paro. Remuevo la tela, pedaleo, pedaleo, pedaleo, pedaleo uno, dos, tres, cuatro y vuelvo a parar. Lo volteo y extiendo, corto los restantes de hilos, planto el vestido en la mesa de planchar y con cuidado lo plancho por algunos minutos. Los inspecciono y...
¡Listo!
Este vestido está terminado. Me ha quedado divino. Lo cuelgo en un gancho y envuelvo en una funda negra. Aunque la parte reprimida de mi cerebro dice que es demasiado sugerente para alguien cohibida como yo, a la otra parte le encanta, esta maravillada. No seré capaz de venderlo porque en verdad me gusta.
Se los mostrare a los chicos. Alexa podría modelarlo, aunque no creo que le quede, este vestido es más para alguien con un cuerpo normal podríamos decirlo así. No es que ella tenga un mal cuerpo pero es demasiado flaca para lucirlo. Sonrío para mis adentros, Alexa tiene un buen cuerpo, muchas la envidian pero sí que es flaca. Ella por más que come no sube ni una sola caloría. No sé cómo le hace pero estoy segura de que no es anoréxica como algunas modelos que quieren mantener su inexistente cuerpo y peso. Para este vestido necesito a alguien que tenga caderas y curvas definidas, que no sea solo huesos, que este un tanto voluptuosa, alguien que tenga algo de carne. Le encargare a ella que consiga a alguien con esa descripción para lucirlo.
Salgo de mi escondite -como dice Ian-, y voy en busca de Alexa. No tardo mucho en encontrarla, esta acomodando algunas prendas en la sección de damas.
-Alexa, tengo algo que mostrarte -le suelto controlando la emoción en mi voz.
-¿Qué es? -se voltea hacia mí con el ceño fruncido.
-Vamos, acompañe y lo veras -tiene que verlo por ella misma. No soltare prenda ahora.
-No me vas a decir que es, ¿verdad? -niego con la cabeza-. Entonces, vamos.
La tomo del brazo y la llevo a mi refugio. Casi doy saltitos de emoción, a veces llego a ser tan infantil.
-¿Por qué estas tan alegre? -pregunta con desconcierto.
-Ahora lo sabrás.
Llegamos a mi refugio y me estanco frente a ella.
-¿Qué tienes que enseñarme? No veo nada fuera de lo común aquí -inquiere curiosa observando de lado a lado mi espacio personal y de trabajo.
Me apresuro a la percha y descuelgo la funda con el vestido, lo sostengo frente a Alexa. Con inquisición abre poco a poco la funda y conforme lo hace abre enteramente los ojos y la boca. Cierra y abre varias veces la boca pero no dice nada. Termino por ella de quitar la funda y se lo muestro. Se acerca y lo acaricia, lo escudriñe a más no poder. Por lo que me parece una eternidad no dice nada y después me sonríe ampliamente.
-Es... es precioso Vane. ¿Cuándo lo hiciste? ¿Por qué no sabía de este modelo?
-Es un diseño que hace un par de semanas se me ocurrió y el resultado es este -digo encogiendome de hombros.
Le entrego el vestido y lo observa de atrás y adelante.
-Es un poco ancho para que yo lo modele, ¿no crees? -pregunta con duda.
-Mm, si -confirmo. Ella misma se dio cuenta-. Es por eso que te quiero pedir que busques a la indicada. A una chica que lo llene completamente. Que no se vea como un maniquí, toda flacucha -¡Oh, oh! He divagado mucho.
-¿Eh? -enarca las cejas.
-No estoy diciendo que tú estés... -¡oh, uh! Tal vez si lo insinué.
-No te preocupes hare como que no has dicho nada, solo que acabas de describir a alguien perfecta -¿ah, sí?-. Ya tengo en mente quien lo probara -me mira y sonríe.
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Amor Sin Medidas
RomansaGénero: Drama-Romance Las mentiras y secretos pueden ser dolorosos, amargos, destructivos pero también necesarios para proteger lo que más quieres en la vida. O tal vez no. Todo sucede porque así debe de ser. El problema es no saber que hacer cuando...