Desnudando al Alma

La de Labios Fascinantes y Sonrisa Seductora

Aclarando, primero que todo, el alcance de las palabras, la extensión del complejo matriz de significados que poseen, este pasaje se divide en dos partes, la primera, que es la ultima, pero así ha de ser relatado, define los confines de la seducción, y expande su concepto más allá del entendimiento mundano, la segunda expresa lo atrayente y cautivador que puede llegar a ser una dama.

Su sonrisa seduce, eso esta ya explicito y remarcado, el como lo hace y que tanto, es lo que pretendo detallar, pues en un ámbito coloquial la seducción se limita a un termino de carácter sexual, pero ella no, cuando su rostro hace esa mueca, seduce de otra forma, te incita a pensar en que hay después de la alegría que transmite, te motiva a buscar por tus propios medios esa felicidad, porque la contagia.

Es una seducción que te invita a conocerla, a saber más, te invita a preguntar de donde viene, y entonces caes en la red, te das cuenta que es su esencia, que esa exquisita motivación, elegante astucia y natural delicadeza provienen de su mente y no del cuerpo, quedas hipnotizado por esa fina combinación de detalles, las pequeñas comisuras de sus labios, la forma en que sus ojos se entrecierran, el suave enrojecimiento de sus mejillas, el ligero pero perceptible ladeo de su cabeza, todo encaja, como los engranajes de un reloj, una maquina metódica diseñada para dar una cálida sonrisa, no solo con la boca, ni con la cara o el cuerpo, sino con su alma y corazón.

Ahora que termina el intento de explicar ese extraño evento, se puede pasar al otro punto, al que parece inocente, pero incita más, sus labios, por donde empezar es complicado, la suave forma en que los junta al sonreír, su vivo color lleno de fuerza y convicción, que demuestra seguridad y a la vez desconocimiento, siempre llamando a observarlos, o el simple hecho de que verlos te puede arrancar una sonrisa.

El hecho es que son fascinantes, similares todo el tiempo pero nunca iguales, son labios que te hacen preguntarte, que hay detrás de ellos, labios que intrigan tu ser, labios que representan una de las características más peligrosas de toda mujer, el poder de dejar sin palabras a cualquier hombre. Y en ella destacan como en ninguna otra, a veces cuando los veo lo se, entiendo a la perfección, que son un arma de destrucción y que ella, todavía, no lo sabe.