La historia se basa en Jess, una chica algo tranquila con una historia sobre su familia un tanto curiosa. Alain el chico popular que todas quieren y Joseph un amigo de la secundaria. Se desata la historia sobre la familia de Jess, pero quién de los...
Después del sueño, me siento un poco más tranquila de escuchar a Monick. He estado pensando y daré lo mejor de mí para tener una nueva vida. No creo todavía poder contarle a alguien y soltarlo así como así, pero trataré de relacionarme más, depender un poco más de mis amigos.
¡Rayos! Exclamo cuando recuerdo todo lo que le hice a Alain ayer, ¡diablos!, debo hablar con él.
Me gusta Alain, eso he estado acomodando en mi mente desde que nos veamos. Es gentil, cuando lo conoces cambia y no es como esperabas. Es alto, guapo, su cabello color oscuro me encanta. Sus manos y sus piernas largas. Tanto su físico como su manera de ser me encantan.
Salgo de los dormitorios y veo que el está saliendo igual. No salgo, me quedo parada a que el termine de salir y camine un poco. Pero, así ¿Cómo quiero cambiar? Si tengo miedo, puedo hacerlo posible.
-Hola Alain – digo alcanzando su distancia- buenos días -Hola – dice un tanto sorprendido, noto como está un poco incómodo – buenos días - Escucha, quiero disculparme 'por lo de ayer. Fue muy imprudente de mi parte – digo mirando al suelo. No puedo verle a los ojos – -No te preocupes, yo debí haberme moderado -La verdad, es que si quiero que seamos amigos, por favor, acepta mi amistad -Claro – dice inmediatamente tomando mi mano – seamos amigos Jess, es todo lo que quiero
Me ruborizo un poco, ahora estoy feliz y espero que todo sea bien de ahora en adelante. Por estar como tonta viéndola mientras caminamos no noto el escalón que está justo en frente para poder ir a los salones, me tropiezo y me doblo el tobillo. Alain alcanza tomar mi mano rápido y logró mantener quedarme de pie, pero el dolor es intenso y quemante.
-¿Estas bien? – dice poniendo su otra mano en mi brazo - ¿Te duele mucho? -No, solo me lo torcí –digo tratando de caminar – ¡AUCH! -No estás bien – de la nada me da su mochila y se pone de espalda en frente de mi – Sube, te llevaré a la enfermería -No, está bien – me ruborizo y saco una sonrisa discreta – Peso mucho -Dale, me estoy cansando más así – dice riéndose – -Está bien
Me cuelgo su mochila en la espalda junto con la mía y me subo a su espalda. Es ancha y cálida. Sus brazos largos sujetan bien mis piernas.
-Te dije que soy pesada – le digo poniendo mis brazos alrededor de su cuello- -Está bien, he cargado cosas más pesadas- dice riéndose- Te juro que eres liviana
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Me cargó hasta la enfermería, y me dejó sobre una silla, tuvimos suerte de que casi nadie nos viera, es un poco temprano, así que no muchos han llegado hasta los salones. Muchos se esperan en el centro del campus y van juntos a clases.
Esta vez éramos solo él y yo, y era la mejor sensación. Me puso ungüento y una venda. Esperamos 10 min a que bajara un poco el dolor y regresamos al salón.
Me siento tan agradecida que no se como decir gracias, quiero lo mejor para él ahora.
