Frans ¦ Día 3.

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Frisk y Sans estaban tumbados en el sillón sin ánimos de hacer algo, no era nada extraordinario cuando se trataba del esqueleto, pero para la humana hacer nada no era lo más interesante sin embargo la vagancia había sido contagiada exitosamente por su pareja.

Era sábado por la noche y Frisk había quedado con Sans en su casa para jugar a juegos de mesas con apuestas, mientras tomaban un refresco y tiraban los dados o leían sus cartas, sin embargo Papyrus se los había tomado a último momento dejándolos sin actividades, por eso odiaban planear.

— Me aburro. —Se quejaba ella por quinta vez, estaba encima de su pareja con los brazos holgados, Sans abajo suyo con una almohada en su cuello con sus cuencas cerradas, no trasmitía ninguna sonrisa, tampoco estaba muy entretenido y sonreír forzadamente era un desperdicio de tiempo conociendo que Frisk conocía cada gesto de su rostro, era difícil también no aburrirse si lo único que podía hacer era dormir aunque era interrumpido por ella.

Y algo le estaba mosqueando en la espalda, algo duro que lo incomodaba, pero la flojera le podía y tener que mover a su novia para acomodarse le rompía el alma, se veía bastante tierna ahí, aunque sea una adulta.

— Haz algo. —Respondía con una voz ronca, con la intención de sonar fastidiado o cansado, cosa que no servía para nada, solo recibió un minúsculo golpe en su clavicula, lugar de descanso de la cabeza de Frisk.

— ¡No se me ocurre nada! Solo tenía en mente cómo te iba a ganar y hacer barrer el suelo, no tenía idea que sucedería esto, no tengo plan B.

— Lo siento muñeca, pero no te puedo ayudar, también tenía pensado hacerte perder y que cumplas mis apuestas...

— ¿Qué apuestas, Sans?

El aludido abrió poco a poco una de sus cuencas, esbozando una sonrisa pícara, había sentido cómo su pareja se había acomodado, para estar más cerca de su rostro, amaba ver desde lejos las intenciones de Frisk, pero tampoco es que fuera tan reservado para expresar las mismas emociones, quizá se podrían divertir un rato aprovechando que estaban solos.

Sans rió por lo bajo y alzó su cabeza para llevar sus propios brazos tras su nuca, dejando el completo espacio a Frisk para que se sentara encima de él y se inclinara tomando parte de su chaqueta azul tirando de ella, así se le veía aunque no quisiera, adorable y encantadora.

— Que me devores a besos. Grr. —Susurró él después de ese pequeño silencio que había ofrecido para dar más intriga al ambiente, acercarse un poco y dejar que ella hiciera el paso final para quebrantar la distancia entre ellos.

— Ya haremos un acuerdo... —Dijo juntando sus labios con los del esqueleto.

El beso fue suave para que se creyera que iba a ser pasional, Frisk aunque tuviera esos impulsos coquetos no podía avanzar más pasos de los que desearía Sans, pero lo aceptaba, sabía que ella aún no estaba preparada y no iba a hacer algo que a ella no le gustaría, le bastaba solamente mover con lentitud su mandíbula para que ella le siguiera el ritmo.

Era dulce, reconfortante tener ese momento a solas donde podían expresarse libremente, normalmente Frisk temblaba cuando se quedaba sin aire, y su movimiento en el beso era torpe, eran millones de sensaciones que no podía controlar, y se separó jadeante y ruborizada.

— Hum.. —Se quejó Sans negando con la cabeza— Has durado menos de lo normal, Frisk, ¿Te hace falta práctica, huh?

Frisk le sacó la lengua mientras volvía a su puesto, abrazar al contrario, aunque al rozar a su costado sintió algo duro, largo, lo tomó provocando un quejido adolorido de Sans para ver que lo que tenía escondido era el control.

— Oh mira, ahí lo tenías escondido.

— wow. 

— ¿Veamos algún canal?

— Con que no sea Mettaton pon hasta la rosa de guadalupe.

— Okey.

Con un cambio de tema exitoso, se acomodó como estaba el principio para ver la televisión mientras Sans dormía una siesta, con un beso le bastaba para ser feliz ese día, porque estaban lleno de amor, y dados por los labios que él quito virginidad, esos labiales solo eran suyos. 

¦ Besarse.

Me gusta esto.
Ay.
Subo esto para decir que es muy posible que cancele esta historia.
Tengo cuatro guardados más, así que puede que tenga tiempo para ver si saco inspiración para los nenes. El Frans ya no me anima como antes :')

Y lo cambie a otra pareja quizá.

Frans ¦ 30 días de Otp. [Hasta Día 5] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora