Hurricane [Jared leto]

Capitulo 19

Tocó el timbre.

Las clases del día se habían dado por terminadas.

Ginny y Jacky, una chica con la cual compartían Español, salieron y se despidieron.

Sacó su celular y le mandó un mensaje a Jared.

«te espero en la salida».

Se encaminó a la salida. El cuerpo le pesaba. No había comido nada en todo el día más que su desayuno. Decidió no almorzar para no tener que vomitar dos veces en caso de que su madre la hiciera comer en casa. El estómago le crujía, pero a ella le gustaba esa sensación.

Brooke pasó a su lado.

-nos vemos en el partido de la noche.

Ginny miraba su celular y al ver a la chica pasar tan repentinamente no le dio tiempo pasar decirle que no iría, ya se había ido.
Tal vez si encontraba a Noah podría decirle que no se juntarían. Seguía cuestionándose si ir o no ir.

Jared apareció.

-Llegué, me demoré un poco porque la vieja de Matemáticas nos dio más trabajo.

Ginny rió y caminaron.

-¿cómo te fue hoy? -preguntó el chico.

-hoy... Fue bueno -Jared silvó-. Mentira, fue un mal día, ya sabes. Will y no quiero aprenderme la tabla periódicaaaaa.

-oye, agradece que nos hizo aprender hasta el Kriptón -movió la mano como si le estuviese enseñando-. No sabes cuánto necesito ese 10.

-¿tan mal te va? -preguntó Ginny sin mover la vista del suelo.

-no es que me valla mal -ya estaban lejos de la escuela, casi no habían estudiantes-. Pero a nadie le viene mal un 10, ¿no crees?

Hubo un largo rato de silencio, solo se escuchaban los golpes de sus zapatillas contra el pavimento. Jared usaba la misma camisa a cuadros que usó en la fiesta de la otra noche. A Ginny le invadieron los recuerdos. Su mano cálida, sus ojos sobre su nariz, sus manos sujetan el pelo mientras ella... Vomitaba.

Cuando ya habían llegado la chica rompió el silencio.

-hemos llegado -dijo parándose frente a la puerta.

Buscó la llave dentro de su mochila y luego abrió la puerta. Hizo que Jared pasara primero respondiéndole con un Cortez agradecimiento con la cabeza.

Entró ella finalmente a la fría casa. El frío del otoño era cada vez más gélido.

-bien -Ginny miró a todas partes como buscando algo-. Podemos estudiar en el comedor o en mi habitación.

-Mmm, como tú quieras.

-quedémonos aquí, ¿te parece?

Se sentaron en el comedor. Ginny abrió las cortinas para que la luz natural entrará. Jared puso todas sus cosas sobre la mesa.

-espérame, iré a buscar mi computador.

Ginny subió las escaleras rápidamente y en cosa de un minuto ya estaba abajo.

-¿tienes hambre? O sed. Te puedo ofrecer algo, si quieres.

-no tengo hambre -dijo el chico amable-. Pero si sed, y mucha. ¿Me traes un vaso de agua?

Ginny llegó con el vaso de agua y se lo puso en la mesa.

-¿tú no comes? -dijo Jared.

-¿acaso tú sí? -dijo la chica con sarcasmo.