Siguiendo la vida.

Capitulo 4.

Él grupo de personas que fue a ver a naruko, se preocupo por los gritos y quejidos que provenían de él cuarto de la rubia.

Naruto entro corriendo y azotando la puerta contra la pared, los demás que llegaron trotando vieron la cara de desconcierto de naruto.

- ¡Te estoy diciendo que ya estoy bien, estúpida! - eran los gritos que daba la melliza de naruto a la enfermera que tenia una aguja en mano.

- Lo siento pero hasta que lady tsunade no ordene que cancelemos las inyecciones, no podremos dejar de suministrarlas - contesto aferrada la enfermera, mientras dos de sus compañeras la agarraban de los brazos.

- ¡Pues metetelas en él fundillo tu!, ¡A mi dejame en paz! - exclamaba colérica la Peli-rubia.

Si, en definitiva a naruko no le gustaban las inyecciones.

- ¡Naruko, tranquilizante! - grito por fin la hokage, llamando la atención de las 4 personas que estaban en batalla.

- ¡Lady tsunade! -Exclamaron felices las enfermeras.

- ¡Naruto! -

- ¡Naruko! - la rubia se safo de los brazos de las enfermeras y corrió hacia su hermano.

La luz de sus ojos.

- Esta bien, ella ya no necesita las inyecciones, por lo visto él kyubi ya hizo lo suyo - explico la hokage viendo como ambos hermanos se fundían en un abrazo cariñoso.

- Te extrañe - susurro en él oído, naruko.

- y yo a ti, apenas me acabo de enterar de que estabas aquí ¿Por que no querías que supiera? -

- No quería preocuparte, y tu también estabas herido -

- Tonta - los presentes miraban con cariño esa escena, itachi se acerco a sasuke y paso un brazo por su cuello, atrayéndolo a su cuerpo y Madara e izuna se agarraron de la mano. Hasirama se lanzo a los brazos de su hermano para que este lo cargara.

- Naruko - llamo tsunade.

La rubia se separo de su hermano y se dispuso a mirar a la mayor.

- Tu padre - se hizo a un lado, dejando ver al 4 hokage. Por segundo la chica lo miro, para luego poner sus ojos ácidos y lanzarse a los brazos de su padre.

- ¡Papá! - grito llorando.

- También te extrañe mucho naruko, pero no debes esforzarte mucho, recuerda apenas te estas aliviando -

Una vez que se separaron, naruko miro a sasuke.

- Oye pelos de cacatúa - sasuke fruncio él ceño, viendo como los resientes de él clan Uchiha aguantaban las ganas de reir.

- ¿Que? - respondió corto.

- Me alegró que volvieras - dijo sonriendo, sonrojando a mas de uno.

- N-no regrese por ti - respondió mirando hacia otro lado.

- Lo se, regresaste por naruto, pero ni creas que te lo dejaré fácil, ni a ti, ni a tu clan...Yo se sus intensiones -

Él clan Uchiha borro todo rastro de sonrisa y se pusieron serios, al parecer tendrían batalla.

Los demás miraron sin entender.