Capítulo 2

78 8 0
                                    


Negro, negro era todo lo que mis ojos veían, por más que me esforzaba, no lograba ver nada.

Sentía como si hubiera una docena de elefantes sobre mi pierna derecha y un fuerte dolor por todo mi cuerpo. Aún no podía ver nada más que negro.

El tiempo pasaba y no había nadie en la habitación.

¿Qué hora es?

Desearía poder ver el puto reloj.

Escucho unos pasos acercarse a mí. Supongo que es el médico.

-Hola señorita Tale, soy el doctor Rowling.

-Doctor, hola. ¿Porque no puedo ver nada?-pregunto preocupada

-Eso es porque ha perdido la vista pero solo es por unas cuantas horas, tranquila.

¿Perder la vista por unas horas? ¿Acaso eso existe? Que yo sepa, cuando pierdes la vista es para siempre no por unas cuantas horas.

-Claro que existe señorita Tale-dijo. Vaya, se ve que he pensado en voz alta.

-Vale, ¿y más o menos cuando podré recuperar la vista?

-Dentro de un par de horas, has estado todo el día dormida, pero mejor que sigas descansando, así te recuperaras más rápido.

Perfecto, dos putas horas más.

Escuchaba ruidos por todas partes. Pasos por los pasillos, el ruidito que hace las maquinas, el ruido de los motores de los coches. Pero aun no podía ver nada.

Cuando estaba a punto de dormirme otra vez, escuché unos pasos en la habitación.

-¿Quién eres?-dije pero no obtuve respuesta

-¿Mama, eres tú?-sin respuesta.

Y entonces escuché unos pasos salir de la habitación.

A lo mejor no había nadie y solo era mi imaginación.

POV'S LUCAS

No paraba de pensar en el accidente, me sentía mal.

Y estar sentado en el sofá de mi casa atiborrándome a Doritos no ayudaba a disminuir mis remordimientos.

Así que decidí ir a ver como estaba.

Cogí las llaves del coche y conduje hasta el hospital.

¿Cómo era que se llamaba esa niña?

Llegué al hospital y me dirigí hacia la recepción. Había una chica joven, de unos 25 años, más o menos. He de admitir que la chica era bastante guapa.

-Hola bonita, soy Lucas Blair -le dije guiñándole un ojo

-Hola, ¿Qué desea?-dijo sonrojada con un pequeña sonrisa.

A ti en mi cama, por ejemplo.

Bueno, no iba a decirle eso, no en una situación como esta.

-Por casualidad, ¿han recibido algún paciente al que hayan atropellado? Es una chica castaña, con ojos azules, y bastante pálida, te diría su nombre, pero sorprendentemente no lo recuerdo.- añadí una mueca.

-¿La chica se llama Addeline Tale?-preguntó ella mirando la pantalla de su ordenador.

-Sí, creo que sí- dije dudando

-Bien, ella está en la habitación número 146, en la tercera planta- dijo aun mirando la pantalla de su ordenador.

-Vale, gracias preciosa -me despedí guiñándole otra vez el ojo. Y una vez más, se sonrojó.

Take Me AwayWhere stories live. Discover now