rain • seokhui

22

- 10 años antes -

estaba sentado en una banca cerca de la bodega del colegio. también tenía una caja de leche de chocolate en las manos. Dokyeom tomaba silenciosamente de la suya. era algo incómodo. y ni siquiera podía hacer nada. para empeorar todo, era intolerante a la lactosa.

Dokyeom aveces me volteaba a ver. podía sentir sus ojos sobre mi y la verdad, eso me ponía más nervioso de lo que ya estaba. quería saber que pasaba por su mente mientras tomaba de su leche de chocolate. sinceramente no me imaginaba a un chico como Dokyeom tomando leche de chocolate. él era intimidante ya que no mostraba emoción alguna. bueno, si cuentas irritado. ya que era la única emoción que él mostraba.

el clima era perfecto. sin tanto calor y no tan frío. podría estar aquí sentado todo el día. de pronto, vi una oruga deslizándose sobre el pasto. mi mente comenzó a trabajar. la oruga se aventuraba a un camino lleno de obstáculos, amigos y enemigos para lograr su meta de convertirse en la más hermosa mariposa de todo el jardín. me imagine como iniciaría la historia y el final, me cuesta pensar en lo 'relleno' o lo demás. solo necesito pensar en un nombre para la oruga.

sin darme cuenta y al pensar en esa historia de las aventuras de la oruga sin nombre, estaba tomando de la leche de chocolate. el sabor dulce llenaba mi paladar pero ese no era el problema, aún por más que no me guste mucho lo dulce. la leche era fría lo cual me hacía querer tomar más. extrañamente, mi estomago estaba intacto. voltee a ver a Dokyeom y este estaba mirándome con curiosidad.

"¿estás bien?"

aún con el popote en mis labios, tenía los ojos abiertos en temor y sorpresa. me pase el trago de leche de chocolate y asenté con la cabeza. Dokyeom hizo lo mismo y volvió a tomar de la suya. con esto volviendo de nuevo a ese silencio incómodo de hace unos segundos.

"¿te gusta el basquetbol?" me pregunto él. tenía el popote en mis labios más ya no tomaba de la leche de chocolate. volví a asentar con mi cabeza un pequeño si pero sabía que esto solo cortaría de nuevo la conversación.

"no podría decir si me gusta o no..." quite el popote de mis labios y comencé a fijar mi vista en el cartón de leche. "no se jugarlo. nunca lo he intentado."

Dokyeom dejo de tomar de su leche de chocolate y quedó en silencio por unos segundos. "puedo enseñarte si quieres." fue lo que él dijo, sorprendiéndome. "solo con una condición..."

ya me la estaba creyendo. todos quieren algo. todo tiene su precio. pero esta vez, no me molestaba si era él. aún con nuestra mirada pegada al cartón de leche se sentía un tipo de vibra entre nosotros.

"enséñame a hacer eso..." volvió a decir. ¿ a 'eso'? ¿a que se refería con 'eso'? confundido, voltee a verlo. él miraba con determinación la caja que sujetaba. "a eso qué haces en los recreos. cuando comienzas a escribir en tu cuaderno con tanta... ¿emoción?"

estaba aún confundido hasta que recordé a lo que se refería. todos los recreos me siento en una banca cerca de la cancha de basquetbol y comienzo a escribir mis historias. veo mi alrededor y eso me da nuevas ideas.

me parece extraño que Dokyeom sepa de eso ya que cuando hago eso, él está jugando basquetbol.

"yo..." estaba nervioso y quería decir las palabras pero sabía que lo que fuera que dijera sería estupido. así que solo asentí. no tenía más palabras y menos cuando el me miraba así. su mirada viajo de la caja de leche a mi. al voltearme, nuestros ojos se encontraron. sentía raro sobre mi piel. mi respiración se dificultaba al tenerlo tan cerca y a la vez tan lejos. ¿que estoy diciendo?

"oruga." dije sin pensarlo. "ahora estoy escribiendo una historia, que es lo que hago. y es de una oruga. una oruga sin nombre." dije casi en un coreano bastante fluido. mis pómulos me dolían, mis manos temblaban. por instinto, volví a tomar de la leche de chocolate.

"ah... ¿si?" Dokyeom estaba sorprendido al igual que yo. era casi como si el también batallaba para buscar palabra alguna. pero antes de que pudiera decir algo, la voz del entrenador y profesor de educación física se hizo escuchar.

"¡Señor Lee!" esto espantándonos a los dos. "me parece que se le olvido que tenía práctica con su equipo." al escuchar esto, Dokyeom cerró sus ojos y su rostro mostró frustración.

"puede hablar con su 'amigo' después de ella. espere. es cierto, ya acabo y usted solo desapareció dejando a su equipo, capitán. 20 vueltas, ahora." Dokyeom se paró y colocó su mochila sobre sus hombros. comenzó a caminar hacia el entrenador pero se detuvo a unos pasos lejos de mi.

"Federico..." dijo casi en un susurro. "podrías llamarlo así." pero se quedó quieto aún. le tomó unos segundos el volver a hablar. "¿acaso tú no eres..."

"¡Señor Lee!" lo interrumpió él entrenador. Dokyeom volvió a caminar hacia él. solo que estaba vez, no sé si estaba soñando o no, pero juraba ver su boca torcerse un poco. casi como si fuera una ¿sonrisa?

sentí mi mejilla derecha arder. y mis pómulos me dolían pero ahora por las ganas de sonreír que tenía. sentía fuegos artificiales sobre mi cabeza. esto me duró poco, ya que también mi estomago se volvió loco.

un dolor de estómago horrible. sujete mi mochila y me dispuse a correr al baño. espero no los hayan cerrado. pero mi di cuenta que aún tenía la caja de leche de chocolate en mi mano, él culpable de este dolor de estómago.

pero también me acorde de lo que pareció la sonrisa del más frío del colegio, el bully. este el culpable de mis mejillas sonrojadas.