Capitulo 2

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-        ¿Y entonces?

-        Por favor.

- Siempre es un favor, ¿cuando podrás hacerlo sola?.

-        Solo esta vez…

-        La ultima vez ¿ok?

Esta bien, prometo que la próxima vez  yo hago las vueltas aburridísimas, mientras que tu tienes shopping time.

-        Sigue hablando y te quedas sin energía.

-        Me estoy yendo y gracias otra vez.

Corre Valentina, corre antes de que se arrepienta. Katie se pasa de buena gente a veces, yo no estaría esta fila por otro ni muerta.

Saco mi lista de pendientes de hoy y me doy cuenta que  no me fije si mi reserva se vio afectada por mi salida de anoche. No puedo dejar de comprarla.

Mi celular timbra…

¿Porque las mujeres cargaran su vida en el bolso? cada día es más difícil encontrar mi celular.

-¿Hola? 

-        Señorita de Quintero, ¿como estas?

-        Bien Miguel ¿y tu?

-        Bien, ¿Comiste bueno?

-        Decentemente ¿y tu?

-        Bien como siempre.

-        Siempre ¿ah?

-        Siempre, siempre querida. Dani no tiene ninguna queja.

-        Que bueno (Si como no…)

-        En fin. Marlon me pidió tu numero, ¿te llamo?

-        Me mando un mensaje.

-        El es un romántico empedernido.

-        Me imagino. (“Quiero que sepas que aquí nos usamos ambos, no solo tu a mí”.)

-        ¿Vas a llamarlo?

-        No

-        ¿Porque?

-        Porque no me gusto.

-        ¿Que no te gusto?

-        El polvo.

-        Ohm entiendo.

-        Aja. ¿Miguel, necesitas algo mas? Estoy bastante ocupada.

-        No, no te quito más tiempo.

-        Gracias bye.

Fastidioso, engreído, prepotente, intenso, metido, chismoso y mal polvo. No entiendo que le ve Daniel, enserio.

Cuando estoy a punto de guardar mi celular vuelve a pitar. (Soy oficialmente la mujer más solicitada de la ciudad…)

“Mougle, espero el desayuno estuviera interesante, necesitamos hablar enserio. No más evasivas, trancones ni trabajos por favor, es realmente importante y tiene que ser hoy. ¿Comida? C.”

Tecleo rápido antes de entrar a Abril:

“Trato, comida en mi apartamento. Así evitamos trancones, y trabajos. Prometo no evasivas esta vez. ¿Qué es tan serio? ¿Todo bien con papás? ¿Nunca pregunte porque viniste? ¿Estás bien?”

Inmediatamente llega la respuesta:

“Tranquila vaquera, tendrás todas las respuestas a estas preguntas y más, hoy en tu apartamento a las 7:00pm. Quiero Costillas acarameladas ¿Qué hacemos?”.

Lo odio.

“Sabes que odio cocinar”.

No alcanzo a salirme del chat cuando responde.

“Por la espera de esta mañana, y por no tenerme a tu lado hace dos años, podrías?

Lo odio el doble.

“Esta bien, Costillas serán”.

Siento su sonrisa y no lo estoy viendo.

“TE AMO MOUGLE, PDTA: Se cuando estas haciendo mala cara ;)”

Sonrío inconscientemente.

“Tu me enseñaste ;)

Que sea el ultimo pitido por favor.

“A mantequear mi amor, las quiero llenas de caramelo :*”

Dejo mi celular en el bolso y en vez de entrar a Abril como quería Voy a SAO a comprar las benditas Costillas…

Amo oficialmente a Abril, amo las chaquetas, los jeans, las blusas, y al papacito de vendedor que siempre me atiende.

-¿Me das tu numero?

-No me voy a acostar contigo Valentina

-¿Porque? Prometo que soy buena.

-No lo dudo, pero no me interesa. Gracias.

-Es frustrante tratar de sonsacarte.

-Valgo la pena.

-Lo se, por eso sigo comprando chaquetas en verano.

Le guiño el ojo y me dirijo a la caja a pagar más chaquetas para mi armario.

Overuse (terminado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora