Los naranjos.

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Había quedado con nuestro grupo de amigos. Estaba ansiosa por verte, después de tres semanas sin hablarnos, ni vernos  y eso a hecho que mi deseo por ti va en aumento.                           Mis intención de esa noche, era de enloquecerte, pero lo más importante era hacer cumplir tu fantasía.                                                                                                                                                                            Solo de pensar en tus manos sobre mi cuerpo hace que me caliente, que un fuego abrasador me recorra todo el cuerpo, de pensar que tus labios van recorriendo todo mi cuerpo al compás  que tus manos.   Como siempre que me pasa cuando pienso en ti, una humedad se instala entre mis piernas.....

Estamos todos en el puf, los chicos están sentados tomándose un par de cervezas. Las chicas estamos bailando una de las canciones sensuales, mi prima esta detrás de mi, restregando nuestros cuerpos. En un momento en que las chicas y los chicos se fueron fuera a fumar y nos quedamos solos.

Lentamente me voy acercando a ti, ya que estas distraído.                                                                                  Una vez cerca a ti, voy dejando ligeros besos por tu cuello...

— ¿Cuánto crees que podrás aguantar ? — te susurro en el oído, pero antes de retirarme del todo te doy un pequeño mordisco en el lóbulo.
Cuando me aparte, entraron los demás, nuestra miradas se encentraron, tus ojos negros fijos en los míos, tus pupilas dilatadas me delataban que tu sentías lo mismo, que las ganas no se habían esfumado, sino que han ido en aumento, esta iba a ser la oportunidad de volverte loco, la noche en la que no querrás estar con otra.                                                                                           Después de un par de cubatas, nos fuimos a la fiesta que había al lado. Seguí bailando con las chicas de manera sensual, pero sin apartar la vista de tus ojos, quería que sin tener que tocarte te excitaras de tal manera que no te importara ni el lugar ni la hora, solo quería que te hundieras en mi, que me hagas gritar tu nombre mientras mis piernas tiemblan por el grandioso orgasmo. 

Seguí moviendo mis caderas de manera sensual, provocativa. Al sentir unos brazos rodear mi cintura me tense, pero al ver que eras tu, sonreí de lado e inicie mi plan. Pegue mi cuelo a tus caderas, moviendolo en círculos, restregándome con tu amiguito, que ya se encontraba despierto. Lentamente, me di la vuelta para poder verte, roce nuestras boca, pero las ganas no me las puede contener, junte nuestros labios, que al principio solo era un simple beso, una caricia de labios, pero la temperatura fue subiendo, y nuestro besos se intensifico. 

Tus labios atacaron los míos con ansias, dejándome un cosquilleo que me encanta, una vez estuvimos en los campos de naranjos para tener algo más de intimidad, me cuesta seguir el beso , pero no me quejo, tu desenfreno es por mi. Mi piel cosquille allí por donde pasan tus manos. Al ser mucho mas bajita que tu, me coges en brazos para poder ponerte recto, una de tus manos se mete por debajo de mi camiseta, llegando a mi pecho descubierto ya que no llevo sujetador. 

Tus preciosos ojos negros, me miran fijamente mientras te desprende de mi camiseta, al tuya sigue por el mismo camino que la mía,  dejándome admirar tu buen cuerpo. tu hombros anchos, tus caderas estrechas, tu vientre plano y la línea de bello que es desde tu ombligo que se pierde por dentro de tus boxers.  Me das leves apretones, en los pechos, en las caderas, en el culo, tus manos están por todas partes, yo solo consigo gemir. No se en que momento mis pantalones junto con mis bragas desaparecen, pero solo siento tu lengua recorrer todo mi sexo.

 Una de mis piernas es elevada hasta estar encima de tu hombro, me  retuerzo sin poder controlarme, mis manos se encuentra en tu nuca a acariciando tu pelo acercándote más, tus dedos me penetran al compás de tu lengua. Mis piernas tiemblan, estoy muy ceca y tu te das cuenta ya que as intensificado tu movimientos. Una ola de placer me recorre todo el cuerpo. 

Apoyas mi cuerpo en uno de los naranjos mientras te introduces en mi, mordiendo tus labios y aferrándome a tus brazos, entras del todo, mi piel quema mas que nunca, te sigues moviendo, incrementando el ritmo, cada vez más rápido, más violento. Mis uñas se clavan en tu piel mientras mueves tus caderas, mi boca deja algún que otro mordisco en tu cuello dejando alguna marca. Estoy en las nubes, me aferro a tus caderas y me dejo llevar por el placer que me provocas, que me haces ver las estrellas, tu te  sigues moviendo buscando tu propia liberación, te escondes en mi cuello intentando no controlarte. 

Te paso las manos  por  detrás de tu nuca, acariciandote el pelo. Cuando se te normaliza la respiración, sales de tu escondite particular y me sonríes y ahí me doy cuenta de que me gustas más de lo que deberías, me gustas para algo más que lo prohibido, y se con certeza que me voy a quemar pero estoy dispuesta a quemarme en tu infierno.....   

Mis mil fantasías.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora