The Last of Us.

✖El Comienzo de Todo✖

El reloj marco media noche, un lindo chico de pelo castaño dormía cómodamente en su cama, abrigandoce del frío inverno que caía sobre Inglaterra. Todo era tranquilidad, hasta que esta se fue al carajo cuando los padres de Louis fueron rápidamente a su habitación, haciendo que el oji-azul frunciera su ceño por completo.

-Existe la privacidad, y lo saben.-Dijo Louis abriendo sus ojos pasando el dorso de su mano por estos, soltando un leve bostezo viendo confundido a sus padres.- ¿Qué hacen vestidos..?, ¿Nos iremos a escondidas de mis hermanas..? .-Preguntó divertido, levantándose de su cama.

-A-algo esta pasando en la ciudad, algo muy malo.-Susurro el padre de Louis saliendo rápidamente de la habitación con una mochila llena de ropa de él, haciendo que el ceño del castaño se frunciera aún más por la mínima explicación que le dio su padre, rodó sus ojos dispuesto a volverse a dormir pero una explosión a unas cuantas cuadras de la casa de Louis hizo que caminara hasta la ventana, viendo grandes brazos de llamas en el cielo estrellado.

-M-mamá, ¿Qué sucede allí afuera?.-Susurró viendo a su madre que salía corriendo a la habitación de las hermanas de Louis, el oji-azul se quitó el pantalón de pijama que traía puesto y tomó sus jeans, poniéndose estos rápidamente al igual que sus zapatillas saliendo al pasillo viendo este totalmente vacío, para luego escuchar como las ruedas del auto del padre de Louis hacían un extraño sonido en el asfalto.

-¡HEY NO SE OLVIDEN DE MI! .-Gritó el castaño bajando las escaleras rápidamente y correr hasta la salida de la casa, viendo como el auto de sus padres iba totalmente lejos para después ver como personas con ningún comportamiento humano seguían el auto, sintiendo como su corazón punzaba al ver como el dicho coche se salía de la vía y se volcaba y como los "infectados" atacaban a su familia.

-No, ellos no.-Murmuro dispuesto a caminar, pero al ver que una de esas criaturas venía corriendo hacia él, entro rápidamente a la casa cerrando la puerta detrás de él cayendo lentamente por esta, llorando desconsoladamente al escuchar los gritos de ayuda de su familia, abrazando con fuerza sus piernas haciéndose bolita.

(*****)

(3 Meses Después)

La ciudad era un total desastre, todo estaba en total destrucción y era una de las cuantas ciudades en estado de cuarentena por la explosión que sucedió en el departamento de ciencias, que investigaba uno de los extraños casos de la rabia en seres humanos.

Louis caminaba entre los escombros buscando algo para comer, la comida en ese entonces era escasa, ajustó su mochila en su espalda y se dispuso a abandonar la zona en donde estaba, pero un extraño sonido inhumano hizo que este se escabulliera entre los escombros de una casa, saco la revolver calibre nueve que tenía escondida en casa - ó lo que quedaba de ella- y miró por el rabillo que solía ser antes una puerta.

"Un chasqueador, genial".-Pensó Louis al ver a la criatura con su rostro totalmente deformado que hacía sonidos guturales y caminaba tambaleante, el castaño se dispuso a apuntar y apretó el gatillo haciendo que el chasqueador cayera al suelo convulsionado, los ojos de Louis viajaron por el lugar viendo si algún otro infectado lo abría escuchado, se acercó al cuerpo que estaba en el suelo haciendo una mueca de asco.

Seguía su camino, llevo su mano hasta su estómago al escuchar como este rugía por el hambre, alzó su mirada viendo como el sol se iba escondiendo lentamente.

-Tengo que encontrar un refugio.-Susurro Louis mirando a todos lados, viendo sólo árboles y casa destruidas, todas.. menos una que se ocultaba entre grandes matorrales, corrió hasta está al escuchar nuevamente los sonidos guturales de chasqueadores y corredores, miró sobre su hombro viendo una gran horda de infectados corría detrás de él, para luego entrar entrar la casa cerrando rápidamente la puerta sintiendo como algo en su pie se amarraba y algo pesado caía al suelo, haciendo que el castaño quedase colgando de cabeza.

-Maldita sea, lo que me faltaba.-Murmuró enojado, guardando su arma en su estuche que estaba amarrado a su cintura, viendo la casa con su ceño totalmente fruncido.

-¿¡Cómo se te ocurre activar mi trampa!?, aquí no estoy seguro.-una voz bastante ronca hizo que su ceño se transformará en una mueca de total confusión, el chico que tenía delante vestía un pantalón rasgado en las rodillas, una polera negra algo sucia con pequeños agujeros, su cabello era largo hasta sus hombros con rizos, su rostro estaba tenso y su ceño totalmente fruncido al ver que Louis no le contestaba.
-Creo que eres un infectado.-Dijo apuntandolo con un rifle de caza, haciendo que el castaño se alarmara y saliese de su transe.

-¡Tiras del maldito gatillo te lleno la cabeza de plomo!.-Advirtió Louis sacando su arma, recordando que no le quedaba munición gruñendo ligeramente.

-¿Qué diablos quieres?, ¿Quién te contó sobre mi?, ¿Malik?, sabía que en ese negro no se podía confiar.-Susurró Harry viendo a Louis sin ninguna expresión en en su rostro.

-Espera, detente que me dejaste totalmente confundido con tanta pregunta.-Dijo el castaño sin dejar de apuntar al rizado.-Primero nadie me mando, no te conozco.. solo necesito un lugar en donde pasar la maldita noche y poder comer algo, además no conozco a ningún Malik.. creí que era el único sobreviviente.-Dijo viendo al oji-verde, quien al escuchar eso dejo de apuntar a Louis.

-¿No haz visto a ningún otro sobreviviente?.-Preguntó incrédulo Harry, mientras una pequeña sonrisa sarcástica aparecía sobre sus labios.

-Oh porfavor, vengo desde Doncaster hasta lo que queda de Holmes Chapel, no sabes lo cansado y hambriento que estoy.-Gruño Louis sin dejar de apuntar a Harry, viendo que este reía.

-¿Si te bajo prometes no llenarme la cabeza de plomo..?.-Preguntó el oji-verde, sacando un machete que estaba en su estuche amarrado en su cintura, acercándolo la cuerda donde estaba colgado Louis.

-Lo prometo.-Alzó sus manos en forma de rendición guardando su arma en el estuche, viendo como el rizado cortaba la cuerda haciendo que cayera al suelo de espaldas.

-M-maldito hi-hijo de puta.-Susurro Louis quejándose por el dolor en su espalda, viendo como el rizado bajaba rápidamente hasta él.

-Me llamo Harry Styles, y desde ahora estaremos juntos para sobrevivir.-Murmuró el rizado viendo a Louis quien asentía con su cabeza, haciendo que una amplia sonrisa sobre sus labios apareciera.