SSSH!! SSSH!! NO! A CALLAR!!
Si, si, se que no publique una mierda desde... -pantallazo azul- ¡PERO NO ES MI CULPA! Bueno si lo es, a la aweonada de muah se le ocurrió escribir sobre el unico weon que no se le ocurria NADA, PEEERO, de un día para otro envez de 500 palabras tenía mas de 5000, y casi paso a 6000 weon, que chucha...
Solo dire aparte de eso que estoy resfriada, con dolores en el cuello, pulmones, nariz, de vez en cuando cabeza, todo bien hasta ahí... ¡¿PERO QUE MIERDA TIENEN QUE VER MIS PIERNAS EN ESTO MARICO NO ME JODAH!?
Ya, partieron a leer esta wea, me enojé >:T
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Nadie podía decirle que no a Mairin.
Era, por lo menos, la debilidad de todos los que conocía (incluyéndose), pues la chica si sabía como pedir las cosas para que no se le negaran.
Es, era, y sigue siendo bastante inteligente en ese aspecto al parecer.
¿El cómo la conoció? Fue la misma noche donde sus compañeros también la conocieron y tuvieron sus primeras impresiones. También tuvo el placer (por así decirse) de conocer a quienes acompañaban a aquella niña, un Chespin y un Flabébé, ambas hembras. Un grupo bastante curioso para ser de una chica que no parece tal*.
No pudo hablar mucho con ella, ya que era de noche y la verdad hacía bastante frío para los humanos (no para él, su tipo hielo lo salva de situaciones como estas), pero el momento no se hizo esperar, ya que la chica, de alguna manera, logro buscarle conversación.
Nos ahorraremos todo eso de las presentaciones, el como se encariñó con ella y el como poco a poco cayó a las telarañas de aquella niña que su pelo hace caso omiso de la gravedad. Pasaremos de todo eso para llegar a lo que de verdad les importa, el como esa niña hacía que sus caprichos siempre fueran cumplidos.
Aun que en verdad aun no entendía como lo hacía realmente ¿había un truco? ¿algún hechizo? ¿se juntaba con alguna bruja, o pokémon legendario? ¿alguna baya en especifico en las comidas? ¿alguna baya mágica?...
Era mejor no pensar mucho en eso, ¿verdad? O si no, lo más seguro es que le explotaría la cabeza.
Aun que en su momento esa pregunta si que logró comerle el coco, tanto como para hacer algo que no pensó que haría: preguntar, y en este caso, al "inicial" de su entrenador. Aun que realmente no esperó la respuesta (si es que lo era) que le dio aquel grandote:
"Dicen que a la gente no hay que intentar entenderla, solo hay que quererla".**
¿era algún tipo de dicho? ¿qué quería decir? Mejor dejaba de comerse la cabeza.
Aun que habían cosas que le gustaban de ella, y, aunque sonara extraño, esa era una de ellas. Nunca pedía las cosas de mala manera, para hacer daño a nadie o para perjudicar a quien se lo pedía, solo eran para resolver una duda o para hacer reír a otros. Eso la alejaba de otros humanos que había conocido de antemano.
Si, él había conocido a otros humanos antes de conocer a su entrenador. Varios si se podía decir. Muchos que habían intentado atraparlo, pero no gustaba de ellos, ya que siempre eran por lo mismo que querían atraparlo: egoísmo puro, ¿por qué los humanos siempre querían todo para su propio beneficio? Aparte de egoístas, los idiotas eran demasiado débiles, no podían ni con los pokémon más débiles a sus alrededores.
Aun que este chico fue diferente (de alguna manera). En su momento fue egoísta el querer atraparlo, pero nunca específico el porqué. Pero solo le basto una cosa para querer entrenar con él: pelear contra Charizard.
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Guardaespaldas
AcakSimple y sencillo: 6 guardaespaldas harán que Alain sufra por haber cumplido el sueño de su chica.