Capítulo 1

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Mi padre se encierra con mi madre en su habitación a discutir por horas. Me toca escuchar cada grito por parte de él, insultos hirientes, hasta a veces el ruido de una cachetada en seco a la frágil piel de mi madre. No entiendo, ¿es mi culpa? Mamá siempre me dice "todo algún día va a pasar, vamos a recordarlo y nos vamos a reír de ello. No te preocupes, todo va a estar bien. Papá nos ama"

Cada que discuten, me nombran, mi padre dice que haberme abortado hubiera sido una gran decisión, pero mi madre decidió tenerme. Dice que sólo traigo problemas, que soy una molestia, que no fui deseado por nadie, mientras le pega repetidamente a mi madre. Se escuchan desde atrás de la puerta los puñetazos cargados de odio hacia su cara.

Recuerdo cuando él llegaba borracho del trabajo, subía a mi habitación y me sacaba a golpes de la cama, me quemaba la cara con el cigarrillo, mientras vociferaba tan hirientes palabras que me destrozaban más internamente, que las quemaduras gracias al cigarrillo. No podía escapar, me tenía atrapado en un rincón. Si intentaba huir, sacaba un mini cuchillo, como si fuera una navaja y empezaba a hacerme cortos, pero profundos cortes en diferentes partes del cuerpo.
 Mi llanto descontrolado y desgarrador se escuchó por toda la casa, las dolorosas y quebradas palabras que salían de mi boca ya lastimada no servían para detener el agresivo ataque de la bestia que se hacía llamar mi padre.

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A través de mi ventana puedo ver la mezcla de colores del atardecer- noche del Domingo. Hoy por suerte es un día tranquilo, ya que la bestia no se encuentra en casa. Estoy solo en este excelso hogar.

A medida que va descendiendo la noche, me inquieta aún más, no quiero dormir, mis miedos me invaden y me encierran en un recoveco del cual no puedo escapar. Me llevo una linterna conmigo, ¿quién dice que los fenómenos de mis pesadillas no se pueden transportar a la cruel realidad? Me meto entre las peludas t suaves frazadas de mi cama, tapándome hasta la cabeza, como si tuviera miedo de que algún fantasma me quiera atacar y el tener las sábanas hace que me proteja.

Otra vez él, se me acerca lentamente sin que yo pudiera emitir siquiera un parpadeo. Me altera observar su tétrica figura humanoide posada en una de las esquinas de mi habitación. Sus pasos ligeros como pisadas de gato iban acercándose, sus ojos al rojo vivo clavan mirada sobre mí. Estira sus largas y anchas manos, juntos con sus dedos deformes y sus uñas podridas hacia mi cuello, me aprieta con odio y con una fuerza sobrehumana. Se acerca hasta mi oído y bisbisea una palabra con su voz grave, junto con un tono sombrío. Necesito despertar de esta pesadilla, para que esta criatura se desintegre junto con esta alucinación. Al terminar de musitar aquella palabra en mi oído, mis ojos se abren como plato al escucharla. Suelta mi cuello sin apartar la mirada en mí, haciendo una expresión de odio. Despierto con lágrimas en los ojos, trato de olvidar a ese mounstro que me acosa en cada sueño, pero mis intentos son en vano. Mi respiración está agitada, mi corazón late con mucha velocidad, como si se fuese a salir de mi pecho.

Mi habitación parece un gran cubo totalmente negro, la oscuridad no me dejaba ver absolutamente nada.
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Fui una boluda, se me cerró la anterior cuenta de wattpad, perdí esta historia y la primera que escribí. En fin, quiero tratar de recuperar esta porque me gusta como está quedando. Sólo eso, venía a contarles mi error ;-; y que vivo fracasando ahre

•Ojos de Diablo~ °[Namjin]°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora