Crónicas De La Manada Mercatoribus

CAPÍTULO VII

Junio 7, miércoles
Anoche llovió mucho, por ende, en la mañana de hoy, el frio es inminente, tanto así, que el león anda un poco mal del olfato, entonces la leona fue de cacería hoy junto con la matriarca, el águila, pero, además de todo, están esperando la llegada de la bandada de cuervos, que son ellos quienes avisan como esta la situación en el valle y los alrededores.
Ya es medio día, sin que el lobo, yo, el tigre o el zorro hayamos cazado algo, nos preocupa, pues las crías no se pueden quedar sin comida.
El cuervo kmile, tiene un ala rota y no vendrá más, pero apareció otro, que cumple la misma función. El león fue al estanque de los elefantes, el único elefante albino, y ese, nos dejó beber un poco de agua. Había encontrado, el león un gran árbol que nos proveyó una muy buena sombra, ya que, el anterior refugio se estaba quedando sin hojas
6 pm:
ya el zorro, llegó a la cueva, yo sigo de cacería junto con el lobo, el tigre salió a tratar de cazar algo.
7 pm:
el león fue a asegurar su dominio, confundió un aroma similar al de la Guepardo vieja, la que se fue de la Manada, estaba intentando cazar en nuestro territorio, junto con, el cocodrilo viejo y el lagarto Louis.
9 pm
El zorro había salido a probar nuevos territorios de caza, donde los chacales, no consiguió sino solamente un pequeño jabalí 5 kilos, lo cual provocó un pequeño aleteo y/o forcejeo entre el aguila y el zorro por quedarse y recordar viejas memorias junto con su antigua Manada de chacales, los de la montaña.
12pm congregación de todos nosotros, el león, la leona, yo, el tigre y el lobo, agradeciendo al gran León Blanco por sus dádivas, y recuerdos de sus antiguas parejas de la águila: gorila, oso, nutria.