mi esclavo sexual 2

Capitulo 16: Sorpresa!!

Narra vegetta:

Bajamos del auto, guille quedo flipando, por que.... Llegamos a un hospital.

G-samuel de luke... ¿por que estamos en un hospital?

S-es parte de tu sorpresa.

Le hice una seña con la mano para que me siguiera, lo cual hizo.

Entramos en el hospital y guille no paraba de preguntarme muchas cosas, al final lo calle con un beso, lo cual lo sonrojo y a mi me causo ternura.

Caminamos por un rato, mientras esperábamos que nos atendieran. Al final, vino una Enfermera y nos atendió...

-hola, ¿están buscando a alguien?
Guille me miro y yo solo le respondí a la chica...

S-hola soy samuel, vine por un encargo.

La chica me miro y se dio cuenta de mis palabras...

-samuel, así vengan conmigo.

Los dos seguimos a la chica hasta la sala de incubadoras, al llegar guille siguió flipando. Yo solo sonreía mientras el reaccionaba al momento y la situación.

G-samuel.... Que....

S-sorpresa!!!  Ya te lo dije ¿verdad? Quiero ser padre y lo seré.

G-¿adoptar? ¿estas seguro de esto?

S-si.

Guille me miraba aterrado, yo no entendía el por que.

S-¿que tienes? Creí que te gustaría.

G-no es eso... Es que...

S-¿no te gustan los niños?

G-no es eso!!! Es que... ¿y si no le agrado a la niña o niño? No se ser padre.

Me acerqué a guille y le tome la mano, y le dije dándole un beso a esta...

S-tranquilo, te va a querer igual que yo, y también no se ser padre, pero eso es lo bueno ¿no? Siempre hay una primera vez para todo.

Guille me dio una sonrisa de respuesta, luego de ese momento tierno y conmovedor, entramos en la sala de incubadoras para ver a que niño o niña elegir.
Por supuesto que yo quería una niña, pero todo a su tiempo, dejaré que elija uno, por que no solo quiero uno... Quien dice ojala sean 7 o mas.

G-¿cual elegimos?... - me miro.

S-el que tu quieras, yo quiero una niña.

G-¿una niña? Yo quiero un niño...
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Narra Guillermo:

Que hago yo en un hospital eligiendo un bebé!!!  Nunca pensé en tener uno. Samuel que ganad de joder, no por que no me gusten los niños es que es mucho trabajo cuidar de uno.

Samuel se acerco a mi oído y me dijo...

S-entonces que sean dos.

G-que!!!  Claro que no.

Samuel me apego mas a su cuerpo y me dijo muy cerca de mis labios...

S-primero empecemos con uno, luego obvio que tendremos mas.

G-¿mas?

Samuel lamió mi oído y eso me hizo estremecer....

G-sa-samuel...Aquí no...hm..

S-¿por que no? Nadie nos vera.

G-los ni-niños...

S-ellos no se enteran de nada.

Samuel beso mi cuello, ¿deberás ibamos a hacerlo en una sala de incubadoras con todos esos bebes viéndonos?

G-hm... Samuel...

La puerta se iba abriendo, yo me separe de samuel y menos mal por que no me podía resistir por mucho tiempo.

Mire al suelo rojo como un tomate, mientras que samuel hablaba con la enfermera para saber cual sería el mas indicado llevar.

Mientras ellos hablaban, fui mirando cuna tras cuna hasta que me detuve en una... Un tanto especial.

En ella había un bebe mas pequeño que los otros, tenia ojos verdes y el color de piel parecida a la mía, tenia el pelo del color de samuel castaño y muy hermoso, a diferencia de los demás bebes el solo me miraba y no lloraba.

Le dedique una mirada mas profunda, era un bebe tan lindo que me lo quede viendo un rato.

Al final samuel se acerco a mi lado y los dos nos quedamos viendo al bebé. Al final, lo adoptamos y samuel estaba contento por haber podido cumplir con su capricho una ves mas.

La verdad, nunca creí tener un hijo ya que nunca creí tener una familia, pero bueno siempre hay una primera ves para todo.

Subí al auto con mi hijo en manos y nos fuimos a casa, en todo el viaje pensábamos el nombre para el bebé.  No acordamos con ninguno nombre, pero samuel quería que tuviera su nombre pero no lo dejaría.

Al llegar a casa, nos decidimos por zeus. No se por que, pero sonaba lindo.

"Zeus el de ojos verdes".

S-se llamara zaus de luke.

G-¿por que no diaz?

S-por que tu eres la madre.

G-¿la madre?!!!  ¿A caso me ves cara de mujer?!! - me enoje.

S-no, pero tu podrás ser su papi, a mi me dirá papa.

G-¿ah?... - al se una queja. - ¿quien decidió eso?

S-yo.

G-¿cuando?

Samuel se moría de risa.

S-tranquilo papi no te enojes.

G-malo... - susurré.

S-pero bien que me quieres.

No pude responder, solo me sonroje.

¿papi? Bueno, creo que me puedo acostumbrar.