capitulo 23: la verdad

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narra guillermo:

g-¿me engañas?..

samuel solo resoplo pesadamente y dijo con pocas palabras casi inaudibles...

s-no...

luego grito molesto...

s-¿COMO PIENSAS QUE PODRÍA HACER ALGO ASÍ?...

ya algo enojado y desesperado le grite....

g-ENTONCES DIME LA VERDAD!!!

en eso el bebe comenzó a llorar, fui hasta el y lo tome en mis brazos. el bebe automáticamente dejo de llorar y se quedo callado mirando todo asustado. le di un beso en su pequeña cabeza y ya algo mas calmados comenzamos nuevamente con la charla.  

s-lo siento, no quise gritarte es que...no se que decir...

g-di donde estabas no es tan difícil...

s-bien, te lo diré...

g-te escucho...

dicho esto, me senté en la cama mirando a la puerta haciendo de cuenta que miraba a samuel, pero envés de una sonrisa tenia una cara de enfado total.

s-escucha...estaba...en la casa de frank, el me pidió que lo ayudara a preparar un regalo para alex y quiso que fuera un secreto, por eso no te dije nada, pensábamos que si lo sabias le dirías a alex y ya no seria un secreto...

No se por que pero no le creí ni una sola palabra, esto debe terminar... Ahora.

G-piensas que soy tonto?.. - dije irónico y con un tono de vos medio apagado.

Samuel no contesto, no se si fue por miedo a perderme o por el simple hecho de que lo pensara.

Pero de algo estoy seguro, no pondré otro pie en esta casa hasta que samuel diga la verdad.

Empaque mis cosas, las pocas que tenia, también las cosas del bebe. Si samuel quiere pelea pues la tendrá.

Abrí la puerta de lo que creía era nuestro cuarto y salí por esta con todo. Al hacerlo, samuel se sorprendió de mi acción y me tomo de una mano.

G-suelta me... - dije sin mirarlo.

S-amor no hagas esto...

G-sueltame samuel...

S-por favor...

G-no lo diré otra ves, sueltame...

Samuel me soltó, no lo mire lo que menos quería era eso.
Lo amo y por eso...

G-si quieres volver a verme, sera mejor que digas la verdad...

Sin decir mas, camine Hasta la puerta de la casa sin mirar atrás, no quería llorar, no dejaría que me viera así.

Salí de aquella casa que una ves llame hogar, me subí en el auto que me había regalado samuel.

Mire por ultima ves esa casa llena de recuerdos lindos y me fui de aquel lugar, mientras me iba mire por el retrovisor y pude ver la cara de samuel llena de tristeza y dolor, no quise pero solté una lágrima de ambos ojos y sin decir mas rompí en llanto.

G-maldición...

Mientras mas avanzaba mas culpable me sentía, mas dolor se apoderaba de mi alma.

¿a donde iría ahora? A donde me llevé el camino.

Mire a mi lindo hijo quien dormía en la parte trasera del auto como un ángel, en su silla.

G-no te preocupes, estaremos bien. - dije sin pensar.

Mientras mas avanzaba, mas me alejaba de la ciudad. No me importa a donde valla mientras no me encuentre con samuel.

Al final, llegamos a un hotel, me adentre en este y pedí una habitación en la cual entre y me tire en la cama. En ese momento no pude sacar de mi cabeza los buenos momentos que pase con samuel.

No temo a la verdad, pero si es lo que creo que pienso, no volveré a ver a samuel.  Lo amo demasiado pero algo es amor y otra cosa es engaño. Si paso lo que creo que paso lo mejor sera no volver a verlo.

Me acosté en aquella cama fría, y me dormí al lado de lo único que me queda ahora... Mi hijo.

mi esclavo sexual 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora