Estaba furioso, caminaba hacia ningún lado solo seguía el camino de piedras, algunas veces pateandolas.
-Es un idiota-bufé.
Ya cansado de tanto andar me senté en una gran roca que se encontraba allí.
-Extraño a Jin hyung, la escuela-Tomé un palo y comencé a remover la tierra con el mismo- A mis compañeros-Suspire triste.
De pronto escuché varios pasos cerca, me puse alerta, esta vez pelearia no me iba a quedar de brazos cruzados, como siempre...
-!Vaya! ¿Que tenemos aqui?- Abrí mis ojos no lo podia creer.-Pero si es el sujeto más buscado y deseado de corea.-Tomé una roca como arma y no le apartaba la mirada. -Que lindo-Rió sarcástico.
-Pensé que estabas muerto- dije para mi.
-Pues no-Dijo alto- el legendario Jay Park nunca muere hermoso. -Arrugue mi rostro al escuchar eso.-¿Por qué no hacemos esto por las buenas y sólo te vas conmigo?.
-¡Jodete!-Le grité y arroje la roca para luego correr.
-Maldito mocoso, como quieras será por las malas- Note un parche en su ojo izquierdo, seguro fue la venganza que taekwon hyung tanto quería o una parte.-Acabaras como aquel imbecil.
Corrí lo más rápido que pude, pero mis torpes pies no me ayudaron en ese momento así que tropecé.
Muchas personas me rodearon con grandes armas y navajas. Lo último que vi fue al lider acercarse y golpearme en la cabeza luego todo fue negro.
-M..mierda~-siseo del dolor.
Me levanto del duro colchón y camino tomandome de las paredes, estoy en una habitación.No de nuevo.
-MALDICION- le pegué una fuerte patada a la puerta pero nada pasó.-Estoy jodido.