Señora Payton

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-Bien clase, hoy analizaremos personajes. Empezamos con Katniss.

La clase se alborota.

-¡Sexy!

-¡Guapa!

-¡Suertuda!

-¡Puta!

La maestra frunce el ceño con esa.

-¿Por qué puta, señorita Ellis?- le pregunta a Brittany Ellis. La jefa de porristas.

-Porque va de hombre en hombre- dice encogiendo de de hombros haciendo que sus rizos rubios reboten en ellos.

-Sólo fueron Peeta y Gale... -susurro.

Brittany me escuchó.

-¿Y Finnick?

Ruedo los ojos.

-Finnick y Katniss nunca tuvieron, tienen o van a tener algo- digo ofendida.

-Como digas, pero Katniss es una puta- dice mirándose sus uñas perfectamente pintadas de un rosa chillón.

Frunzo el ceño y cuando estoy apunto de gritarle que la puta es otra persona la maestra me interrumpe.

-Señorita Ellis y señorita Grey, silencio por favor. Evitemos palabras altisonantes en esta clase-le dirige una mirada acusadora a Brittany antes de continuar.

-Vamos, sigan describiendo a Katniss.

-¡Gruñona!

-¡Aguafiestas!

-¡Tonta!

-Valiente... -susurro.

-¿Cómo? ¿Qué dijiste?- pregunta la maestra Payton.

-Valiente-digo un poco más fuerte.

-¡Esa era la palabra que buscaba!- la maestra aplaude, pero nadie la sigue.

-Bien, pasemos a Peeta.

-¡Guapo!

-¡Sexy!

-¡Amable!

-¡Lindo!

-¡Empático!

-¡Damisela en apuros!

Frunzo el ceño y volteo a ver a Alina, la que acaba de gritar 'damisela en apuros'

-Dicen que Peeta es una damisela en apuros, yo siempre pienso que no lo es, porque todos sabemos lo que Peeta haría por sus seres queridos, aún más por Katniss: Mato a Brutus, un profesional con mucha experiencia en el combate, se ofreció voluntario para el vasallaje, aún cuando eso significaba volver al origen de sus pesadillas, resistió la tortura del veneno de las rastrevispulas, y aún así volvió a estar cuerdo. Piénsatelo bien la próxima vez que digas que Peeta es una damisela en apuros. -término mi discurso respirando con dificultad.

-Estas loca, emo-dice Andy, la gemela de Alina. Ríe y todos los demás lo hacen.

-Eres una rara, rechazada. Por eso nadie te quiere. - completa Alina.

Toda la clase estalla en carcajadas.

-Señoritas Fields, no insulten a sus compañeros. Señorita Grey, bonito discurso el suyo, sin embargo, innecesario.

Me sonrojo y guardo silencio el resto de la clase.

Siguen describiendo a los demás personajes, pero ya no presto atención.

-Bien, se acabo la clase, pueden retirarse-dice la señora Payton.

Me apresuro a guardar mis cosas.

Alina y Andy meten todo rápido a sus mochilas.

Brittany estaba apunto de salir del salón.

-Salgan todos menos ustedes, señoritas Fields, Ellis y Grey.

Suspiro y me vuelvo a sentar.

-Pero, señora Payton ¡tengo mi ensayo de porras! La capitana no se puede perder el ensayo- dice Brittany ofendida.

-Y nosotras tenemos coro. Tenemos un dueto y lo tenemos que practicar- dicen Alina y Andy al unísono.

-Señorita Ellis, no me importa si es la capitana, porras son extra curriculares y no deben interferir con sus materias. Señoritas Fields, lo mismo va para ustedes- la señora Payton esta enojada- ¿algún asunto que sea más importante que mi clase, señorita Grey?- me pregunta.

-No señora Payton-respondo quedo.

-Bien, siéntense-señala cuatro asientos de la fila de adelante.

Todas nos sentamos.

La señora Payton suspira.

-Brittany, no más palabras altisonantes en mi clase ¿correcto?

-Si, señora Payton.-dice Brittany.

-Alina y Andy, no quiero volverlas a ver insultar a un compañero, eso esta contra el reglamento.

Ahogo una carcajada. Si aplicaran el reglamento correctamente, casi toda la escuela estuviera ya expulsada. Soy su blanco favorito de insultos.

-Si, señora Payton- dicen las gemelas, sonriendo.

-Hada, los fanatismos fuera de mi clase, ¿entendido?

-Si, señora Payton.-digo con la cabeza gacha.

-Bien, se pueden ir, excepto tu Hada.

Suspiro y me quedo sentada, esperando a que las demás salgan.

Ella se me queda mirando por un buen rato hasta que finalmente habla.

-¿Como va todo?

-Como siempre.

Ella me frunce el ceño, obviamente exasperada por mi inútil respuesta.

-¿Como es como siempre?

-Mal. -respondo cortante.

Ella suspira.

-¿Tu mama ha tomado sus pastillas?

Arrugo mi nariz y bufo, harta de escuchar siempre la misma pregunta.

-Ella ha tomado pastillas, pero no sus pastillas.

La señora Payton respira hondo antes de soltar la frase a la que tanto temo.

-Creo que es hora de que metamos a la policía en esto.

No, ella no puede hacer eso. Salto de mi asiento y la miro asustada.

-¡No! ¡No puede llamar a la policía! No puede...

La señora Payton me mira con ternura.

-Como tu tía y madrina, mi deber es protegerte- ella me sonríe cariñosamente- conmigo estarás mejor, no hay peligro de que vayas a parar a un orfanato o algo así, legalmente serías mi obligación y...

Niego con la cabeza y me hecho para atrás. Ella no entiende.

-Podríamos acabar muertas.- dejo que mi fleco cubra la mitad de mi cara mientras la miro seriamente. Estoy hablando en serio.

-¿Por tu padre?-me pregunta preocupada.

-Si.

-Por eso, para eso esta la policía...

-Tiene a toda una banda de narcotraficantes, asesinos y secuestradores listos para obedecer sus órdenes. ¿En serio cree que puede y quiere enfrentarse a eso?

-Pero...

-Pero nada. No policías.-respiro profundamente, le doy una última mirada antes de tomar mi mochila y salir de salón.

Finding Myself ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora