Epílogo

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_____ tomó una fresa del cuenco que tenía entre las piernas. 
-No me puedo creer que mi madre se haya escapado. Faylene Jacobs podría haber celebrado el bodorrio del siglo en Atlanta. 
_____ llevaba la camisa de Justin y él estaba en calzoncillos. Compartían el periódico y las fresas en la cama de _____, donde también estaba su gato. 
Oyeron un coche y llamaron a la puerta. 
-¿Quién será? -se preguntó _____ yendo a abrir-. ¡Mamá! Pero si no es la hora de comer. 
-Hola, cariño. Me alegro de verte. Espero que no te hayas enfadado porque desapareciéramos, pero Alvin y yo decidimos que sería más fácil. Alvin, cariño, pasa. Justin, ponte los pantalones y ven. 
-Estoy aquí, Faylene. Enhorabuena -dijo Justin entrando en el salón sin camisa ni zapatos-. Hola, señor Jacobs. ¿Qué tal el viaje? 
-Con Faylene, todo es estupendo -sonrió Alvin-. Perdón por molestaros, pero mañana tenemos una reunión para hablar del proyecto de Felicidad para los Niños. Aquí está tu álbum. Espero que quieras vendernos todas las fotos, pero si no es así lo entenderé. 
-No, no las voy a vender -dijo él agarrando a _____ de la cintura. 
-¿Cómo? -dijo Faylene sorprendida. 
-No, las voy a donar. Por cierto, Alvin, ¿qué te parece si _____ sigue trabajando contigo, pero como asesora? Así, podría trabajar desde casa con el ordenador y venir cuando fuera necesario. 
-Estupendo -apuntó Faylene-. Te puedes llevar mi caravana, _____. Así tendrás tu oficina allí donde Justin tenga que ir a trabajar. 
Alvin estuvo de acuerdo y todos se dieron la enhorabuena. De repente, Justin se dio cuenta de que _____ no decía nada. 
-Un momento. _____, ¿qué es lo que tú quieres? Si quieres que deje de viajar, no tienes más que decírmelo. 
-No lo sé -contestó _____-. Esto de haber prometido no hacer listas... 
-¡Yo sí he hecho una! -sonrió Justin. Fue al dormitorio y apareció con un papel arrugado. 
Comprar un anillo. 
Pedir la licencia de matrimonio. 
Comprar billetes para Maui. 
Reservar capilla y ministro. 
Casarme con _____. 
_____ lo miró sorprendida. 
-¿Cuándo la has hecho? 
-Hace días. 
-¿Quieres casarte conmigo? 
Justin asintió. 
-¿En Maui? 
-Aloha au ia'oe, my ipo. 
_____ enarcó una ceja. 
-Te quiero, mi amor -tradujo él-. Tú eliges. ¿Qué dices? 
-Que sí. 
La balsa adornada con flores se deslizó por el agua y llegó a la islita. _____ y Justin bajaron y caminaron entre las antorchas, mecidos por la brisa marina y el son de los tambores. _____ estaba como soñando. 
-No me puedo creer que esto esté pasando. Es como un sueño. 
-Es de verdad -contestó Justin. 
-Gracias por la corona de hibiscos. Me siento como una princesa. 
-Eres una princesa. 
Al llegar a la capilla de caña y flores, vieron a Alvin y a Faylene, a Bettina y a dos hombres muy atractivos. 
Justin se paró a saludar. 
-Hola, Jess... Ran. Me alegro de que hayáis podido venir. 
-No me lo habría perdido por nada del mundo -contestó uno de sus hermanos. 
-Bueno, pues vamos allá. A casarnos. 
Y eso es lo que hicieron. 
-¿Estás despierto? -le preguntó _____ tumbada en la cama. 
-Sí. 
-¿En qué piensas? 
-En que quiero hacerte unas fotos ahora mismo. 
-¿Ahora? 
-Sí -contestó Justin, que la sacó desnuda de la cabaña y la colocó junto a una roca con el mar de fondo-. Sonríe y abre los brazos. 
La luz del alba era un espectáculo de matices rosados. Al salir sobre el mar, los primeros rayos del sol dieron a Justin en los ojos, unos ojos serenos. 
-Ahora sé que te estaba esperando -dijo. 

Un Novio PerfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora