Wherever You Are. (5SOS) Terminada.

~Capítulo 2. "Michael."

Siento que me echan algo en la mano y puedo oír voces de fondo,algo me hace cosquillas en la nariz. Oh vaya,la típica broma de la espuma de afeitar y la pluma, que originales. Nótese la ironía.

Si creen que voy a picar están muy equivocados. Abro muy poco los ojos,dejándome distinguir dos siluetas a cada lado de mi cuerpo. Pues la broma se la van a llevar ellos,je.

- Sh, Ash no hagas ruido. -Esa voz era de Luke.

- Lo intento. -Respondió el mencionado.

Reí para mis adentros mientras ellos seguían haciéndome cosquillas en la nariz con la pluma, ya no podría aguantar más así que, la mano izquierda -que era la que tenía la espuma de afeitar-, la moví rápidamente hasta la silueta de mi derecha y la planté en su cara.

- Si creéis que podéis gastarme una broma estáis equivocados,nadie puede cazarme. -Dije incorporándome en el colchón.

- Vale...Hemos fallado ,chicos. -Dijo Luke riendo.

- Iré a lavarme la cara. -Dijo Ash.- ¿Por qué siempre me toca a mí ser el cazado cuando intento cazar?

Mientras él iba al baño los demás fuimos a la cocina a desayunar.

- Tenemos: Nutella,masa para tortitas y nata montada. -Explicó Michael.- ¿Qué desayunamos?

- Fácil. -Respondió Cal.- Tortitas con nutella y nata montada. -Sonrió  satisfecho por su idea.

- Vale. -Dijimos todos.

- El que diga 'Yo no' el último hace las tortitas. -Rió Luke.

- ¡Yo no! -Dijimos los cuatro al unísono.

- ¡Yo no! -Repitió Ashton cincuenta veces entrando a la cocina.

- Lo sentimos,Ash. -Dije.- Te ha tocado.

- Que no se me queme la casa o te mato. -Amenazó Michael divertido.

Dejamos a Ash en la cocina y nos fuimos al salón a ver la tele.

Me levanté a por un vaso de agua,ya que,Calum me lo pidió.

- Hey... ¿Qué tal vas? -Pregunté llenando un vaso de agua.

- Perfectamente, ya he terminado. -Sonrió satisfecho.

- Sólo espero que no estén malas. -Reí.

- Tranquila, no lo estarán. -Me guiñó un ojo y me puse nerviosa por unos segundos.

Volvimos al salón con los demás.

- Trae. -Me dijo Calum extendiendo los brazos para coger el vaso.

- No. ¿Cómo se dice? -Aguanté una risa.

- Puf...-Bufó.- Muchas gracias,señorita Ana, le debo un favor. -Dijo con tono pesado.

- ¿Y....? -Dije para que continuara.

- ¿Te quiero? -Dudó por la respuesta.

- Muy bien, así me gusta, Calumcito. -Reí y le di el vaso de agua.

[…]

Estuvimos jugando hasta las doce y media a la Xbox y al escondite,sí,al escondite, me hacía ilusión.

- Chicos,creo que debo irme ya...Mi madre debe extrañarse porque no me haya despertado. -Dije agachando la mirada.

- No te vayas. -Dijeron a coro.

- Eh, vuestras voces suenan bien juntas, ¿habéis pensado en formar un grupo? -Dije divertida.- Hasta luego chicos.

Me despedí de todos con un abrazo y me fui a mi casa, era la una del medio día y mi madre debe estar extrañada y enfadada.