Wherever You Are. (5SOS) Terminada.

~Capítulo 36. "Ashton en el hospital."

Un año después...

- Mike.. -Susurré entrando al backstage y cerrando la puerta detrás de mí.- Ash nos puede ver...

- No, no nos verá.. Venga, por favor... Lo necesito. -Suplicó besando mi cuello y cogiéndome a horcajadas.

- Pero Michael... Ahora nos pueden descubrir...No como las veces anteriores.. -Lo aparté de mí y me quité la chaqueta mientras lo empujaba al sofá.

- Dices que no pero me estás llevando tú al extremo.. -Sonrió y me subí encima de su cuerpo, quitando su camiseta y sus pantalones sudados del concierto.

- Calla. -Puse mi mano en su boca y me quité la ropa desesperadamente.- Esto no es engañar, ¿verdad?

- Si no estáis juntos no. -Suspiró.- Te lo he repetido las cien veces que lo hemos hecho durante el año...

- No han sido cien... -Lo miré desafiante.- Sólo unas veinte..

- ¿Llevas la cuenta? -Preguntó masajeando mis pechos.

- Sí, puede ser. -Sonreí y lo besé en los labios.

Ashton me iba a matar como se enterase pero...Michael es súper sexy y no puedo controlarme. Me pone muchísimo, al igual que Ashton claro, pero Mike me incita más veces que Ash. Seguimos sin ser novios desde aquél trágico día y meses después empecé a verme a escondidas con Michael porque nos atraíamos físicamente y Ashton andaba de aquí para allá con las cosas de la banda y el único que me hacía caso era él, me siento refugiada en él porque sé que me quiere, no como algo más que amiga, ni yo a él. Sigo queriendo a Ashton pero Mike me da lo que quiero ahora mismo; cariño, comprensión, calided, amor, sexo, ánimo.

- Oh dios...Ana... -Gimió en mi boca cuando entró en mí de una embestida.

- ¡¡Shh!! ¡No gimas tan alto que nos van a oír! -Dije con la voz temblorosa.

- Es que me pones muchísimo, pequeña. -Mordió mi cuello haciéndome estremecer y me moví más rápido encima de él.- ¡Oh sí! ¡Eres como el champú del anuncio! ¡Me das unos orgasmos increíbles!

- ¡Calla, idiota! ¡Oh Michael! -Exclamé demasiado alto que él me tapó la boca con las manos y lo miré apenada.

Seguimos besándonos y moviéndonos al compás, dándonos placer mutuamente. 

- ¡Oh sí! -Gritó él corriéndose dentro de mí.- ¡Nena, eres increíble! -Dijo besando mi frente.

- ¡Lo sé, baby! -Reí, aún no había salido de encima de él cuando abrieron la puerta de un golpe.

Los dos nos giramos asustados y nos quedamos colorados viendo su cara de enfado y decepción.

- Ash... Yo.. -Comencé a hablar pero las lágrimas cayendo por sus mejillas me interrumpieron junto a un sonido agudo que salía de su voz.

- ¿Cómo habéis podido? -Dijo controlando sus ganas de matarnos.- ¡Esto es imperdonable!

- Ashton, tío... -Mike empezó a hablar.- Lo siento muchísimo, es que... Tú no la hacías caso y..Además, no estáis saliendo.

- ¡Me la suda, Michael! ¡Me la suda todo lo que digáis, esto es imperdonable! -Gritó mientras lloraba. Verle así me rompía por dentro pero todo fue su culpa. Él hizo que esto pasara, si él me hubiese hecho caso y me hubiese dado lo que Michael me ha estado dando... Esto no hubiera sucedido.- ¡Creía que me querías! -Me señaló. Salí de encima de Michael y me tapé con mi ropa.

- ¡Y te quiero, Ash pero lo que te ha dicho Michael es verdad! -Exclamé avergonzada.

- ¡Si me quisieras no me hubieses engañado con... Uno de mis mejores amigos! -Levantó los brazos al cielo y siguió llorando.- ¡Eres una zorra! ¡Nunca pensé que podrías llegar a engañarme!