Wherever You Are. (5SOS) Terminada.

~Capítulo 39. "¿Quieres casarte conmigo, enana?"

~Ana~ 

- ¡Pa..Mitch! -Exclamé llegando a su casa.

- Puedes llamarme papá... -Sonrió abrazándome. 

- Vale... -Escondí mi rostro avergonzada.- ¿Pasamos y me enseñas mi cuarto?

- Claro. -Sonrió besando mi mejilla y entramos.- Mi pareja vendrá mañana, está en casa de sus padres...Ya la conocerás, te encantará. -Se rascó la nuca nervioso.

- Genial. -Le guiñé un ojo.

Subimos a mi cuarto, las paredes eran lisas de color morado, tenía una terraza que daba al patio delantero y un escritorio al lado de la ventana. La cama en frente de un espejo bastante grande y al lado un armario empotrado.

- ¿Te gusta? -Preguntó con una sonrisa amplia, lo miré y sonreí.

- Me encanta. -Reí.

- Voy a preparar la cena mientras te instalas.. -Sonrió y me abrazó.

- Genial. -Dije mientras se marchaba.

Mientras colocaba la ropa en el armario mi móvil comenzó a sonar. Lo cogí.

- ¿Has llegado bien? -Preguntó mi hermano desde el otro lado.

- Sí, está muy contento. -Sonreí aunque no pudiera verme.

- Me alegro, te echamos de menos.. Vuelve pronto. -Su tono era alegre pero triste a la vez.

- Lo haré, os quiero, da recuerdos. -Dije riendo.

- Sí, te queremos. -Acto seguido colgó.

Bajé a cenar con él y hablamos de muchísimas cosas, de lo que nos había pasado en éste tiempo y más. Obviamente no le conté lo de Ashton y Michael... Me mataría, sigue siendo un padre para mí.

- ¿Qué tal está Jaxon? -Preguntó cambiando de tema.

- Genial, están los tres genial. -Sonreí. Olvidé mencionar que cuando se casaron Chloe y Jaxon, invitaron a Mitch a la boda, culpa mía. *Saca la lengua*.- Samantha no quería que viniera.. -Reí.- Me quiere mucho.

- Será una niña muy guapa como su tía. -Rió y yo con él.

- Sí. -Reí.- Tú... ¿Has vuelto a verla? -Dije preguntando por Debby y él sabía a quién me refería porque mi cara se puso seria.

- Sí, un par de veces pero de pasada... -Suspiró.- ¿Quieres verla?

- ¡Ni muerta! -Exclamé.- Sólo..Quiero saber quién es mi padre biológico, si no te importa. -Dije jugando con el tenedor.

- No, claro que no me importa. -Sonrió.- Sé dónde vive, te puedo llevar... Lo ví hace tiempo y le comenté sobre ti, quiere conocerte.

- ¿De verdad? -Abrí los ojos demasiado.

- Sí.. -Sonrió de lado. Me levanté de mi silla y me puse a su lado para abrazarle.- ¿Qué pasa?

- Que aunque vaya a conocer a ese hombre, tú siempre serás mi padre de verdad. -Besé su mejilla y él sonrió. Rebosaba felicidad en aquellos instantes.- ¿David Haynes se llamaba? -Mitch asintió.- ¿Tiene hijos?

- Sí, uno. -Contestó mirándome.- Se llama Colton, tiene veintiséis años.

- Vaya... -Me quedé impresionada.- O sea que tengo un hermanastro...

- Sí..-Suspiró.- Vamos a dormir que ya es tarde, llamaré a David para quedar por la mañana con él.

- Genial. -Recogí los platos y subí a mi cuarto a ponerme el pijama. Me dormí en segundos.