Dark

u n o

-sólo los tontos caen por ti, sólo los tontos hacen lo que hago. Solo los tontos caen.-

Maddison, se levantó aquella tarde de junio, con ganas de recolectar insectos para disecarlos como solo ella sabia hacer.

Ese era el único motivo por el cual era conocida en la cuidad.

Maddison era una amante a la naturaleza, pero lo único que podía hacer era disecar insectos ya que no sabia dibujar y sentía que la fotografía era algo muy común.

Después de levantarse se preparó para salir, cogió dinero, unos cuantos frascos su celular y un bolso donde entrar todo eso, se dirigió a bajar las escaleras y entro a la cocina para coger un jugo de pera donde encontró a su padre debatiéndose si hacer macarrones con queso o pedir ayuda a su esposa.

- Papá voy a salir por más insectos. ¿Me puedes guardar cena?.

- Ni siquiera sé lo que haré para cenar. Se me a olvidado como hacer macarrones con queso, hija.

- Te daré la luz al final del túnel. Pídele ayuda a mamá.- dijo pasando por su lado y dejándole un beso en la frente.- Nos vemos luego.

- De acuerdo. Te cuidas.

Maddison rodó los ojos con diversión.

- Oh se me olvidaba, ¿Me puedo llevar el auto?

- De acuerdo, pero no llegues tarde.

- Gracias. Nos vemos.- dijo yendo por las llaves.

Maddison salió de la casa y se subió al auto, pero antes de ir al bosque decidió ir por un café.

No llevaba mucho tiempo en Medellín, ya que fue solo por estudiar. Iba a ir sola, pero sus padres no lo permitieron ellos dijeron que seria una buena oportunidad para hacer un cambio en sus vidas y ella sin más, aceptó.

Maddison entro en la cafetería que tanto le encantaba e hizo la fila para pedir la orden.

-Buenas tarde. ¿Qué desea ordenar? - le preguntó un chico llamado Mike.

- Un expreso por favor, mike.

- Como siempre - respondió en tono divertido, acomodándose los lentes - ¿Nombre?

- Ay si como que no lo sabes. - respondió mientras rodaba los ojos con diversión.

- Enseguida, Madd. - Respondió para darse la vuelta y hacer el expreso.

En menos de tres minutos Maddison y su expreso se dirigían al bosque.

A Maddison le gusta estar más de noche en aquel bosque ya que aparecen mas insectos de los que pueda vender y recolectar.

Maddison maldijo internamente al llegar al bosque ya que se había dado cuenta que había olvidado su linterna roja.

Antes de bajar del carro dio su último sorbo, por ahora, a su café con leche.

Bajo del coche con una bolsa con frazcos en una mano y su celular en la otra.

Ya había pasado más de una hora, Maddison había recolectado unos 5 insectos, pero no estaba satisfecha.

Caminaba en busca de su ultimo ya que había oscurecido y su celular solo tenia 10% de batería, pronto se apagaría. Comenzó a escuchar pasos, pero no lo tomo en cuenta. Los volvió a escuchar, pero quiso no tomarlos en cuenta. Cada vez se sentían mas cercas y más pesados. Empezó a escuchar susurros, intento no alarmarse, pensando que podía ser solo su imaginación.

>>¿Quién estaría en la noche en un bosque además de una loca como yo?<<

Pensó y solo valió una sola pregunta para que sus miedos se zafaran.

Escuchó los pasos como si la persiguieran. Iba a gritar, pero nadie la escucharía.

- Mierda, no...- Dijo alarmada pensando en que hacer.

Corrió donde había mas yerba y se tiro a esta, apagó la linterna de su celular que en ese entonces estaba en 5%. Marcó el teléfono de su padre, pero ya era tarde, su celular había muerto.

Escucho un sollozo...

- ¿Por qué lo hiciste padre?. ¿Por qué me abandonaste?. Yo te amaba... ¡Te amo!, ¿Y así me pagas?.- Era la voz de un hombre. Sonaba... ¿roto?.- Pero mira como terminaste, ¿no?. ¿¡Es que no entiendes!?.

Maddison intento ver la cara de aquel tipo, ya que él traía consigo una linterna, pero no solo eso, también algo raro, ¿una bolsa? No lo podía ver bien...

-Maldita sea, Maddison, ¿Por qué no te pusiste tus gafas?.- se riño susurrando.

- Waoh, si que pesas padre. -Dijo el chico soltando un risa seca.- Y lamentablemente ni te pudiste despedir.- Volvió a reír secamente mientras absorbía la nariz.

Maddison se intento levantar y huir al darse cuenta que aquel chico se dirigía a otra dirección, pero la curiosidad por saber que traía consigo la mataba, sabia que se estaba metiendo en la boca del lobo, pero quería arriesgarse.

Intento seguirle los pasos sin que se diera cuenta. Al acercarse lo suficiente, se sintió idiota.

Vio al chico empezar a quitar un mantel que tapaba un oyó...

>>¿Desde cuándo estaba ese oyó ahí?<<

Tiró aquella bolsa o lo que sea a aquel oyó y sollozo soltando maldiciones y quejas. Maddison al darse cuenta de que no encontraría nada más y que podía volver a investigar decidió retirarse, pero la vida no se lo pondría tan fácil, no después de que haya entrando a la boca del lobo.

Maddie al darse la vuelta topo una pequeña rama que al ser pisada se rompió y sacó un sonido que cualquiera no le daría miedo, pero Maddie sabia lo que le esperaba...

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Hey there, no olviden darle un estrellita en forma de apoyo, se los agradecería mucho. ;)

También comenten sobre que creen que pasará o algo random sobre la novela. ♧

Gracias, y que tengan un hermoso día.♡