Todo iba bien, mejor de lo que Jimin podía imaginar, su vida se hubiese vuelto perfecta si no fuera por su acortado tiempo libre y por ende pocas posibilidades de estar afín con el Rubio para poder salir aunque sea un momento.
Después de haberse reunido con su Alfa se mantuvieron conversando por mensajes, realmente la vida de ambos era ocupada y debían conformarse con eso.
Nuestro pequeño pelirrosa se encontraba en la escuela tratando de poner atención al profesor de literatura pero tenía otras cosas en la cabeza que no le permitían concentrar.
No había visto a JungKook ni le había mensajeado ni un poquito, la última vez que se vieron el pelinegro actuaba raro, le preocupaba demasiado así que decidió devolver la comunicación entre ambos, de todas formas no entendía nada de la clase.
Mocchi~ ❤
Kookie, ¿Estás bien?
Enviado: 9:36 a.m.Kookie~ 🐹
Todo bien pequeño, no te preocupes.
Recibido: 9:40 a.m.Mocchi~ ❤
¿Tú fuiste quien me quitó peso en el trabajo?
Enviado: 9:42 a.m.Kookie~ 🐹
No quería que te agobiaras
tanto por haber faltado
Mocchi. :)
Recibido: 9:45 a.m.Mocchi~ ❤
Gracias Kook,
¡Eres el mejor! ❤👑
Enviado: 9:50 a.m.[...]
Un pelinegro nervioso se removía en su cama, sus pensamientos lo estaban comiendo vivo.
- Si le digo tal vez estropee todo lo que ya logré con él pero tampoco quiero seguir así, quiero más, necesito más de él...
Todo mundo ha estado en esa situación, ¿No?, amar a alguien profundamente pero en secreto y tener miedo a revelarlo.
JungKook ha querido a Jimin desde el primer momento que vio su sonrisa, todo en ese niño era jodidamente perfecto, no había otro adjetivo, hasta su diente chueco era perfecto, sus manitas chiquitas que tanto odiaba también lo eran, nadie se le comparaba.
A pesar de todo lo que Kookie quisiera a Jimin él sabía que no era recíproco, en todo lo que llevaba de conocer al pelirrosa este nunca ha mostrado interés en él y ciertamente tampoco en ningún otro Alfa o al menos no en su presencia, era más probable que diera buenos comentarios acerca de un Beta u otro Omega que de un Alfa.
El único del que el pelinegro había oído hablar demasiado bien por parte de Jimin era un rapero que le gustaba pero él nunca lo consideró con relevancia pues ¿Qué probabilidad había que ellos dos se conocieran como tal?, posibilidades nulas tal vez.
La vida de JungKook no era complicada, se dedicaba a trabajar la mayor parte del tiempo y su tiempo sobrante se lo dedicaba a su pasatiempo favorito, el arte siempre fue su fuerte aunque para él no había complicación en intentar cosas nuevas, siempre resultaba bueno en las cosas que hacía, claro que había algunas excepciones como cortejar a los Omegas, a veces el simple hecho de hablar con ellos le era sumamente difícil.
La historia detrás de todo esto es sumamente corta, cuando el pequeño JungKook a la edad de dieciséis años se enamoró por primera vez fue de una Omega un año mayor que él, era sumamente codiciada en la escuela y Kookie se armó de valor para invitarla a salir, ella aceptó muy fácil, debió saber que algo andaba mal desde ahí pero su felicidad opacó a su escepticismo.
Ese día se levantó temprano y se arregló todo lo que pudo, al llegar esperaba encontrarse con una hermosa Omega sentada en una banca del parque frente a la plaza a la que la invitó, sin embargó no encontró a nadie, la esperó durante aproximadamente dos horas y nunca llegó, en la escuela lo convirtieron en la burla de la misma por iluso.
Desde entonces hablar o invitar a salir a alguien le era sumamente difícil, entraba en pánico pero el ambiente con Jimin se sentía menos pesado de lo que lo sentía con otras personas, se sentía seguro y cuidado, y su instinto de Alfa le obligaba a hacer sentir lo mismo al Omega, tenía un lazo con él pero no era un lazo de pareja, era otra cosa, sentía responsabilidad de cuidarlo y mimarlo por más fastidioso que fuese en algunas ocasiones portarse así.
Naturalmente lo ayudaba con las cosas del trabajo pues Jimin era un poco torpe con los papeleos y después del tiempo que llevaba ahí JungKook ya era un experto, de vez en cuando -Demasiado rara la ocasión- lo ayudaba con las tareas domésticas o con sus materias, como dije antes, Kookie era un prodigio en toda la extensión de la palabra.
Ahora en su situación actual sólo se dedicaba a tratar de tomar valor y decirle lo que sentía al pequeño Omega, debía ser valiente y dejar todo rastro del pasado atrás, además, él sabía de sobra que Jimin no tenía a nadie detrás de él oficialmente y eso le facilitaba todo.
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Conociendo a mi Ídolo ~Yoonmin~ Omegaverse
Fanfiction"De ahora en adelante todas mis canciones de amor son para ti, Park Jimin..." ~~~~~~~ Park Jimin era un Omega joven que disfrutaba tanto la música como del baile, uno de sus grupos favoritos de Música visitó la ciudad en la que se encontraba y d...