Ruleta rusa

13/12/2012

¿Un diario en el siglo XXI? Resulta gracioso pensarlo. Sólo me imagino a alguien tan anticuado cómo yo teniéndolo.

¡Soy un adolescente, por dios! Debería estar... no sé, bebiendo, fumando... drogándome. Pero no, estoy aquí.... Escribiendo un diario, que sólo yo leeré. O eso espero... No me imagino a nadie más leyendo esto, me da pánico el solo pensarlo. Bueno, en realidad no es cómo si tuviera muchos secretos, pero, me estoy volviendo loco. Tengo que encontrar alguna forma, algún amigo, alguien a quien poder contarle mis cosas. Pero no lo tengo. ¿Por qué? No lo sé. No me considero mala persona, la verdad. Tampoco soy... antisocial, ni mucho menos tímido. Creo que me cuesta mucho confiar en la gente. Tal vez con decir que no tengo amigos... me he pasado, ¡claro que los tengo! Pero, la verdad no los considero... tan amigos que digamos. Creo que con el hecho de que deba escribir un diario, queda más que claro porque no los considero "tan amigos".

En fin, tengo que decir que cada día se me está haciendo más difícil el ir a la escuela. Sinceramente, odio a la profe de lenguaje. Siempre hablando de poetas, de retórica, de la forma en que la gente se expresa. ¡Cómo odio semejante superficialidad! Odio el tener que analizar el porqué. ¿Por qué siempre debe haber una razón? ¿Por qué las cosas no pueden ser así... porque así son nomás, y simplemente son, porque son? Que vacilaciones tengo. Ya no sé qué pensar. Siempre encuentro razones para cambiar mis pensamientos. En mí, todo es efímero. Hasta ahora, ningún sentimiento ha durado más de un mes. A veces llego a pensar que tengo algún tipo de trastorno... o algo. Mi mamá ya me ha dicho que soy un exagerado. Supongo que tiene razón.

¿Por qué he decidido hacer un diario? Quiero recordar cómo soy. Quiero recordar quién soy, y dónde voy, por si algún día llegase a perder mí esencia. Eso suena ridículo. Hablo cómo si mí esencia fuera muy especial. Estoy seguro de que no soy especial. Ser especial debe ser muy complicado; siempre debes sobresalir... siempre debes ser la excepción, siempre debes ser tú, y nadie más. A veces es odioso conocer a alguien así, agobiante. Puede que incluso hasta me cause cierta envidia este tipo de personas. Es inconsecuente, lo sé. Acabo de decir que son gente odiosa, pero, hay algo en ellos que hace que sean envolventes, misteriosos. Creo que cada persona tiene un misterio, pero, su misterio es más evidente, te invita a buscarlo. Te invita a terminarlo. Lo malo es que nunca acaba. Nunca terminas de descubrirlo. Es más, mientras más te adentras, más dudas tienes sobre lo que ya descubriste; no sabes si es verídico, o sólo han sido ideas tuyas.

Bueno, creo que eso será todo por hoy. Me está doliendo la mano por escribir. Que estúpido, suena como si hubiese escrito mucho... Bueno, a mí yo del futuro: espero que hayas podido superar esta flojera tan grande con la que vivo.