(En el distrito 12):
Era un día precioso el sol brillaba y yo salía del colegio, estaba feliz ya que habían terminado las clases. De camino a casa vimos ocho camiones militares de color caqui, situados en las entradas y salidas del distrito, de ellos salían unos hombres uniformados de color caqui igual que el camión.
Libby y yo aceleramos el paso. Cuando llegamos cerca de mi casa vimos a lo lejos dos camiones más en la puerta de mi casa Libby y yo nos miramos y corrimos en dirección a mi casa temiéndonos lo peor.
Asustada, tragué saliva y giré el manillar de la puerta, Libby me miró y me dijo:
-¡Vamos! ¿a que esperas?.-Su voz sonaba más desesperada que la mía.
Entonces abrí la puerta, mi corazón iba a mil por hora. Había tres niños más o menos de mi edad, un señor de la edad de mis padres todos ellos uniformados igual que los militares que vi antes y una niña muy pequeña jugando con nuestro gato a parte de ellos estaban mis padres y mi hermanito. Todos posaron la mirada en mi y en Libby.
-Prim, querida puedes llevarte a estos chicos a la sastrería.-dijo mi madre
-Claro.-Asentí extrañada.
Me dio una bolsa con dinero y salí de allí cogiendo a Libby del brazo.
-¿Me vas acompañar? ¿No…?-dije nerviosa.
-Creo que es mejor de que vallas sola y luego me cuentes, yo no pinto nada allí.-dijo yéndose en dirección a su casa.
-¿Y yo sí…?.-no me dejaron terminar la frase ya que salían ya de allí aquellos chicos que vi dentro de mi casa.
Empecé a andar en dirección a la sastrería, no tenía ganas de presentaciones, así que aligere el paso. Entonces cuando me quise dar cuenta ya estaban completamente al lado mía, lo que me hizo sentir incomoda.
-Hola me llamo Boggs .-dijo uno de ellos.
-Hola yo soy Prim.-respondí yo.
-Yo soy Gale.-dijo otro de ellos, este le pegó un codazo a otro para que hablara.
-Emm… Yo soy Jackson.
-¿Bueno y que hacéis aquí? .-Pregunte.
-Bueno estamos en una especie de misión-dijo Boggs
-Es una misión imbécil. Te lo tomas todo muy a la ligera...- dijo Jackson.
-Chicos dejadlo ya.-dijo Gale.
-¿Qué pasa te crees papá?. Por liderar esta misión. –dijo Jackson.
Menos mal que llegamos a la tienda porque sino creía que iban a empezar a pegarse puñetazos.
Cuando llegamos yo me senté en el escalón de la sastrería con la cabeza apoyada en una pared, pensando de que misión de referirían.
Oí unas risas gire la cabeza era mi hermano estaba dentro parecía que se llevaba muy bien con ellos, pero mi hermano siempre a sido mas sociable que yo.
Cuando de repente se me acercó Gale, se puso bien la camiseta y se sentó.
Cómo vio que pasaba de él, me dijo:
-¿Te pasa algo?.- me dijo Gale.
-No.-contesté.
-¿Puedo preguntarte algo?.-preguntó.
-Depende.-conteste.
-¿Hay algún sitio para cazar por aquí?.
-Sí. Subes esa cuesta, giras y …-me interrumpió
-No hace falta que me lo expliques, ya iré contigo.
Le miré a los ojos, tenía unos ojos azules, eran unos ojos muy bonitos, un mechón de pelo de color castaño-rubio que le tapaba parte del ojo derecho. Mire hacía abajo y vi que su cuerpo estaba bien, bastante bien. Entonces me pilló mirándole y sonrió. Aparte la vista, pero el seguía mirándome con una sonrisa en su cara, en ese momento me sonrojé.
De repente apareció mi hermano.
-Veinte.-Dijo mi hermano.
-¿Qué? -Pregunté-
-Son veinte bayas.
Saqué la bolsa y se la di a mi hermano.
-Aquí tienes.
**
De camino a casa el camino fue silencioso tan solo se escuchaban el canto de los pájaros.
Quería que volvieran a sacar el tema de las misiones, esta vez no me iba a conformar hasta saber todo sobre esa misión pero por mucho que lo intente no dijeron nada.
Llegamos a casa mi madre me aparto la comida.
-¿Ya habéis comido? -pregunté extrañada.
-Sí Prim.-dijo mi padre.
El ambiente era incomodo.
Empecé a comer, aunque con todo el mundo mirándome era difícil.
-Prim, ¿quieres hablar ahora o prefieres terminar de comer? -dijo mi padre.
-Supongo que ahora. ¿De que tenemos que hablar? -dije.
-Creo que debería de contártelo mejor él.-dijo mi padre señalando al señor uniformado del que no sabía su nombre.
-Bueno señorita Primrose.-dijo el señor.
-Prim.-respondí.
-¿Qué? -pregunto.
-Llámame Prim… por favor.-contesté.
-Prim yo soy el comandante Gale
No sabía que decirle a un comandante, busqué hasta que encontré la palabra que más se acercaba a lo que estaba bien decirle.
-Encantada-contesté mientras seguía comiendo.
-Lo mismo digo. Bueno mi familia y yo hemos venido porque te necesitamos.-dijo el Comandante.
-¿A mí? -Conteste extrañada.
-Sí, a ti.-Respondió.
-¿Por qué me necesitan?-Pregunte cada vez más extrañada.
-Bueno Panem necesita un….-dijo intentando que no le temblara la voz.
-¿Qué?-dije con el corazón a mil por hora.
-Sinsajo. -respondió firmemente.
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El chico de la multimedia es Gale pero no el comandante si no el hijo de Gale ¿que les parece?. ¿Os gusta? ¿Como creerán que continua la historia? ¿Qué les gustaría que pasase?.
¡Por cierto mil gracias a Matha_Lila por hacerme la portada que me encanta!
