Capitulo 20 MARATON 2/3 " tú siempre me haces sentir mejor."

84 4 0
                                    

(_____)

Liam dijo que tenía algo que decirme, así que callé completamente para escucharlo hablar, pero él solo se acerco a mí con una expresión difícil de analizar, me acarició la cara, tan delicadamente que hizo que mi piel se erizara lentamente dándome una sensación de ternura, lo miré a los ojos, no quería parpadear porque estaba memorizando sus ojos color caramelo, pero me fue inevitable no cerrar mis ojos cuando su nariz acarició la mía delicadamente, haciendo que deseara más el beso que segundos después llegó, dejándome completamente desarmada, desarmada para continuar luchando contra lo que él me hacía sentir, era algo nuevo, algo que la gente llama, “amor”.

-ya está lista la…- josh rompió la conexión del momento, liam despegó sus labios de los míos pero aún me mantenía abrazada de la cintura, mi hermanito hizo una mueca de asco, lo que nos hizo reír.

-qué asco, ¿Por qué se dan besos en la boca?- liam rompió nuestro abrazo y se agacho a la altura de josh.

-no creo que pienses eso cuando tengas 18 años josh- mi hermano solo negó rotundamente con la cabeza.

-las niñas son tontas, por lo menos las de mi escuela, porque a ninguna le gusta el futbol- escuché la risa de liam que aún miraba a mi hermano con ternura.

-bueno, _________ no es tonta, y le gusta el futbol, ¿eso la hace besable no?- josh se quedó pensativo por unos segundos, luego se acercó a mí.

-sí, eres besable, solo porque te gusta el futbol si no, no- me agache a la altura de mi hermano, aún debía pedirle que lo que acababa de ver lo mantuviera en secreto.

-oye josh, lo que viste, ¿podría ser nuestro pequeño secreto?, solo por ahora- mi hermano asintió, entonces yo le enseñé mi dedo meñique esperando a que el me enseñara el suyo.

-¿pinky promise?- el enano negó frunciendo el ceño.

-eso es de niñas, mejor chócalas- sonreí rindiéndome ante mi hermanito, ambos chocamos palmas y él se fue al comedor.

-yo…- tomé a liam de la mano y lo jalé al comedor dejando que las palabras sobraran, no estaba lista para esto, para hablar de lo que podría ser el comienzo de una relación, primero debía hablarlo con el doctor fletcher, porque yo aún tenía mucho miedo de contarle a liam lo que me pasaba.

-vamos a comer- ambos llegamos al comedor, estaban papá, anne, dani, peter y josh, liam y yo nos unimos aunque noté cierta tensión en la mesa, más específicamente entre liam y danielle, tal vez aún estaban enojados por la ton*ta pelea de hace una hora, que infantiles. El teléfono de la casa sonó, papá fue a contestar y regresó con el teléfono inalámbrico en mano y una cara de pocos amigos.

-es tu madre- me dijo, me tense de pronto, me pasaba cuando mamá llamaba para saludar, no es que no me gustara hablar con ella, pero, siempre termina mal nuestra conversación.

-hola mamá- me disculpé con todos en la mesa y me retiré hasta la sala, tomé asiento en un sofá para escuchar la voz de mi progenitora desde california.

-¿Cómo estás, mi nenita preciosa?, te extraño cielo- sonreí por la ternura espontanea de mi mamá, amaba que pusiera apodos cariñosos, desearía que estuviera aquí para darle un abrazo.

-yo también te extraño mami, tengo muchas ganas de abrazarte- escuché un sollozo por parte de ella, que me hizo darme cuenta que yo no era la única que sufría, ya ayer había visto a mi papá llorar por lo que me estaba pasando, ahora mamá.

-yo también quiero abrazarte cariño, pero… cuéntame, ¿Cómo va tu terapia?, ¿todo está bien?, ¿esa mujer con la que vive tu padre te trata bien?, ¿quieres volver conmigo?, porque si es así hoy mismo te compro un boleto de avión de regreso, pídeme lo que quieras amor, te mando más dinero, te compro un boleto para que vayas de compras a parís, Milán, tu solo pídelo cariño, ¿dinero para un auto nuevo?, solo dilo y lo tendrás- dijo aún con la voz quebrada, esto, es exactamente lo que odio de mamá, que quiere comprarme, que piensa que con pedirle cosas y que se me den seré feliz.

-todo va bien mamá, el doctor fletcher es genial, anne es una gran persona, me trata muy bien, como un miembro más de la familia- no como Paul- me ha gustado Londres ma… creo que me quedaré aquí… pero necesito verte,¿ no podrías venir a verme?- estaba deseando con todas mis fuerzas un momento con mamá, porque desde que salí de rehabilitación, ni ella ni yo habíamos tenido mucho espacio para platicar y perdonarnos.

-en vacaciones de verano puedo ir a verte- ¿Qué?, ¿vacaciones?, mi madre se ha vuelto loca, falta mucho para eso, yo la necesito, la necesito muchísimo.

-mamá, te lo estoy pidiendo, por favor, llevo meses sin verte, cuando estaba en rehabilitación, ¿sabes cuantas veces fuiste a verme?, solo una, ¡SOLO UNA!, ¿acaso no quieres verme también?- le dije con la voz quebrada y un nudo en la garganta gigantesco que quería deshacerse en un llanto interminable

-no creo que se pueda cielo, Paul tiene mucho tra…- le colgué, si, así como lo oyen, le colgué, ¿Por qué?, porque siempre es Paul, “Paul esto”, “Paul lo otro”, él siempre viene primero, luego Carla y jessica, y por último, y lastimosamente yo, no quiero ser así con mi madre, la amo, y desearía que ella me amara de la forma en que lo hace mi papá, pero no, ella tiene su peculiar forma de querer a la gente, su amor se basa en la perfección y el estatus económico de la gente.

-__________ se va a enfriar tu comida- esa era la voz de mi padre, miré hacia mi estomago, no tenía hambre, quería que todo se fuera a la mier*da hasta que mi madre me tome como primera opción y no como última.

-no tengo hambre- tenía ganas de llorar pero no delante de papá, mucho menos de liam, sé que tengo que verlo en unos minutos.

-ve a comer ahora _______, no te estoy preguntando si tienes hambre o no, ve a comer, ¡ahora!- jamás me había hablado de esa manera, ¿era necesario gritarme?, el nudo en mi garganta se hizo más grande.

-es…está bien- caminé lentamente al comedor seguida por mi padre, peter conversaba con anne animadamente mientras que danielle estaba callada y liam escuchaba atentamente a josh hablar sobre su próximo curso de futbol.

-¿todo bien linda?- me preguntó mi hermanastra observándome preocupada.

-sí, claro- le sonreí tratando de ahogar mi tristeza, tomé los cubiertos y piqué un poco la comida, mi padre me miraba atentamente, cada movimiento que hacía, sé que me prometí a mi misma no volver a vomitar, ni a sentirme de esta forma, pero a veces esto es más fuerte que yo, danielle y peter terminaron y se retiraron despidiéndose de todos, noté como danielle miraba intensamente a liam por unos instantes pero él la evitaba, josh también terminó y anne se apresuró a llevarlo a sus clases de futbol en la escuela, mi padre aún seguía ahí esperando a que yo terminara, pero de ningún modo planeaba hacerlo, liam también seguía ahí sentado junto a mí.

-ya no quiero- iba a levantarme cuando papá fue más ágil e hizo que me volviera a sentar.

-tú no te vas a levantar de esta mesa hasta que te termines todo- ¿es que acaso teníamos que hacer esto delante de liam?, ¿Cuál era el problema?, solo no tengo hambre y ya, bueno en realidad si hay un problema ___________, “eres anoréxica”, no puedes solo saltarte así las comidas, es riesgoso, es como caer lejos del camino hacia la rehabilitación.

-N-O, tengo hambre, ¿Qué parte no comprendes?- le dije de un modo algo grosero a papá, por lo que pronto me arrepentí- lo siento.

-comprende tú _________ no puedes…- el celular de alguien comenzó a sonar, era el de mi padre, él contesto y refunfuñó por lo bajo.

-tengo que irme a trabajar, surgió una emergencia… liam, ¿podrías asegurarte que se coma todo?- giré mi rostro y vi como el rubio asentía con expresión seria, papá salió del comedor, luego solo se escuchó la puerta principal de la casa cerrarse.

"Mi chica/ My Girl" Liam Payne & TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora