LOS CONDENADOS: GÉNESIS

Primero el relámpago y después el trueno

Bridgitte no estaba muy contenta de verme e intentaba evitarme a toda costa, pero yo no me iba a dar por vencido. Me pare frente a ella y di un respiro profundo antes de hablar.

- Bridgitte, lo siento. No todos tenemos el valor que tú tienes. Tienes razón yo no conozco a Ryder como tú, no sé si el regrese o no, pero de una cosa si estoy seguro. Voy a pelear a tu lado hoy y siempre.

Bridgitte comenzó a llorar, me abrazo entre lamentos y lágrimas comenzó a hablar.

- Gracias Red Soul, gracias por no abandonarme.

Yo abrase a Bridgitte con fuerza. Ella no era una heroína de película a la cual nada le afectaba. Ella solo era una chica de quince años intentando sobrevivir en este mundo tan hostil.

Pasaron tres días en los cuales los hombres de Dragón se fueron a casa. Dragón y Águila se quedaron con nosotros bueno quizás deba decir con ella ya que Dragón no se despegaba de Bridgitte. Me daba un poco de seguridad que Dragón se quedara ya que no había señales de Ryder.

Ese día parecía ser un día más en este infierno llamado purgatorio. Jamás sospeche que en ese día conocería al rey de ese infierno. Jamás creí que ese día marcaría el resto de mi vida.

Un grito se escuchó en la entrada de aquel pueblo. El momento había llegado.

- ¡Iceberg, Red Soul! He venido por sus vidas.

Los ojos de Dragón perdieron su color. Su mano temblaba y sus dientes no dejaban de hacer ruido.

- Ryder no llego tenemos que irnos ya. - Dijo Dragón muy preocupado.

- ¿A dónde iremos Dragón? ¿A tu hogar para arriesgar las vidas de tu familia?

Pregunto Bridgitte con mucho coraje y camino hacia la puerta. Dragón la agarró del brazo.

- Bridgitte por favor no lo hagas, escapa conmigo te puedo proteger.

- ¡No puedes protegerme Dragón! ¡Esta no es tu pelea! Dr. Death solo quiere a Iceberg y a Red Soul. Cuando llegues a casa dile hola a todos de mi parte.

Bridgitte salió por la puerta y con ella nosotros. Iceberg nos seguía sin estar consciente del peligro.

Caminamos hacia los gritos hasta quedar cara a cara con Dr. Death y a su lado la chica peliverde Gravity.

- Hola chicos soy Dr. Death.

Dr. Death era endemoniadamente bello, Piel blanca, ojos azules, pelo negro algo largo y una sonrisa que mataría a cualquier chica de este planeta. Vestía un pantalón blanco con una camiseta de tirantes negra y una bata blanca.

Bridgitte no perdió el tiempo y ataco inmediatamente. Extendió su mano en dirección a Death.

- Jet Fire.

Una llamarada de fuego se dirigió hacia Death, pero el solo sonrió como si esto fuera algún juego.

- Gravity shield.

El fuego solo rodeo a Gravity y Death cuando el ataque de Bridgitte ceso el malvado doctor sonrió.

- ¡Turbo Mode!

Grito Death, su piel se enrojeció y todos sus músculos de exaltaron.

- Vamos a bailar renacuajos.

De un segundo a otro Death estaba frente a Bridgitte. Todo fue tan rápido quise ayudarle, pero fui muy lento. Death la golpeo en el estómago. El golpe fue tan destructivo que ella salió disparada después de recibirlo. Sorpresivamente Dragón la atrapo antes de que impactara con algo.