—¿por qué eres tan bonito?
el pelirubio dejó de mirar el cielo para clavar sus ojos en los del contrario—. tú eres bonito.
el castaño soltó una pequeña risita—. no es digno de compararse, ¿acaso nunca te viste al espejo, jiminnie? eres tan precioso.
una de las manos del menor se dirigió hacia el rostro contrario, e inmediatamente pudo notar como el rostro del pelirubio se tiñó de un suave carmín.
sus finos dedos se posaron en su barbilla, y jimin cerró los ojos al sentir la yema de los dedos del menor acariciar su rostro con pura delicadeza.
taehyung lamió sus labios en un rápido movimiento, mientras se acercaba cada vez más al rostro del contrario.
sus ojos examinaban las facciones de jimin con total atención, ¿cómo podía ser alguien tan perfecto?
los centímetros de distancia escasearon al momento en que ambos podían sentir la respiración del otro en su rostro.
jimin mantenía sus ojos cerrados, y sus manos se posaron en la espalda de taehyung delicadamente, mientras este aún mantenía la yema de sus dedos acariciándole el rostro.
el menor se acercó un poco más, para así poder eliminar todo ese espacio sobrante que les impedía poder tocarse.
los esponjosos labios de taehyung colisionaron con los de jimin, estos se sentían tan suaves y delicados.
el mayor separó un poco los labios, permitiendo ahora poder profundizar el beso un poco.
una de las manos de taehyung bajo hacia el cuello de jimin, aferrándose a él, mientras la otra estaba apoyada contra su pecho, a la vez que las manos de jimin se ceñían a la cintura del castaño.
el beso siguió siendo suave, mientras ambos chicos disfrutaban de la comodidad del lugar.
el sol se asomaría en algunos minutos, sin embargo las estrellas y la luna aún eran partícipes del oscuro cielo.
jimin se separó lentamente de los labios contrarios, para así poder mirar a taehyung—. tú eres una obra de arte, taehyungie. todo de ti lo es, me dejas fascinado.
ahora las mejillas del menor eran las que se teñían de un color rojizo, jimin sonrió y volvió a eliminar la distancia, implantándose contra los labios del contrario de manera una manera un poco más brusca, permitiendo que taehyung se sobrestalte un poco.
una de las manos de jimin fue hacia la rodilla de taehyung para comenzar a acariciarla suavemente, a la vez que sus dientes jugaban con querer capturar uno de los labios del menor entre sus dientes.
el menor soltó una risita cuando sintió la respiración de jimin tan cerca de su oído, el mayor rió también.
la situación era ya algo de todos los días, sin embargo siempre sería como una nueva experiencia.
siempre en aquél lugar donde la naturaleza abundaba y se podría apreciar con gracia los amaneceres y atardeceres. era perfecto para un par de jóvenes que buscaban alejarse completamente de la sociedad y sus prejuicios, de esta y sus tóxicas acusaciones.
ya sea porque para la sociedad su relación estaba mal vista, o porque los padres de jimin y taehyung tenían actutides homófobas hacia sus hijos.
—te quiero, jiminnie —tae susurró en un momento, haciendo que las risas cesaran y ambos chicos establezcan contacto visual—. en serio te quiero.
jimin se limitó a sonreí, mientras se acercaba al castaño nuevamente para dejar un casto beso en sus labios—. eres tan tierno.
ambos se acomodaron más sobre el césped, y la cintura de jimin fue rodeada por los brazos de taehyung, a la vez que recostaba su cara en el cuello contrario—. tú lo eres, hyung.
la mano de jimin fue hacia el cabello de taehyung, para desacomodarlo un poco, haciendo que el menor ría, aunque luego se separó unos instantes con el ceño fruncido, fingiendo enojo mientras acomodaba su cabello con sus finos dedos. a taehyung no le agradaba que en algunas ocasiones le toquen mucho el cabello.
—no te enojes —dijo el mayor mientras hacía un mohín con sus labios, haciendo que taehyung muerda su labio levemente y sonría.
—no me enojaré, ¿quieres sabes por qué? —inquirió. jimin asintió con la cabeza, aún con un mohín en sus labios—. porque te quiero mucho.
una de las manos de jimin acarició el pómulo del menor, a la vez que admiraba su rostro—. gracias.
