Dos jóvenes de 17-18 años, son mejores amigos, llevan una buena vida, se concen desde que tenían 5 años y ambos en su último año escolar han desarrollado ese típico enamoramiento pero como siempre ocurre "no diré nada para no arruinar la amistad".
Q...
Iba caminado por los pasillos del instituto, ver a Thomas me arruinó el día, bastante ya tenia con aguantarmelo en los entrenamientos y en los juegos.
Llegue a mi casillero y deje los libros de las primeras clases y saque el de ciencias biológicas que era mi siguiente clase y luego el de geografía, que seria a la última.
-Hola Austin -escuche que me hablaba Harper, la co-capitana de las porristas-
-Ahm Hola -conteste lo menos animado posible-
-¿Que tal estas? ¿ya sabes a quien llevaras para el baile de otoño? -me miró con una sonrisa pícara-
-Aun falta un mes para eso Harper, y si, ya tengo pensado con quien tal vez ir -dije cerrando la puerta de mi casillero-
-Pues debes ir buscando cita, porque ya sabes; ehm las chicas no son pacientes- yo solo asenti-
-Gracias por el dato, adiós -me fui dejándola con las palabras en la boca y saque el teléfono para revisar la llamada que había recibido antes de llegar al instituto, otro numero desconocido y sucedió lo mismo que con el anterior, sin conexión ¡GENIAL!.
Minutos después llegue al salón y me ubique en los últimos puestos. Detestaba no tener las mismas clases de Alice, después hablaría con ella seriamente sobre aquella fiesta y cuando regresara a casa acabar con el misterio de aquella carta.
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Y así es como se usa un mapa,brújula...- y como si el cielo hubiera escuchado mis súplicas, ¡POR FIN LA CAMPANA HABÍA SONADO Y YA SE HABÍAN TERMINADO POR HOY LAS CLASES!-
Salí disparado del salón en busca de Alice, sabía que estaba en economía política, se encontraba casi hasta el otro lado del instituto pero no importaba, iba a todo lo que mis piernas me daban, aun no salían así que la espere paciente afuera y justamente Thomas igual estaba esperando ahí, habían dos posibilidades: una - esperaba también a Alice, dos- algún chico del equipo igual estaba en esta clase y al parecer no se daba cuenta de mi presencia, ya me estaba hartando, por lo visto el maestro Higgins se estaba tardando.
Pero luego de casi una eternidad se abrió la puerta y salían los estudiantes pero aun no salía Alice y Thomas seguía aún ahí, cuando ya se me acababan las esperanzas vi una hermosa cabellera rubia caminando a mi dirección pero no parecía de estar feliz.
-Austin -saludo entre dientes-
-Hola hermosa -salude a Alice la cual rodo los ojos molesta- lo siento -susurre-
-¡No Austin! Todo el día has estado como si yo hubiera hecho algo, pero me he matado pensando y ¡aun no formó idea de que yo tenga algo que ver! -me dijo furiosa y yo solo agaché la cabeza, hice el intento de tomar su bolso y llevarlo pero solo se fue un poco más adelante que yo simplemente me límite a caminar atrás de ella cabizbajo-
Al llegar al auto me di cuenta que ella no hizo lo que siempre hace; correr y hacerse en la puerta del piloto intentando que la deje conducir, solo se quedo estática y yo la mire extrañado, era mi culpa.
