Quien se enamore pierde (Gemeliers)

capitulo 31

Chicas, necesito actualizar más rápido, lo sé, pero también me ayudaría que de las más de 60 personas que han leído el último capítulo votarais y comentaseis porque es como si no leyera nadie...

*Narra María*

Salí de casa a las 16:25 ya que había quedado con Inma a y media en su casa para ir a comprar. Llegué y llamé. Me abrió una Inma muy feliz y decidí no preguntarla hasta más adelante que estuviéramos en el centro comercial. Nos saludamos con un abrazo y pusimos rumbo a ese gran centro comercial. Hubo un rato que nos tocó correr porque perdíamos el bus, ya que teníamos que ir a Sevilla, pero sin duda la mejor parte fue cuando tras 5 minutos corriendo a más no poder vimos al tren salir de la estación por lo que tuvimos que esperar otra media hora. Si, nos podéis pegar.

-Inma, ¿Cómo es que estabas tan feliz antes cuando he ido a buscarte? -pregunté curiosa.

-¿Si?¿Tan contenta estaba?

-Si -reí- ¿Tú no habías quedado con Dani?

Ella simplemente se rascó la nuca nerviosa, me dio una respuesta clarísima, aunque ya la sabía, le gustaba Dani.

Al fin llegamos al centro comercial y empezamos a desordenar tienda por tienda. Estuvimos 3 horas dando vueltas para al final compararnos unos pantalones y un par de camisetas. Hablábamos de diferentes temas sin parar de reírnos o cotillear sobre gente que nos encontrábamos por El Centro comercial. Ya agotadas decidimos sentarnos en una heladería que tenía muy buena fama y no era nada cara. Inma se pidió un helado de dos bolas de vainilla mientras yo me pedí un cucurucho de chocolate. Al coger el móvil me llegó un mensaje a un grupo muy llamativo.

"Hola holaaa. Si os llega este mensaje es que estáis todos invitados a la mejor fiesta que se va a celebrar este año, si no os llega... os jodéis y bailáis. No hay una manera concreta de vestir, simplemente casual. No hace falta que llevéis nada chavales, invito yo. Será mañana a las 21:30 en mi casa (si no sabéis dónde es preguntad, que difícil no es). Allí os quiero ver a todoooooos"

Es mensaje lo había mandado uno de los chicos más populares de todo el instituto al grupo de clase. Miré a Inma que no había sacado ni el móvil con lo que caí en la cuenta de que a ella ese mensaje no le llegaría, pero me da igual, es la medió novia de Dani y una buena aspirante a mi futura segunda mejor amiga por lo que irá si o si.

La informé del mensaje y, aunque al principio dudó un poco ya que ella no estaba invitada como tal, terminó aceptando tras decirla que por una persona más no se iba a notar, que habría alcohol y mi infalible cara de cachorrito abandonado.

Nos sirvieron los helados y nos los tomamos sin prisa alguna. Era verano por lo que al día siguiente no había que madrugar ni cosas que hacer, excepto la fiesta. Cuando nos los tomamos entendimos el por qué de la buena fama de este local, en serio, deberíais venir. Nos levantamos y pusimos rumbo a casa, al igual que cuando dábamos vueltas por El Centro comercial, hablando de cualquier tema sin sentido y riendo. Fuimos a mi casa ya que habíamos decidido que hoy se quedaría y decidimos invitar a los chicos también.

Fui a mi habitación a ponerme el pijama y aproveché para llamar a Jesús e invitarles a venir. Un tono, dos, tres...

-¿Si? - notó una adormilada voz al otro lado del teléfono.

-¿Te he despertado? -esa pregunta salió inconscientemente de mi boca ya que el sentimiento de culpabilidad por haberlo despertado era bastante grande.

-Si, pero ojalá me despertaras tú todos los días aunque fuera por teléfono -awwww.

-¿Te ha llegado el mensaje de la fiesta?

-Pues, me acabo de levantar y lo primero que he hecho ha sido descolgar el teléfono porque mi preciosa novia me llamaba.

-Bueno ahora lo lees, era para informarte que tenemos planes para mañana por la noche ya. ¡Ah! Y que vengáis a mi casa Dani y tú que Inma se queda a dormir y vosotros también -río.

-¿Está Inma? Entonces mi hermano va de cabeza -oigo una pequeña carcajada al otro lado del teléfono lo que inconscientemente me hace sonreír a mi- en un par de minutos estamos ahí.

-Vale, te quiero -y colgué sin darle tiempo ni a despedirse. Le quiero, pero sé que si no le cuelgo el par de minutos se convertirán en un par de horas.

Tras cortar la llamada me decidí a ponerme el pijama y bajar porque Inma querrá subir a dejar las cosas y cambiarse también, supongo.