La Salvacion De Iori Yagami

algo anormal

Narra Iori

No sabía que había sucedido, miraba todo blanco...

Estaba muy confundido, no había nada a mi alrededor y estaba comenzando a irritarme.

Me levanté de donde estaba acostado, para buscar a Yumie.

Pero no había nada, era completamente la nada.

Caminé un poco, bastante desorientado.

Grite el nombre de Yumie pero no se escuchaba mi voz.

Seguí caminando por que ví algo a lo lejos.

Corrí hasta ahí y pude divisar...

Era mi casa... Parecía un funeral...

¿Pero de quién?

Me acerque con algo de miedo y confundido, ahí pude ver a Yumie llorando en el ataúd que había ahi.

Cuando me coloque a su lado me asombre de verme a mi mismo en el ataúd.

¿Estaba muerto?

Quería correr, tenía miedo de nuevo.

¿Que sería de Yumie?

No... Esto no podía terminar así... Tenía mucho que hacer aún al lado de Yumie... No podía morir ahora que por fin era feliz... No podía morir.

Sin pensarlo comencé a entrar a pánico, cosa que no era común en mi.

Comencé a correr alejándome de ahí.

Y mientras corría podía ver millones de recuerdos de toda mi vida, algunas cosas sin importancia... Pero otras habían marcado mi vida.

Sin importarme eso corrí y corrí, hasta que no pude más y cai rendido sobre mis rodillas.

Mire hacia el frente y mire a Orochi ahí parado frente a mi.

-¿¡Que es lo que quieres!?-

Dije bastante molesto

-vamos Iori... Tú lo sabes perfectamente... Por mi culpa mi hija no ha podido ser feliz, creo que es hora de recompensarla-

-¡Maldito! ¡Déjala en paz ya!-

Orochi comenzó a caminar a mi alrededor.

-creo que no lo has entendido... Estás muerto... Y Yumie está sufriendo por eso...-

Así que era verdad... Estaba muerto.

- ¿y eso que? Yo ya no puedo hacer nada, creo que lo sabes por lógica. Estoy muerto-

El sonrió

-ese es el punto... Estás muerto... Y así no me sirves de nada...-

Se detuvo frente a mi... Creo que ya se a dónde iba.

-quiero que vuelvas con Yumie... Hazla feliz... Sino yo me encargaré de hacer tu vida miserable Iori yagami-

Le sonreí

-¿Más?-

Pregunte burlón

-Silencio-

Dijo algo molesto.

-esto es lo que haré, te devolveré a la vida. Hoy la maldición de los yagami se acaba, podrás vivir en paz, formar una familia como deseabas, a fin de cuentas me has demostrado que puedes amar, así que quizá nos veamos en algún futuro Yagami, hasta luego-

Dijo para desaparecer.

Mire a todos lados confundido por lo que acaba de pasar.

Y de pronto sentí como algo subía por mi garganta, así que vomité.

Todo el suelo se volvió rojo por mi sangre y no pare, seguí vomitando hasta que me desmaye y cai al suelo inconsciente.

Narra Yumie

No podía soportarlo... Era mucho el dolor... Mi amado Iori... Todos sufriamos por el. Castiel lloraba en silencio. Jenny no se diga, ella lo había criado...

Mire a través del cristal el cuerpo de Iori... Se miraba tranquilo... Como tantas veces lo había visto dormido a mi lado.

Seguí llorando y acaricie el cristal suavemente.

Pero de pronto sentí como la caja se movía levemente, pensé que era un temblor así que abrí los ojos y de la nada Iori abrió los ojos y piso su mano sobre la mia, todo muy rápido.

Parecía algo desesperado y agitado así que sin pensarlo dos veces, rompí el cristal con un golpe proviniente de mi codo que enseguida trono el cristal

Iori se sentó en ataúd y comenzó a respirar muy agitadamente, parecía algo asustado así que yo me lanze a abrazarlo sin pensarlo, haciendo que la caja cayera contra el suelo

-¡Iori!-

Reí sin pensarlo mientras lloraba de alegría

-dios... ¡Gracias!-

Dije mientras comencé a dar repetidos besos en el rostro de Iori a lo que él sonrió y me aparto un poco para poder levantarse, aunque segundos después me lance otra vez a besarlo.

-yumie... Calmate-

Me dijo Iori al oído y pude sentir un claro cosquilleo en mi estómago.

-pense que no te volvería a ver-

Dije sollozando mientras lo abrazaba con mucha más fuerza, el también me abrazó con fuerza.

-yumie... Yo también pensé lo mismo, te juro que estoy muy feliz de verte de nuevo-

Le sonreí feliz, el tomo mi mejilla y lentamente me acerco a su rostro, sabía lo que pretendía.

Así que cerré los ojos y espere el contacto de sus labios con los míos, podía sentir su aliento en mi cara hasta que, sus labios lentamente chocaron con los míos, el me beso suavemente y después lamió mi labio superior dando a entender que quería subir el beso de nivel

Así que se lo permiti abriendo un poco la boca, sentí como su legua entraba en mi boca buscando la mía, la cual rápido se mezcló con la de el, danzando suavemente.

Segundos después nos separamos y lo mire a los ojos, después oi como alguien tosia.

Así que voltee a buscar de donde provenía el sonido pero no pude hacer más que sonrojarme, al ver que todas las personas que habían asistido al funeral nos miraban atentamente.

Yo reí nerviosa por lo que Iori me abrazó por la cintura acercándome a el.

-hoy... Me complace decir... Que he cambiado, gracias a una maravillosa mujer. La cual... Amo con todas mis fuerzas, ella es mi pasado, presente y futuro. Así que... Yumie... ¿Me harías el honor... De casarte conmigo?-