Todo comenzo tan extraño pero excitante...
Solía verlo como un agradable amigo con quien podías pasar un buen rato, para ser honesta ni siquiera era "mi tipo" pero con su trato y conforme nos conocíamos más termino llegando a mi, rompiendo esquemas, sin pensar en las consecuencias ocasionando que terminara completamente cautivada por su persona, haciéndome desear estar solamente con él, queriendolo, admirandolo, gozandolo y aunque estaba llena de dudas todavía me arriesgue, nos arriesgamos juntos a entregarnos sin más dando rienda suelta a tal pasión que parecíamos haber estado resistiendo por mucho tiempo.
Aún recuerdo claramente el como se sentía estar junto a él por fin sin tener que pretender que no moría por besarle, recuerdo la sensación tan placentera que me producia al tacto de sus manos sobre mi piel mandando millones de descargas de felicidad por todo mi cuerpo hasta hacerme sentir en el mismo paraíso, sus besos, su manera de reaccionar ante la situación, hasta las palabras que salían de su boca sin previo aviso, todo, parecia tenerlo bajarlo control mientras yo me encontraba ya totalmente rendida ante su encanto.