Danzan mis labios al sur de tu cuello
saciando su sed de piel desnuda;
el grito sordo de dulce locura
el grito sordo de placer sincero.
Dedos en sedición que se postulan
cual héroes entre lluvia de gemidos
escudriñan rincones escondidos
y a su paso no hay tregua ni cordura...
Hemorragia de besos encendidos,
!Danzan mis labios al sur de tu ombligo!