Después de lo que había sucedido con Yuta estaba al pendiente de él, aunque le daba su espacio para que no sintiera que quería aprovechar la situación. Me volví más cercano a Takanori ya que entre él y yo lo cuidábamos, y vigilábamos que Takamasa no se volviera a acercar a él.
Takanori me había contado algunas de las peleas que Yuta había tenido con Takamasa, casi siempre por celos hacía mí, eso dejaba totalmente desarmado al baterista ya que sabía que en parte tenía razón por sentirse celoso, aunque cuando empezaron su relación había sido claro con él al decirle que me amaba, y él así lo había aceptado, pero después, el solo verlo compartiendo algún espacio conmigo lo molestaba y buscaba cualquier excusa para pelear, si bien las primeras veces Yuta se había defendido de sus ataques, con el tiempo el guitarrista le demostró que podía superarlo físicamente y manipular su mente hasta conseguir lo que él quería una y otra vez, la manipulación que ejercía logró ir reduciendo al baterista hasta el punto en que terminaba por aceptar las demandas de Takamasa.
Shima había resentido la situación, y cambio bastante conmigo después de eso, me imagino que tenía la sospecha de que estoy enamorado del baterista ya que prácticamente se lo había gritado a Takamasa al pelear con él, sin embargo no me importaba.
Ya había pasado un mes y Shima no se había dignado a aceptar una invitación para salir a beber y aprovechar para hablar con él, de hecho se limitaba a hablarme lo menos que podía.
Esa noche tuvimos un concierto en el que me ignoro completamente, al acercarme a él para hacer el tan esperado fan service para nuestras fans se cambió de lugar y se dirigió a donde estaba Akira para insinuársele con movimientos muy provocadores, yo toque un rato más en su lugar y me acerque a Yuta para hacerlo sonreír con alguna bobería, al ver su sonrisa fue inevitable acordarme del momento en el que me dirigí a su batería y nuestros ojos se cruzaron por primera vez, para mi fue el momento en el que todo inicio. Nuestras vidas cambiaron infinitamente desde aquel instante en el que el salió a tocar como un miembro más de nuestra banda.
—Sé que no quieres verme pero tenemos que hablar— dije, abriendo la puerta del departamento de Shima con la llave que me había dado meses atrás.
Entre a la casa un tanto nervioso por los posibles reproches que iba a recibir de su parte, lo busque por cada rincón de ésta, más no lo encontré, así que me dirigí a uno de los bares que frecuentaba con él, con la esperanza de verlo, estaba decidido a no dejar pasar más tiempo, no quería que terminara odiándome ni perder su amistad.
Entre al bar y efectivamente ahí estaba sentado más no estaba solo, alguien estaba con él y por lo que me dejaban ver lo tenue de las luces, aquella figura masculina que me daba la espalda estaba tocándolo con mucha familiaridad, acariciaba sus piernas a lo que Shima respondía con una sonrisa seductora.
Me alegro haberlo encontrado y saber que su corazón no había sido lastimado por mí ya que al verlo coqueteando con alguien más sólo reafirmaba en mí el hecho de que yo tampoco lo amaba, sólo era un gran cariño el que sentía por él pues era mi compañero de banda, mi amigo, el que me había ayudado a no sentirme sólo un tiempo pero nada más.
Seguí acercándome a él, necesitaba recuperar su amistad, era lo único que quería.
Aquella figura masculina comenzó a tener forma al aproximarme, era Akira... Seguían tan envueltos en su juego de seducción que nunca se dieron cuenta de que me dirigía a ellos, sino hasta que les hable.
—Hola chicos, que bueno que los encuentro —les dije.
Shima me observó con ojos de susto por un momento, no se esperaba encontrarme ahí, ni sabía lo que sería capaz de hacer después de la escena que había presenciado en casa de Yuta.
— ¿Puedo hablar contigo un momento Shima?
—Claro, vayamos a otra mesa— me dijo, volteando a ver al bajista agregando un no tardo.
—Dime Yuu, ¿para que querías hablar conmigo?
—Sólo quería aclarar las cosas contigo, los dos sabemos muy bien el porque te alejaste de mí en estos días, a mi defensa debo decir que no te mentí y lo sabes, te dije que estaba enamorado de alguien más...
—Si pero yo nunca me espere que fuera de Yutaka
—Sea como sea, las cosas son así, yo tampoco me imagine que hubiera algo entre tú y Akira y aquí me tienes asimilándolo y deseándote suerte si decides comenzar una relación con él. Lo que venía a decirte es que no quiero perder tu amistad, que valoro el tiempo que me regalaste y que puedes contar conmigo como siempre lo has hecho...
—Te lo agradezco Yuu. Sinceramente hubiera querido que lo nuestro funcionara, pero sé que la sombra de Yuta es muy grande como para fingir que no vives en ella esperando una oportunidad, en los tres meses que estuvimos juntos te vi sumergido en ella aunque no lo entendía por completo, ahora sé que contra eso no puedo luchar... También deseo lo mejor para ti Yuu...
Meses han pasado desde que se fue Takamasa y sé que algunas veces ha regresado a pedirte otra oportunidad, también sé que has sido firme, Taka me ha dicho que cuando te libré de Takamasa, se cayó para siempre el pesado grillete que te tenía cautivo y petrificado.
Por mi parte, te he dado el espacio que necesitas para sanar tus heridas y me he mantenido a distancia observándote y deleitándome con tus renovadas ganas de vivir, con esa bella sonrisa que tanto extrañaba, que tanta falta me hacía.
Te vi hace tiempo buscando en mis ojos y los de Shima un indicio de nuestra relación, pero no vas a encontrar nada ya que el dueño de sus ojos es ahora Akira, y el mío siempre has sido tú... me alegro por ellos dos en realidad hacen una bonita pareja, nadie sospecha nada sobre todo tú, que sigues preguntándote por mi relación inexistente con Shima.
Ahora a dos años de distancia no tengo nada más que recordar, aún cuando los dos nos encontramos disponibles ya no te has acercado a mi como una vez lo hiciste, me tratas con cariño fraterno justo como estaba nuestra relación antes de que el mundo conspirara contra nosotros, antes de que Tsuki apareciera en mi vida, me pregunto qué hubiera pasado de no entrar ella en la ecuación, ¿me habrías declarado tus sentimientos? Sé que te sentiste celoso de ella y eso te obligo a actuar ¿Habría podido descubrir mi amor hacia ti? ¿Habríamos podido estar juntos? Y de ser así ¿Cuánto hubiera durado nuestra vida juntos? Creo que eso ya nunca lo sabré.
Pero la duda que me asalta una y otra vez manteniendo vivo mi insomnio es la búsqueda de la respuesta acerca de si todavía me amas... si alguna vez podremos dejar el pasado atrás, y continuar donde una vez puse pausa a mi corazón, donde se resignó a vivir sin ti, ese fatídico día que levante mi cuerpo de tu cama para contestarle a Tsuki, y donde los problemas comenzaron.
Si tan sólo hubiera hecho las cosas diferente, si nunca me hubiera apartado de ti sin importar lo que viniera, después de remembrar el pasado pude darme cuenta de que me rendí muy rápido, caí estúpidamente en la trampa de Tsuki, debí decirle que no la amaba, que te amaba a tí y que iba a quedarme a tu lado, pero que iba a tratar de ser el mejor papá del mundo aunque no estuviera a su lado, la mentira tarde o temprano se iba a saber pero de esa forma hubiera causado menos dolor.
Por siempre me reprochare eso y como deje que Takamasa te envolviera en su manipulación, todos vimos su juego desde el principio menos tú, a ti te absorbía la culpa por lo que desde el comienzo dejaste de ver las cosas con claridad. Debí apartarte de él, no debí darme por vencido ni dejarle el camino fácil. El día que me confesaste que me amabas a pesar de estar con él debí aferrarme a ti y no dejarme engañar por tu negativa.
Pero el hubiera no existe, todo eso pasó para mi pesar... por más que me torture trayendo el pasado a mi vida, no puedo cambiarlo.
Ya has tenido meses de sobra para pensar en todo lo que pasó al igual que yo, creo que es tiempo de dejar de vivir en el pasado, si ya no me quieres, lo tengo que saber y avanzar en consecuencia.
Yo te sigo amando como el primer día que lo descubrí o quizá más, me preguntó ¿que sientes tú por mí?...
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Cuando las heridas sanen.
Fanfiction"....Yutaka estos últimos dos años sin ti han sido una tortura, y aquí me tienes otra vez con mi insomnio característico que se ha agravado más ahora que no estas junto a mí, se me ha vuelto una costumbre pensar en ti y remembrar todo lo que ha pasa...