Hipnotizado ✄ Yoonmin

[19]

Precisamente, lo que obligó a HoSeok para regresar a la clínica del Dr. Kim NamJoon había ocurrido no más de 48 horas antes, cuando un YoonGi borracho se dirigió a su apartamento a las dos de la mañana.

"HoSeok" YoonGi jadeó cuando la puerta se abrió ante él, sosteniendo sus rodillas para estabilizarse. "JiMin sigue vivo."

HoSeok parpadeó ante el hombre que estaba en el marco de su puerta. Eran las dos de la mañana y YoonGi estaba de pie frente a la puerta HoSeok. Él que había estado tratando de quedarse en su propia casa más a menudo. Era el momento de dejar que YoonGi resolviera las cosas por su cuenta.

Para decir lo menos, YoonGi era un desastre, más que de costumbre. Sus cabellos se erguían en lugares aleatorios, con los párpados ojerosos en la mayoría de los ojos, la ropa arrojada con pereza. El olor a alcohol que salía de los labios de YoonGi era como una bala bajo el agua, lento y podría ser suficiente para matarlo.

"Estás borracho", dijo HoSeok. Estaba desequilibrado por beber hasta ese punto, enseñándose a sí mismo sin fijarse en ese tema. JiMin no quería que estuviera triste cada vez que lo recordaran. No quería que el recuerdo de JiMin fuera empañado por algún incidente de un borracho. No quería asociar un concepto tan enfermizo con el esplendor que era Park JiMin.

"Amigo, ¿has oído lo que dije?" YoonGi se arrastró. "JiMin sigue vivo."

HoSeok suspiró. "No lo está"

YoonGi insistió: "Lo está, lo vi".

HoSeok puso sus manos sobre los ojos. "No quiero hacer esto ahora, es la mitad de la noche, quiero dormir.""

YoonGi trató de agarrar el brazo de HoSeok, pero falló. "Estaba en mi baño."

HoSeok arrugó la nariz, en broma, "No necesito saber lo que te haces en el baño, especialmente si tiene que ver con JiMin".

YoonGi dio una risa extraña, que no sonaba como la suya. "No, ni siquiera lo imaginé, lo vi y luego me desperté y luego bebí mucho y ahora estoy aquí".

"¿Entonces estabas soñando?"

"¡Yo lo vi!"

"Eso fue un sueño, YoonGi."

"¡Yo lo vi!"

HoSeok suspiró de nuevo y empujó al idiota de su mejor amigo dentro de su apartamento. YoonGi tropezó un poco en el camino, pero insistió en el tema de que JiMin seguía vivo.

Lo repitió de nuevo: "Todavía está vivo, lo juro."

"Eres tan estúpido," HoSeok negó con la cabeza. Alzando a YoonGi por el brazo, los dos se sentaron en el sofá de HoSeok, uno al lado del otro.

YoonGi se hundió en los cojines debajo de él y soltó un largo bostezo. Tan somnoliento... Dios, ¿qué hora era... eran las dos de la mañana? Olvidando dónde estaba y con quién estaba, YoonGi echó la cabeza hacia atrás, descansando en el sofá, dejándose caer en el sueño. HoSeok ahogó algo que parecía una risita al ver a YoonGi dormirse instantáneamente.

Fue solo una hora más tarde cuando YoonGi repentinamente se despierto de golpe. HoSeok ya se había ido a su cama, dejando a YoonGi solo en el sofá. Había olvidado dónde estaba, cómo llegó allí. La falta de familiaridad en la habitación que le rodeaba era repentina y abrumadora, y el golpeteo en su cráneo no le ayudaba. Sintió que la bilis le subía por la garganta, pero estaba demasiado entumecido para reaccionar.

Y ese entumecimiento envió pánico. Encontró su corazón acelerado, su mente deambulaba. Incluso en el cuarto oscuro había demasiados colores para él, las miserables gotas de luz de las ventanas eran demasiado, demasiado.