"Infortunio"
Parte I.
Dando uno que otro brinco, el niño avanzaba emocionado por el camino compuesto por piedras color gis incrustadas unas con otras en perfecta sincronía, las voces de los vendedores y de los compradores se mezclaban con el descenso del rio, de tal modo, que era difícil diferenciar uno de otro.
-Sasuke. -Llamo el general, frenando al muchachito y haciéndole virar. - ¿quieres un helado?
El agradable hombre cano entonces señala a un pequeño puesto de entre muchos que Sasuke no había visto debido al wagasa rojo que le cubría casi por completo; al acercarse un imponente tarro rechoncho que en Inglaterra, pensó Sasuke, se usaba para guardar mantecas y especies y que ahí rebosaba lleno de hielo picado. -Escoge el que quieras muchacho. Invito, haciendo una leve reverencia ante la mujer oriental que servía el postre, quien, de manera amable le mostró ocho jarros trasparentes que descansaban en una pequeña mesa, su contenido, una especie de jarabes de colores brillantes: azul, rojo, morado, mamey y diversas variedades de verde.
-Oh por dios, general, ¿ese es su nieto?- pregunto curiosa la mujer, mientras vertía el líquido rojo que había señalado Sasuke con el dedo de forma dudosa.
-No, no,- sonríe el viejo. -él pequeño es Sasuke, es hijo de un gran amigo mío.
-Pero si tienes un nombre Japonés. -Le dijo complacida, extendiéndole el vasito con lo que ahora era hielo color sangre, él asintió cortes, justo como le había enseñado el teniente.
-Su madre es japonesa, su padre es el teniente coronel de la gran brigada imperial Inglesa, en la que ambos fuimos soldados.
-Ya veo, espero que el Kakigori le resulte agradable, Sasuke-San. -se despidió, dándole unas palmadas en la cabeza, vio al general darle unas monedas y luego, este le llamo para que continuasen el recorrido. Se detuvieron por segunda vez en una pequeña tienda de antigüedades que figuraba una relojería muy parecida a los millones de establecimientos en las calles inglesas por las que solía pasear con su hermano, el general le indico que le esperase afuera, que no tardaría más de dos minutos, el niño asintió recargándose en uno de los pilares de la tienda y aguardo; él sabía bien porque el general no lo había hecho pasar y era por la misma razón por la que usualmente meritaba regaños de su padre, "los niños son bastante torpes".
Y, como si le diera la razón a su padre, un sonido, como de un tambor seguido por lo que parecía un afinar de violín pero continúo seguido de una voz bastante extraña cantando, le hicieron respingar y tirar su helado al suelo, levanto la vista en su ferviente búsqueda del culpable de tan atroz crimen y no pudo hacer otra cosa que quedar atónito y olvidar el tonto helado por completo. De entre la mujer que tocaba lo que a Sasuke le figuro una guitarra pero con menos cuerdas y un mástil mucho más largo y delgado, y el hombre con un tambor pequeñito y con cuerpo de reloj de arena, vio a la pequeña hada de la casa del general; vestía de color lila y movía los pies de una manera bastante particular, como si bailara.
¿Acaso la música la había atraído? Pero... eso no había funcionado para él, porque, había tocado el piano hasta que los dedos le escocieron ayer, y nada. Como poseído, se acercó de a poco, la gente que pasaba había comenzado a detenerse a acompañar con sus palmas, y Sasuke no podía entender que era lo especial en esa música tan rara, porque, lo único que llamaba su atención era esa jovencita.
Iba a entrar entre la multitud cuando un grito le paro en seco "Cuidado", pero cuando retrocedió en sus pasos ya era tarde, le dolió bastante, pero solo fue por un segundo, al siguiente recuerda haber visto una luz que le segó, por el rabillo del ojo un líquido vino escurriendo, recordó su helado, demonios, debió haberse quedado donde le dijo el general para empezar.
-.-.-.-.-.-.-
Okay, ya se lo que dirán y e lo merezco pero una buena noticia es que aun no he muerto no? como les caería un maratón por navidad y año nuevo? Hablando de ello, ¡Felices fiestas! a todos mis fieles y nuevos lectores, les diré, son todos unos masoquistas, aunque los atormento con mis historias tristes y mis tardanzas aun me siguen leyendo, los y las amo demasiado.
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EFECTO ELIPSIS ||SasuSaku||
Fanfic❝La vida-Dijo.- Es como una elipsis; se estira, se deforma, te subleva pero al final regresas a donde empezaste... ❞ Esta es una obra original de @MarianaGill. Esta estrictamente prohibida su adaptación, copia o traducción. FANFICION. Universo Alte...