El Guardián "La Llegada De Légine" (EN REVISIÓN)

Capítulo 6

-¿A qué  te refieres?

-¿Qué es lo que sientes cuando estas conmigo?, fuiste el único que se digno a hablarme en el instituto, y aun estas conmigo, quiero saber qué es lo sientes.

-Pues... - Digo pensando en lo próximo que saldrá de mi boca - Aunque te parezca extraño, siento una conexión contigo, tienes algo que hace que todo el ambiente se tranquilice, haces que se valla toda sensación de tristeza o ira, se que no es lógico, ya que te conozco muy poco... - Digo.

Dinora se queda en silencio, solo me mira, sin decir alguna palabra o sin hacer expresión alguna, un sentimiento de preocupación comienza a formarse en mí.

-¿Qué piensas? - Digo para romper el silencio.

-Pienso en lo que acabas de decir, es extraño, pero de alguna manera, también siento lo mismo - Dice seriamente.

El comentario de Dinora hizo que me emocionara, pero el tono con que lo dijo, me quito esa emoción, siento que su alegría desaparece, y, por lo tanto, la mía.

-Miguel - Dice mirándome fijamente.

-Dime Dinora.

-¿Mañana podrías acompañarme a visitar a mi familia?

La invitación que acaba de hacerme, me impactó, "¿Por qué me invita a algún lugar, después de lo que acabamos de hablar?, ¿Por qué reacciona de una manera tan seria con respecto a esta situación?", pienso mientras trato disimular mis expreciones.

-Claro, me encantaría.

-Perfecto, mañana te pasare buscando por tu casa para irnos en el tren.

-¿El tren?, dijiste que irías con tus padres.

-No, dije que mis padres me obligaban a ir, pero nunca dije que ellos iban conmigo.

-Oh, esta bien - Digo mientras observó a través del cristal de la cafetería, para darme cuenta de que ya no está lloviendo - Fantastico, ha dejado de llover.

La lluvia se detuvo en el momento perfecto, ya que hemos acabado con el capuchino y también con el trozo de pastel, aunque no logre disfrutar el pastel debido a aquella platica.

Salimos de la cafetería y nos dirigimos a la calle de nuestros hogares, acompaño a Dinora hasta la puerta de su casa, ella voltea y me mira durante un tiempo.

-Adiós Miguel, fue un placer hablar contigo hoy.

-Adiós Dinora, nos vemos mañana - Digo sin dejar de pensar en nuestra conversación anterior - Dinora... Respecto a lo que te dije...

-Miguel - Dice silenciandome  con el dedo - No quiero hablar de eso ahora, tengo mucho que pensar, hablaremos mañana, tranquilo - Dice dulcemente.

-Esta bien, buenas noches, que descanses.

-Adiós Miguel - Dice cerrando la puerta de su casa.

Mientras camino a mi casa, no puedo dejar de pensar en la "conversación" con Dinora, me siento estúpido por haberle dicho todo eso, "¿Qué pasa la asuste?, ¿Ella sentirá lo mismo por mi?, ¿Por qué se quedo en silencio tanto tiempo?", pienso, mi corazón se acelera.

Entro a casa, saludo a mis padres y a mi perro, tomo una ducha y me encierro en mi habitación, abro la ventana y miro el cielo nocturno, que está iluminado con las estrellas, ¿Por qué este mundo esta lleno de tristeza?, ¿Acaso las personas disfrutan lastimando a los demas?, no lo se, considero que en algún lugar, hay alguien que vigila nuestro mundo, que siente lo que nosotros sentimos, pero, que de igual manera no hace nada para evitar nuestro dolor", pienso al estar en mi habitación.