20 cosas que hacer antes de graduarte

Capitulo 3

Al día siguiente abrí los ojos,no antes que el despertador de la banda sonora de la guerra de las galaxias sonara por octava o novena vez.Me incorpore dejando colgar mis pies de la cama y me estiré hasta que la punta de mis dedos y mi cabeza encontraran la mayor elasticidad posible y después de dar un gran bostezo reflexione acerca de lo que había leído en la carta de mi hermano la tarde anterior.Era mi primer día de clase y en una semana tendría que haber cumplido mi objetivo; conseguir una pandilla de amigos.Si excedía de tiempo tal vez no podría cumplir con todos, así que me centre en hacer al menos un amigo.No me daba miedo pero tenía malas experiencias respecto a ese tema.O yo no encajaba o tenia que fingir que lo hacía,de una manera u otra siempre me sentía incomodo.

Me levante perezosamente y ya podía oír los gritos de mi madre retumbando en las grandes paredes de la casa.

-¡Alex,es tu primer día de clase tienes que estar impecable!¡Ponte la camiseta de cuadros que te regale las navidades pasadas!.-Me perseguía mientras bajaba las escaleras.

-¿Estas de coña? Solo conseguiría quedar en ridículo.Ademas ya no tengo cinco años,se vestirme solo.-Me adentre en la cocina y cogí con la mano la tostada que había sobre un plato de la mesa.Le di un gran bocado mientras intentaba ignorar todo lo que pudiera salir por la boca de mi madre a esas horas de la mañana.Mi padre bajo uniformado,con corbata y un café de la mano.

-Cariño,creo que nuestro niño ya es un gran chaval,así que déjale respirar , el sabe que es lo que le conviene .-Al menos mi padre me entendía.-Como las pruebas para el equipo de baloncesto del instituto que son la siguiente semana, necesitaras muchas más fuerzas que una simple tostada para empezar con tus entrenamientos.-Y allí estaba mi padre el incomprensible.A veces estar con ellos resultaba un auténtico infierno.Pretendían que me comportase como alguien que no era y eso era tan intolerable como aburrido.

Entonces, como si alguien estuviera escuchando mis suplicas, apareció el chofer.

-Señor Lester, el coche ya esta a su disposición.-Nunca me había gustado lo de señor,sonaba demasiado importante y yo por el momento me sentía invisible, aun así acepte y salí de casa para adentrarme en el lujoso coche no antes de haber dado dos besos a mi madre.

En el trayecto me plante diversas maneras de hacer amigos.Tal vez apuntarme al equipo de baloncesto o a algún club no era una mal forma de empezar .En clase debía sentarme en última fila, en el comedor tendría que estar en la mesa de los populares sino pasaría a ser un simio en peligro de extinción.Cuando  el chofer aparcó el coche sabía que era el momento de empezar una nueva vida.Sin demasiadas distracciones baje del vehículo y me adentre en el nuevo mundo del instituto. Divise un gran letrero sobre la fachada del edificio, decía: Real School High .

Sin detenerme mucho en pensar entre en el edificio.Me pare a observar con detenimiento el largo pasillo de taquillas que se extendía a través de el.En el lado derecho, encontré al grupo de populares, todos ellos con sudaderas del instituto. Eran mucho más corpulentos y altos que yo.Todas las chicas que pasaban se iban entre risas y alguna parecían sonrojarse. No eran muy discretos, gritaban sin parar el himno del instituto mientras aplaudían.Más al fondo vi un grupo de preciosas chicas, todas ellas parecían modelos,eran esbeltas de mucho pecho y buen cuerpo.Pero una de ellas,destacaba entre todas,su pelo era rubio y sus ojos los azules más intensos que jamas había visto.Su voz era angelical y su risa una melodía infinita.

-¿Eres nuevo?Te veo un poco perdido.-Cuando salí de mi imaginación vi a la chica que me estaba hablando .Iba vestida con un mono vaquero y llevaba los tirantes desabrochados.Sus zapatos era unas vans rojas y de ellas sobresalían sus calcetines de rayas.Sus pecas salteadas combinaban con su moño despeinado y creaban de ella una perfecta imperfección.Sinceramente, una obra de arte.