Sex's Apettite

Recaída.

El serafín tenía frío.
Solo que podía sentir una mano calida en su mejilla y unos labios tibios en los suyos, moviéndose gentilmente. A un ritmo que conocía y amaba.

-Hmm, ¿Sasuke?

No abrió los ojos, solo subio sus manos trémulas hasta el rostro del contrario con suavidad y lo besó de vuelta.

-Idiota coqueto, no me muerdas.

Sonrió al escuchar su voz. Ronca y destrozada pero suave y lenta. Finalmente batió las espesas pestañas para mirarlo.

-Woah..

Aún era de noche y el rostro melancólico del moreno daba sombras elegantes gracias a los reflejos plateados de la luna. Tanto así que lograron que los ojos de Naruto brillaran.

-¿Qué?-no pudo evitar sonreír cuando Naruto lo acarició por el cabello. El chico solo se rió de esa manera única que el tenía, esa que lo estremecía de pies a cabeza-¿Te estás riendo de mi, dobe?

-Nunca, teme. Es solo que me estoy feliz de verte de nuevo-confesó en voz baja.

-Yo también.

Naruto seguía viéndolo como si fuera dios mismo. Tan brillante. Sonrió bobalicón.

-Volviste.

Sasuke se permitió sonreír con tristeza. No, no había vuelto. Se habia escapado de Itachi y Kyubi. Lo matarían, literalmente, cuando se dieran cuenta.
Pero lo valía. Solo por ver esos ojos ya valía completamente todo. Y no podía arruinarlo, no lo haría jamás.

-Solo estás soñando. Vuelve a dormir.

Naruto frunció el ceño y negó de manera infántil.

-¡No juegues, 'ttebayo!

Sasuke se sintió derretir cuando lo vio inflar las mejillas en un gesto ridículamente adorable.

-No lo estoy, es un sueño. Y vaya sueño, ¿quién diría que tienes sueños eróticos conmigo?

Lo vió sonrojarse de la vergüenza y la indignación y se tuvo que morder el labio para contener su risa franca.

-No es un sueño erótico y si verdaderamente es un sueño, tu, no serias tan estúpido-jadeó molesto. Hizo un cambio brusco de expresión a una astuta y el súcubo se preguntó y con que cosa le saldría ahora-Si esto es Mi sueño y tu eres el Sasuke de mi imaginación tendrás que recordarme cuanto me quieres y llamarme por apodos melosos.

El moreno quiso reír por lo ridículo y tierno que era su rubio con esa expresión triunfante en su rostro. Seguía abrazándolo en aquella incómoda posición pero era la mejor manera para sostenerlo ya que su brazo se había regenerado no mucho tiempo antes.

-Así que ¿apodos melosos y decirte cuándo te quiero? Bien, cariño, tendrás lo que tu quieras-rió ronco mientras el otro hacía pucheros. Era evidente que lo estaba disfrutando-Veamos ¿cuánto te quiero? No sé contar hasta tanto, cielo.

-¡Okay, ya entendí! ¡Es un puto sueño!-espetó cuando el moreno se inclinó a dejar un reguero de besos por su rostro sonrojado que le daban cosquillas-¡Sasuke, basta!

-¡Tu querías esto, bebé!-comenzó a hacerle cosquillas sue lo hicieron retorcerse como loco mientras largaba risotadas alegres. Llenas de vida.

Quería escucharlo reir así hasta el maldito fin de los tiempos. Asi, sonrojado y feliz, amandolo de la manera mas ruidosa y explosiva posible.

-¡Por favor! ¡N-no puedo respir-ah!- dijo en medio de risas cansadas. Se detuvo para verlo recuperar el aliento de a poco sin ser conciente de la enorme y boba sonrisa en su cara

-¿Qué?

-Si eres un sueño, dime ¿Cómo es que te siento tan real, querido Sasuke?

-Porque me adoras tanto que estas desesperado por verme, en realidad.

-Inclusive aquí, eres un egocéntrico de mierda.

-Pero aún así, no privarás a este egocéntrico de mierda de un beso ¿verdad?-se inclinó sobre el un poco y bufo cuando este se negó a besarlo-Oh, solo bésame de esa manera que tienes para hacerme caer. Tal vez así regrese.

Naruto lo miró fijamente y lo acercó lentamente para poder besarlo muy despacio, saboreando su boca con los labios hambrientos. Sin llegar a más pero siendo tanto de esa manera. Rompiendo tanto desasosiego, tantos sentimientos y tantas cosas guardadas que les supo a gloria.

-Solo regresa ¿si? No me importa que eres, solo vuelve y sé real para mi.

-Lo haré. Si así es como me recibirás, por supuesto que lo haré.

El chico giró los ojos y chisteó .

-Lo digo en serio.

-Y yo también. Volveré.

Volvio a darle un beso. Pero este sabía algo frío.
Lo estaba durmiendo.

-Sabes Sasuke... No sé que te pasa, n-no se que es lo que te lastimó y no se porque pensaste que no me daría cuenta de que estás herido.

Algo dentro de el dolió intensamente.
Besó su sien con suavidad.

-Aún no puedes saberlo, Naruto.

-Pero me lo dirás ¿Si?-ya para este punto solo estaba balbuceando contra la almohada-Entonces podré decirte que...

Comenzó a roncar suavemente mientras suspiraba con delicadeza.

-Sí, yo también.