Hondong (혼동)

PACIENTE #001

Nombre completo: 김석진 / Kim Seok Jin
Edad: 24 años.
Lugar: Anyang-Gwangcheon, Corea del Sur.
Enfermedad: Esquizofrenia. Por alteraciones durante el embarazo.

Kim Seok Jin, un chico de 4 años recién cumplidos con capacidades diferentes a los demás, "especial" era la palabra correcta que usaba su madre, cada vez que Jin abría los ojos escuchaba o veía cosas que los demás no, la señora Kim caída en depresión por el abandono de su esposo al saber que se embarazó de él. Jin pensaba que se trataba de su imaginación pero las personas que sólo él veía incrementaron sintió miedo y pánico fue en busca de refugio con su madre que fue ignorado por ella al estar en depresión por lo de su ex-marido. En los días en que Jin se olvida que era su imaginación y creía en las personas inexistentes causándole miedo a su madre lo encerraba en un cuarto durante toda la noche o a veces lo dejaba de uno a dos días encerrado.

La señora Kim al saber que estaba embarazada fue emocionada en busca de su esposo para darle la noticia pero lo encontró teniendo relaciones sexuales con la que creyó que era su mejor amiga, le pidió una explicación y este se negó a dársela, en la pelea de gritos se le escapó el contarle su embarazo, él quedando en shock la dejó sin decirle nada al día siguiente después de la discusión y la mujer con la que la engañó de igual forma se fue sin dejar rastro, cayendo en una depresión al ser abandonada dejó de comer provocándose una anorexia grave, cansada de esperar a su esposo comenzó a auto-medicarse para acabar con la anorexia sin recordar leer los efectos secundarios de las pastillas.

Cuando llegó el momento de darle vida a Jin fue a la clínica más cercana en donde un señor mayor de 70 años atendía en ese lugar, al revisar al recién nacido notó una pequeña diferencia comparado con los otros bebes que había revisado, al hacerle un examen caro se dio cuenta que en los pocos años siguientes desarrollaría la esquizofrenia, al comentarle a la madre y pedirle que comenzara con la prevención de la enfermedad ella negó el tratamiento preventivo por lo caro que costaba internarlo y las pocas probabilidades de que se curara y dejó pasar la advertencia del médico de manera que continuo con la crianza de su hijo sin tratamientos preventivos supervisados.

Jin creció y entró a la escuela todo marchaba bien sus compañeros creían que su imaginación era más amplia comparada con la de ellos pero después comenzaron a burlarlo por hablar solo o ver cosas que los demás no lo veían. El maestro llamó a su madre por la agresión de Jin a un compañero de clase causándole golpes graves mandando a urgencias al niño, ella se preocupó por las reacciones agresivas hacia sus compañeros y maestros, su actitud indiferente y solitaria en la escuela y en la casa se encerraba en su cuarto, donde se escuchaba que hablaba a la nada; el primer ataque de agresividad que tuvo en contra suya fue cuando cumplió los 9 años, sin pasar más tiempo decidió llevarlo a un psicólogo quien quedó sorprendido por la grave enfermedad deteriorada que tenía el niño le dio la sugerencia de internarlo en un psiquiátrico de inmediato para la seguridad de ella y de su hijo.

Al salir del psicólogo culpó a Jin por los errores que nunca cometió cuando ella fue la culpable desde el inicio junto con su ex-esposo pero pensó en los beneficios de ya no tener que cuidar de él, adiós gastos de medicamentos, adiós citas de la escuela por ataques de agresividad a sus compañeros, adiós estrés, adiós problemas. El niño cegado por el amor y la confianza que le tenía a su madre se dejó llevar por la falsa promesa que le dijo al llegar a casa: "Todo se resolverá te vas a curar y seremos los dos de nuevo; te esperaré e iniciaremos de nuevo en Seúl, ya conseguí un empleo ahí seremos felices ya lo veras" .Hasta que llegó el día en donde seria ingresado en el psiquiátrico de la cuidad, el niño con miedo le pidió que se quedará con él, esa acción fue la gota que derramó el vaso, su madre controlada por la ira y desesperación en quitarse la responsabilidad de su hijo le gritó sin pensar en que dejaría marca permanente.

"¡¡Por tu culpa tu padre me dejó y mi amiga me dejó para irse con él!! Nadie quiere salir con una mujer que tiene un hijo loco, nadie te quiere en esta vida, debí haberte abortado cuando supe de tu existencia en mí. Espero que jamás salgas de ahí y me dejes en paz, me dejes hacer mi vida. ¡Sólo eres una carga para mí déjame ser feliz!"- fue lo último en escuchar de su madre, al final lo ingresó al centro psiquiátrico de la cuidad. Jin fue el primer paciente más joven en el hospital con tan sólo 11 años de edad.

Al estar encerrado en el cuarto del hospital escuchaba voces, risas; veía personas señalándolo, atormentándolo, pidiéndole que se haga daño, entre más cosas que únicamente Jin lograba oír los enfermeros no lo escuchaban pero por querer regresar con su madre y cumplir con la promesa que una vez le dijo creyendo que aún seguía presente sin importar las palabras que le gritó en el día que ingreso, se impedía a si mismo hacerse daño, quería curarse lo más rápido posible para regresar con ella..... pero eso jamás llegó. Su madre cayó aún más en depresión por no realizar su sueño y falleció cuando Jin cumplía los 15 años, al saberlo dejó de tomar sus medicamentos, volviéndolo más agresivo y su esquizofrenia incremento a tal grado de transferirlo al mejor y exclusivo hospital psiquiátrico-manicomio del mundo ubicada en una isla desconocida en donde fue colocado en el edificio restringido junto con otros pacientes ese edificio era únicamente para los casos más graves y peligrosos.

Su padre fue localizado a las afueras de la ciudad en donde vivía junto a su nueva esposa quien era la amiga de su difunta madre de Jin, éste sin dar la cara o sin querer conocerlo, dijo claramente que pagaría los gastos del hospital y los medicamentos que debía tomar diariamente sin que le pidieran autorización o le hablaran, no quería saber nada de su hijo; pidió ser avisado si es que llegase a morir en el hospital para que cancelará la cuenta.

Hasta la fecha sigue en constante vigilancia en su habitación, hablando a la nada, riendo en cosas sin sentido................................dejándose caer en la locura.