INVALID; Yoonseok

02

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Subió las escaleras mientras abrochaba los últimos botones de su camisa color rosa pastel, la entrevista de trabajo que tendría en unas horas era importante en demasía, por lo que su actual situación económica dependía totalmente de este trabajo.

— Yoongi, tu nuevo profesor de historia vendrá a las 3:00 de la tarde, por favor se cortez —vocifero la señor Min desde el marco de la puerta de la habitación de su hijo, quien estaba echado en su cama con los cascos puestos y el volumen al máximo.

La madre suspiro pesadamente. la rutina del último año la estaba desgastando tanto física, como emocionalmente.

— Aja, lo que digas —murmuró despreocupadamente aun sin haber escuchado la voz de su madre, ya que era lo mismo que venía escuchando desde que el automóvil hizo lo que hizo con sus extremidades inferiores— te amo mamá.

— Te amo yoongi —la mujer sonrió. después de todo, el accidente no había provocado odio hacia ella. Sabía que Yoongi habia comenzado a odiar al mundo, pues se había pasado los últimos meses escribiendo en una especie de diario oscuro.

Y es que desde el accidente,  Yoongi no hablo durante un año completo, no volvio a la escuela y dejó de verse con sus amigos. Pero al pasar los meses, comenzó a hablar únicamente con su madre, es por eso que los antiguos profesores de Historia de el mismo habían renunciado. Yoongi podría estar muy emputecido con todo el mundo, pero eso no quitaba el hecho de que su madre había echo muchas cosas por el. era la única que estuvo con él.

Esperaba solo una llamada, una visita, un maldito mensaje. Lo espero con ansias por los primeros días, pero su disculpa nunca se hizo presente y se sentia patético por eso.

Se sentía inútil, Completamente inservible.

Y así llegó la hora en la cual su profesor de historia supuestamente llegaría, Pero en el reloj de pared se divisavan las 3:30. Treinta minutos tardes y Yoongi se estaba cabreando, extrañaba poder golpear el piso con sus pies, como acto de impaciencia mientras esperaba ansiosamente algo, pero no le quedaba nada más que golpetear nerviosamente la mesa de color caoba con sus largos y huesudos dedos.

Prontamente el timbre sonó y el blanquecino por un momento dudo en sí abrir la puerta o no, puesto que llegar hasta la puerta con una silla de ruedas era demasiado esfuerzo. A regañadientes Arrastró la silla de ruedas con sus manos y se estiró para lograr abrir la puerta de entrada, dejando ver a un chico, el cual probablemente era de su edad, con la ropa desaliñada, tal vez producto de haber corrido cuatro cuadras consecutivas.

— ¿Eres Yoongi? —la agitada voz del chico con cabello negro y sonrisa radiante hizo a recien mencionado reaccionar y asentir mientras trataba de retroceder con la silla de ruedas, chocando torpemente con un mueble situado en la entrada— Lo siento, ¿te ayudo?

Rápidamente Yoongi se negó y se adentro a la gran sala, picisionandose junto al sofá, esperando a que su nuevo profesor de historias se instalara.

— Bien —murmuró el chico a la vez que se sentaba en el sofá frente a Yoongi, quien lo miraba espectante— Mi nombre es Jung Hoseok, y seré tu profesor de Historia.

Se limito a asentir mientras mordia nerciosamente su labio. La presencia ajena lo hacia sentirse ansioso, esa estupida sonrisa en su rostro era irritante. Maldito Jung Hoseok, ¿porque sonries de esa manera tan horrenda?

— Tienes una sonrisa realmente horrenda —disparo las palabras sin antes pensar, sorprendiendo al chico que se encontraba sacando unos libros. Al ver la cara del chico,  quizo disculparse,  pero el no hacia eso,  ya no.

— Oh no,  que mal... —murmuro apenado, pero prontamente su sonrisa reaparecio— que mal que eso no me importe.

Oh mierda, estas seran las tres horas mas largas de toda la puts vida.

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All the lxve
-Yxxnji-