Justin Bieber hace una apuesta con sus amigos, enamorar a Selena Gomez, el patito feo del instituto como todos la llamaban. Nada de sentimientos de por medio, él no se podía enamorar, pero el destino le hará una mala jugada, dándose cuenta de que la...
Selena soltó una vez más su cabello y se miro al espejo, se miro de arriba abajo y viceversa, algo andaba mal con ella ahora, algo le disgustaba. Saco los pensamientos de su cabeza y se puso a pensar en otra cosa, jamás le había importado esmerarse en su apariencia, no tenía porque ser ahora la excepción, además no había nada fabuloso en su armario. Y si lo había, no sabía como combinarlo. Y no tenía ninguna amiga. La timbre sonó, Selena entrecerró los ojos, había quedado con Samuel en la heladería, no que el la viniera a buscar, además quedaban quince minutos para que se juntaran. Peino una vez más su cabello y corrió escaleras abajo para abrir la puerta, cuando la abrió se quedo sorprendida ¿qué hacía Justin en su puerta? Y ¿cómo había encontrado su dirección? -¿Qu…qué haces aquí? -tartamudeó nerviosa. No todos los días Justin estaba fuera de tu casa. -Vine a verte. –sonrió– -Pues ya me viste. -comento Selena y Justin rió- ¿De que te ríes? -De ti. -Selena bajo la cabeza, Justin entendió porque Selena hizo eso y enseguida lo aclaro– No Selena, no lo digo porque me estoy burlando de ti, es que, bueno no me refería a eso. -Selena subió la cabeza y lo miro- -Entonces… -Sólo quería venir a verte, para ver si estabas libre. -No lo estoy, saldré con Samuel en diez minutos. –dijo mirando el reloj de pared que se encontraba arriba del sillón de la sala- En ese momento una descabellada idea se le paso por la mente ¿por qué no intentarlo? -Aaam… entonces, me voy. –Justin estaba por irse, cuando Selena tomo su brazo– -Si quieres, puedes ir. -snrió– -¿En serio? –pregunto extrañado– no creo que sea posible. -¿Por qué? -Porque es una salida de amigos, entre ustedes dos. -Sí, pero ahora tú también eres mi amigo ¿no es así? –Justin sonrió asintiendo- y que mejor que una salida con mis dos amigos. -¿Tu amigo no se enojará? -Selena negó, puede que si se enoje al ver llegar a Justin, pero ella sabría como arreglarlo– entonces, podemos intentarlo. -sonrió- -Claro, iré por mi bolso, la heladería queda un poco lejos de aquí, por lo que es mejor que nos vayamos ahora.
Selena entro a buscar su bolso, no sabía lo que había echo, quizás, el comienzo de la tercera guerra mundial. Justin iba en el auto por lo que se le hizo más cómodo a ambos, la heladería quedaba a unos cinco minutos caminando y tres minutos a auto. Samuel debía estar ya ahí, Selena se puso nerviosa, esto si que haría enojar a Samuel, ahora si que se daba cuenta del error que había cometido. Además Samuel la invito con un brillo especial en los ojos y no había sonado como una invitación de amigos, pero como siempre, Selena no lo había notado.
Justin estaciono el auto y se bajo rápidamente para abrir la puerta a Selena, acto que hizo que ella se ruborizará, y a Justin sacar una sonrisa, había comenzado ya su plan de conquista.
-Espera, yo entro primero. –dijo ella, tomándolo de su brazo. Samuel ya estaba ahí, incluso había pedido por ambos, uno grande de frutilla y chocolate, con pequeños pedazos de galleta y nata. Su favorito.
(En esta foto van de salida, pero hagan como si fuesen entrando :v)
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Samuel al ver a ambos entrar al local, borro instantáneamente su sonrisa, planeaba decirle algo muy importante a Selena. Además que le molestaba que también estubiera Justin ¿Selena lo habría llamado? Sea como sea, tendrían que hablar luego. -Hola Samuel. -Selena beso la mejilla de su amigo– gracias por haber pedido ya. Samuel saludo con una leve inclinación de la cabeza, Justin repitió el acto. -Bueno, sentémonos. –dijo animadamente Selena, Justin la ayudo con la silla y ella otra vez se ruborizo mientras que Samuel revoloteó los ojos. Lo que le faltaba. -Pediré lo mío. –comento Justin y se levanto del asiento- -No te preocupes, lo haré yo. -Selena lo detuvo, no soportaba la tensión que había en el aire, al igual que haría que ellos pasarán un tiempo juntos. –¿De qué lo quieres? -Me gustaría de algodón de azúcar o el mismo de ustedes, pero no te… Y antes de que pudiera terminar él su frase, Selena ya había caminado, perdón volado a pedir la orden. El ambiente se notaba tenso, Justin estaba nervioso y como no, si Samuel se lo comía con los ojos, Justin hablo, para por lo menos aligerar el aire que se respiraba ahí. -Así que tú y Selena son amigos hace tiempo. -mascullo- Samuel solo lo miro– -¿Qué quieres de Selena? –ignoro su comentario anterior– -Nada, sólo ser su amigo. -¿En serio? –pregunto sarcástico– puede que Selena se haya tragado ese cuento de que quieres ser su amigo pero yo no. ¿Qué quieres con ella? -Ya te dije que nada, sólo emendar mi error. -Por favor, no me hagas reír, dime de una vez por todas, te acabo de decir que no me creo ese cuento. -Si tu no lo crees es tu problema ¿no? –Samuel solo lo fulmino una vez más con la mirada, cuando vio que Selena venía ya, con el helado de Justin y también con una bebida. -Te lo advierto, si la haces sufrir nuevamente te las verás conmigo. –amenazó, Justin iba a contestar enojado, pero Selena llego– -Aquí está. –sonrió pasándole el helado a Justin– ¿de qué hablaban? –pregunto sentándose– -De nada, sólo basketball. –sonrió Justin falsamente, Selena asintió no muy convencida, sabía que no habían hablado de eso, podía ver como se aniquilaban con la mirada y más la de Samuel. Sólo quería que esa salida terminará y mañana poder hablar con Samuel, debían respetarse, a pesar de sus diferencias, ahora ambos eran sus amigos y cómo tal Selena pasaría tiempo con ambos y eso debían soportarlo quisieran o no. Pero lo que menos quería era que eso le hiciera perder a su mejor amigo.
