Capítulo 2.

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Selena.

-¿Nos vamos? -pregunto Samuel, en la entrada del instituto, por suerte la jornada de clases había terminado y no tendría que ver a Hailey por lo menos, hasta mañana-
-Claro -sonreí-

Cuando llegaron a su casa, se despidió de Samuel entro a la casa, otra vez sus padres discutían, por lo mismo de siempre, el dinero. Hasta hace unos años todo estaba bien, sus padres podían estar un día entero, semanas, meses y hasta años disfrutando de la compañía del otro, los tres hacíamos todo juntos, los chicos no me molestaban, yo era totalmente invisible y así me gustaba. Como desearía que todo vuelva a ser como antes, que en mi familia no importará el dinero, si no la felicidad, y el amor que nos dábamos. Limpió las solitarias lágrimas que había en su rostro, tomo su iPod, su libro favorito, 'Patito Feo' siempre pensó y quiso convertirse en un hermoso cisne, el más hermoso del mundo, pero esa era solo un cuento, ficticio.

Termine a eso de las nueve de la noche, me lo leí varias veces al día y aunque ya me lo sabía de memoria no dejaba de leerlo. Era lo único que me entretenía y me centraba en mi mundo, a veces no soportaba las discusiones y solo, trataba de desaparecer.

Me cambié el pijama, no sin antes darme una rápida ducha, y me acosté a dormir, por suerte mis padres, ya habían parado y podría dormir tranquila hasta mañana, otro día de instituto.

Samuel pasó por mí a las siete y treinta de la mañana, como siempre lo hacía, me dijo que no estaría hasta tarde en el instituto, se debía retirar antes y que lo perdonará por no acompañarme en el día, me dejo en la puerta, se despidió de mí y se fue. ¿Qué pasaría si no tenía a Samuel en un día de instituto? Suspiré y entre, de camino a mi taquilla me fui rápido y tratando de que nadie me vea, especialmente Hailey, pero para suerte mía, tropecé con alguien, haciendo que ambas cayéramos al suelo, rezaba a Dios porque esa persona no fuera Hailey, pero al levantar mi vista, pude ver que estuve completamente equivocada, era ella. En que lío me metí.

-¿Eres estúpida patito? -dijo levantándose furiosa- Eres una estupida, ¿Por qué no ves por donde vas?
-Lo...lamento -contesté tartamudeando, no quería que nada sucediera-
-Estás me la pagarás estúpida -se acercó peligrosamente hacía mí, era hora de mi fin, no podía hacer nada, pero antes de que pudiera hacerme cualquier cosa, alguien se puso delante de mí y habló-
-Déjala tranquila Hailey, fue un accidente. -Abrí mis ojos sorprendida, era Justin, primero ayer intenta hablarme y ahora me defiende ¿qué jodidos le pico?
-¿Qué? -pregunto ofendida- Pero Justin, está estúpida chocó conmigo, me botó al suelo y ¿la defiendes?
-Sí, fue una accidente Hailey, por favor, no le hagas nada y vete a otra parte -dijo serio-
-Estás me las pagarás -me miró duramente, agitó su pelo y se marcho, con un movimiento de caderas, la vista de Justin se fijo en su figura, momento perfecto para marcharme-
-¡Hey! -pude sentir que corría hacía mí- ¿ni un gracias?
-Eeeem -lo miré- Gracias -musité y me corrí rápidamente de ese lugar, pero antes de que pudiera alejarme, tomo mi brazo- ¿qué sucede? -pregunte con la respiración entrecortada, la cercanía me tenía nerviosa, lo aparte de mi suavemente, mirando para ambos lados.
-Yo -suspiró- quería no se, hablar contigo -sonrió-
-¿Para qué? -pregunte- A nadie le gusta hablar conmigo ¿recuerdas quién soy?
-Sí pero bueno, quizás, quiero cambiar y no se, ser tu amigo -reí fuertemente-
-¡Por Dios! -exclame- ¿Quieres que me crea esa no? -pregunte aun riendo-
-Selena -suspiró- De verdad, me gustaría hablar contigo.
-No se que tipo de broma estás jugando, pero yo no quiero jugar, si me permites, no quiero llegar tarde a matemáticas. -Acomode mi mochila y ahora si, caminé hacía el salón ¿qué sucedió? Desde cuando Justin Bieber, ex novio de Hailey Baldwin, la chica más popular de la escuela, se interesaría en hablar conmigo y mucho menos ser mi amigo.

Me senté en mi banco, el asiento de mi amigo Samuel estaba vació, obviamente si el no había asistido a clases. Este sería un largo día. Alguien se sentó a mi lado, di vuelta mi cabeza, dirigí mi mirada a aquel que estaba a mi lado. No puedo creerlo, otra vez Justin, no lo tome en cuenta y saque el libro de matemática. Vi como el sólo resopló y se acomodo en su silla, mirando a Carlos ambos estaban asiendo señas extrañas. Fruncí el seño, nada bueno estaba ocurriendo. Por suerte llego el profesor y comenzó a hacer la clase.

Patito Feo || Jelena || (Adaptada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora